No rompas las reglas.

Capítulo 8.

Desesperación, ansiedad, miedo; son los sentimientos encontrados en los chicos mientras esperan el anuncio de quienes serán los siguientes.

— Cómo lo pasaste en el circuito? — Pregunta Caty dirigiéndose a Jeff.

— Fue fatal, todavía no puedo superar todo el daño que me hice...

— No quiero ir allí de nuevo... No quiero morir... Tenemos una vida por delante y este estúpido nos la ha quitado... — Se queja Jennifer

— Hola, me extrañaron? Ya saben que hoy voy a elegir a los siguientes participantes.

— Solo dilo y deja de hacernos sufrir! — Dice Enid Furiosa.

— Ok, está bien, no los haré esperar... Los siguientes en participar serán: Caty y Nicolás...

— No pensé que fuera a competir contra él... Estoy frita...

— No te desanimes, sé que te gané miles de veces en las competencias de gimnasia que hacíamos, pero eso no es nada....

— Pero que creído... — Dice Enid en voz baja.

— EH! Te escuché!

— Ok, ya paren de hablar y vayan al circuito!

Obedecieron y cruzaron la puerta que los dirigía a tal sitio, Caty y Nicolás se pusieron detrás de los vidrios mientras esperaban la señal que les indicase el comienzo.

— Empezaran a la de tres...

— Estoy seguro de que ganará Caty — Dice Jeff

— Como puedes saberlo? — Pregunta Enid

— Me prohibieron hablar de eso...

—Uno... Dos...

— Dios, sea quien sea con quien vaya a competir voy a estar frita — Se queja Jennifer

— Tres! Ya! 

Los dos corrieron por lo vidrios rápidamente, sin darle importancia al dolor que les causaba, estaban corriendo casi a la misma velocidad, tratando de superarse el uno al otro, cuando de repente, Nicolás se resbala, y cae de cara sobre todos los vidrios que estaban a su paso, estos se le encajaban en todo el cuerpo, como pudo, se levantó y siguió su camino mientras observaba a Caty, que ya estaba empezando a escalar el muro. Ella estaba concentrada en su objetivo: Llegar al final primero que Nick; no le importaba para nada el dolor, ella solo subía y subía, vió hacia abajo notando que Nick tenía sangre por todos lados, y apenas estaba empezando a escalar el muro. Caty llegó a la cima del muro, y saltó lo más lejos que pudo hacia la piscina, mientras que nuestro querido Nick apenas iba por la mitad del muro, él notó que Caty ya había saltado, y aceleró un poco el paso, ya que sabía que Caty no era buena nadando. Las sanguijuelas empezaron a pegarse rápidamente a Caty, a ella le costaba nadar, ya que no era buena haciendolo, y las sanguijuelas succionaban su sangre muy rápido, pero aún así, trató de hacerlo lo más rápido posible; cuando se volteó, se percató de que Nicolás ya estaba en la piscina, a unos 5 metros de ella, y se apresuró más todavía. Nicolás nadaba con todas sus fuerzas para alcanzar a Caty, estaba a unos pocos metros de alcanzarla, las sanguijuelas no eran un obstáculo para él; observó como Caty llegaba a la orilla, y se quitaba las sanguijuelas apresuradamente, a él le faltaban dos metros para poder llegar a donde estaba ella...

"Logré llegar a la orilla primero que Nick, las sanguijuelas me daban un dolor insoportable, y me las quité lo más rápido que pude mientras caminaba hacia la puerta, miré atrás y observé que Nick estaba a un metro de llegar a la orilla, así que decidí apresurarme en llegar a la puerta. Al entrar, solo había un larga habitación blanca, con una puerta al fondo; corrí para tratar de llegar a aquella puerta, cuando vi algo que me detuvo al instante, era mi hermana pequeña Katie, a quien yo más amaba, ella estaba al frente de mi jugando a ser yo...