What Can I Do (1)《WonPil x SungJin》(Day6)

Él

Siempre la miraba, incluso cuando estábamos hablando de cosas importantes para ambos, él simplemente desviaba su mirada hacia ella. Se podría decir que lo hacía de forma inconsciente o quizás no, no tenía forma de averiguarlo.

Incluso en la biblioteca, cuando íbamos a buscar alguna novela de ciencia ficción o a veces novelas románticas, él se quedaba escogiendo alguno y mientras yo leía en la sección junto a la que se encontraba, podía observarlo de vez en cuando por el hueco que se formaba entre un libro y otro.

La sonrisa de SungJin era para mí, la más linda y sincera de todas, me gustaba ver como las comisuras de sus labios se alzaban mostrando de vez en cuando su blanca dentadura, pero saber que cada una de esas sonrisas no era para mí, hacía que mi corazón se encogiera de forma inmediata. No podía evitarlo, el verlo sonreír de esa forma cada vez que ella se cruzaba o aparecía en cada lugar donde estábamos, hacía que algo presionara mi pecho con fuerza. No me agradaba aquella sensación, pero no podía controlarlo.

El salón se encontraba repleto de chicas, uno de nuestros compañeros, Dowoon, era famoso entre ellas debido a que hacía música, no lo hacía nada mal, razón por la cual todas las niñas del instituto lo perseguían hasta su casa, lo sabía porque él no vivía tan lejos de la mía y además, podía ver cada mañana como todas ellas lo esperaban afuera para acompañarlo hasta la escuela. El único momento en que podía estar sólo o simplemente tranquilo, era en las horas de clase.

—Hoy debemos ir a jugar básquetbol —dijo SungJin, quién se encontraba en el asiento junto al mío.

—Sí, solo espero que todas esas chicas no molesten como la última vez —apunté a la gran multitud de féminas.

Él soltó una sonora carcajada, a la cual no tardé en unirme. No pasó mucho para que aquella risa se viera interrumpida nuevamente por su sonrisa. Miraba con admiración hacia mi costado, volteé la cabeza en dirección a la esperada responsable de su expresión facial y ahí estaba ella, charlando animadamente con uno de sus amigos. Volví mi vista a SungJin y luego al frente, sólo solté un pequeño suspiro y rasqué con algo de frustración, la parte de atrás de mi cabeza.

La siguiente clase iniciaba, lo que me alegró bastante, la mayoría de las chicas que estaban en el salón, habían desaparecido. SungJin prestaba atención al profesor y todo el resto estaba en completo orden.

—Recuerda, haremos equipo con YoungK, DoWoon y Jae —le dije apenas en un susurro a mi compañero de puesto.

—¿El chico malo, en chico popular y el chico nerd? —preguntó con gracia y mirándome como esperando a que el orden en el cual había preguntado, fuese el correcto.

—Exacto, con ellos —afirmé intentando no reír demasiado fuerte ante la expresión que él tenía—. Y será contra chicos del otro curso.

Él asintió y luego ambos fijamos nuestras miradas al profesor, quién explicaba algo sobre la historia de la revolución o algo así. En cuanto la clase acabó, ambos nos levantamos de nuestros asientos, debíamos ir a nuestra siguiente clase.

—Antes de ir al gimnasio, quisiera ir a la biblioteca. Terminé de leer el libro que me recomendaste, así que necesito otro —dijo dándome un suave codazo en el brazo mientras nos dirigiamos al otro salón—. Tú eres muy bueno sugiriendo libros, WonPil. Así que esperaré impaciente otra recomendación -sonrió ampliamente.

Me gustaba cada vez que decía que era bueno en algo, cada cumplido de su parte, ya sea en algo tan básico como en ser bueno recomendando libros o en ser bueno con alguna materia, para mi era algo especial, porque él veía ese lado interesante, que yo no lograba ver en mi mismo.

Asentí.

—Claro. El que leí anterior a éste —le mostré el pequeño libro de ficción que tenía entre mis manos—. Es realmente bueno, incluso diría que lo es más que el que acabaste de leer.