Marriage Not Dating [Michaeng]

Amor al Arte

Entre al aula, colgué mi bolso en uno de los percheros que se encontraban pegados a la puerta. Abrí las ventanas para que entrara el aire fresco de la mañana y después me dirigí a la mesa para escoger que pinturas y brochas iba a utilizar el día de hoy. Después de agarrar todo lo que necesitaba me dirigí a mi lugar donde se encontraba mi caballete, puse un nuevo lienzo, en la mesita de mi lado derecho puse las pinturas, brochas y pinceles de diferentes tamaños que ocuparía incluyendo mi paleta que aún no estaba sucia del todo pues aun podía combinar colores. Estaba ansiosa por comenzar a pintar pero antes tenía que esperar a mi compañera y a la profesora y para ello faltaba una hora, no tenía la culpa de ser siempre la primera en llegar así que tome mi cuaderno de dibujo y empecé a dibujar lo primero que se me venía a la mente eso ayudaba a minimizar mis ganas por empezar a pintar. Ahora que lo pensaba que sería lo que pintaríamos esta vez.

El año pasado habíamos salido de excursión al rio Han para poder mezclarnos con la naturaleza y a la vez capturando su esencia para plasmarlo en nuestros lienzos, ese había sido el proyecto final, en esta ocasión solo nos había pedido esperarla en el aula y tener nuestras cosas listas. Estaba sumamente impaciente por comenzar. Respire hondo el aire limpio que entraba por las ventanas y lo exhale tome mi cuadernillo y me puse a dibujar.

Estaba tan concentrada en mis dibujos que no me di cuenta que mi compañera había llegado y se encontraba sentada en su lugar con sus cosas ya listas.

-¡hey! Chae ¿qué haces?- me dijo

Deje un momento lo que estaba haciendo -buenos días jeong, lo de siempre- sonreí y le enseñe lo que estaba haciendo y pude ver su expresión de sorpresa

-¿Qué nombre le darás?-

-no lo sé, podría ser...-

No dije más porque la profesora taeyeon había entrado al aula con sus cosas, al parecer se había traído todo su estudio con ella, contrabajos podíamos verla. Mi profesora Kim Taeyeon era una mujer de 30 años pero a la vista no se le notaban, aun puedo jurar que se ve de nuestra edad.

Recuerdo mi primer día en la facultad y haberla visto pintar en su caballete en medio del aula, su cabello rubio estaba agarrado en una cola y uno que otro mechón se salía del agarre, como estaba de espaldas solo pude ver que traía una camisa blanca y la típica bata que usas para pintar para no mancharte, me puse a su lado para ver más de cercas lo que estaba pintando pero mis ojos se dirigieron a verle su rostro, se le veía tan concentrada en lo que hacía que no se había dado cuenta que yo estaba ahí parada viéndola como una tonta, su piel se veía tan blanca como la nieve y podría jurar que sería suave al tacto, enrojecí al pensar cómo se sentiría si la tocara, después de unos minutos voltio a verme y me pregunto si me gustaba lo que estaba haciendo.

Sorprendida por ser vista viéndola me puse aún más roja que mi rostro se sentía caliente ella rio ante mi comportamiento y se presentó como la profesora del curso, quede de piedra por aquello, había pensando que era una alumna. Cada que la veo recuerdo ese incidente empiezo a reír mientras mentalmente me regaño por los pensamientos que se me habían cruzado en la cabeza en ese entonces.

Jeong le ayudo a dejar sus cosas en la mesa de los materiales, cargaba consigo dos enormes cajas con diferentes cosas, al quitarle las cajas pude ver que lucía muy cansada y que no haber dormido pues las ojeras resaltaban a través de sus gafas, vestía un suéter color beige, tanto la bata como sus botas de hule estaban muy salpicadas de pintura, este tendría que ser un trabajo muy importante para haberse traído todo el trabajo hasta acá y lucir con ese aspecto.

Dio un suspiro largo nos miró y dijo: -bien iré por algo de café y por la modelo con la que van a trabajar- dio media vuelta y salió del aula

Jeong y yo nos miramos y nos volvimos asentar en nuestros lugares -debe ser el cansancio- menciono