•El chico de las nubes☁•︎ Sterek

☁aparte☁

Stiles siempre se había considerado un chico bastante fuera de lo común, bastante reservado y sin un mayor interés en los demás, principalmente porque si vivía observando a los demás sólo terminaba triste, lo veían las demás personas como un extraño el cual si no hubiera sido por su único amigo, Scott, posiblemente éste hubiera sido víctima de bullying.

Cuando se trataba de sus sentimientos éste poseía una pequeña libreta que también tenía función de croquera, aquí era donde él expresaba todo su sentir, desde dibujos, poemas, simples pensamientos u otro. No era que Stiles no confiara en su mejor amigo, de hecho éste no tenía problema con contarle cualquier cosa ya que habían pasado tantos años juntos que hasta podría decir que su mejor amigo sabía incluso cuantos lunares tenía él sin dudarlo.

Un día Stiles comenzó a quitar su mirada de su cuaderno ya que en su casa las cosas se habían complicado, su madre había fallecido y nada podía ser lo mismo sin ella, ella siempre le había dicho su pequeño niño de las nubes  desde que tenía 5 años cuando éste en una salida familiar en vez de tomar en cuenta las cosas más banales de la excursión sólo se dedicó a observar las estrellas y cuando comenzó a ser más tarde se quedó acostado en un prado mirando las nubes pasar, incluso algunas las veía con formas, ese era el mejor recuerdo de sus padres, ellos cuando lo descubrieron con ternura lo acompañaron a mirar el cielo comparando nubes con las formas más raras hasta que anocheció y volvieron a su hogar, en el automóvil el pequeño Stiles se durmió.

Cercano al período de luto de Stiles un día no soportó más el dolor y rompió en llanto en el baño de la escuela, unos chicos incluso los oyó molestarle pero no le dolía ello, él sufría por haber perdido a su madre y nada le devolvería aquella felicidad que ella le daba.
De una manera extraña también aquel día que lloró en el baño cuando tomó conciencia de quienes estaban allí logró divisar por el espejo del baño a otro chico, nunca lo había visto pero parecía algo mayor a él, cuando lo miró sonrió inconscientemente y le intrigó éste, aunque no tomándole bastante atención.

Poco tiempo después de aquel incidente de él llorando en el baño comenzó a notar que alguien le dejaba notas en el casillero, al comienzo lo sintió como una broma posiblemente de alguno que lo había visto llorar pero después entendió que era alguien que no quería verle mal, en un momento le preguntó a su mejor amigo si éste había sido el de las cartas en un intento de hacerlo sentir mejor pero Scott negó, además agregó que el tono de aquellas notas era más amigable que el que él hubiera usado, inclusive de ser más cercano a lo romántico -le decía en modo de broma causando que Stiles se sonrojara y quisiera pegarle por ser tan estúpido-.

Llegó un momento donde Stiles quedó bastante dependiente a las cartas, incluso aquel desconocido le hacía sentir menor la ausencia de su madre, le hacía sentir bastante feliz con cada mensaje incluso más simple, le causaba muchas ganas saber quién era aquella persona, hasta Scott trató de ayudarle no obstante jamás lograron encontrar a la misteriosa persona.

En una ocasión la carta anónima decía que creía que a él le gustaba una amiga la cual era Lydia, a Stiles le causó bastante gracia, ella era una compañera que demoró bastante tiempo en notar la existencia del mismo y cuando lo logró era bastante notorio que jamás serían pareja, es decir... ¡Stiles era homosexual! lo cual causaba un gran rotundo NO, además a Lydia le gustaba otro tipo de chicos, en resumen su anónimo pensaba algo imposible.

Al pasar el tiempo Stiles comenzó poco a poco a gustarle aquel desconocido, no sabía cómo sucedió, si ni siquiera sabía quién o cómo era aquel chico de las cartas pero sus palabras le habían llegado al corazón y cada vez que éste enviaba más cartas llegaba a necesitar de mayor manera saber de éste, aunque no tuviera cómo, de igual manera le gustaba saber más de él y conocerle por su sentir aunque ello no le llegaba a quitar las grandes ganas de saber quién era éste.

Era gracioso porque en un momento su anónimo le llamó su chico de las nubes  tal como su madre llegó a decirle en sus tiempos pasados, a sorpresa éste no sintió pena, de hecho sonrió, era lindo que alguien que no tenía cómo saber de ese nombre (ya que ni siquiera su mejor amigo sabía porque no salía ello del círculo de sus padres) le dijera así, además era bastante más bonito imaginar que su príncipe desconocido le decía así aunque Stiles no tuviera nombre para decirle a él.

Cuando faltaba poco tiempo para acabar las clases y que llegaran las vacaciones Stiles comenzó a sentir pena, él no quería que su desconocido dejara de comunicarse con él, incluso en sus mayores sueños había deseado que apareciera un día su desconocido con una carta en su mano cuando él estaba en su casillero, que le dijera que él era su anónimo todo este tiempo y que también se sentía atraído por él.
Lamentablemente su anónimo aún no se presentaba y aunque siguiera siendo maravilloso en las cartas, Stiles seguía esperando por él, quería que se presentara, no le importaba quién podría llegar a ser porque él ya lo quería por su corazón, no le importaba si incluso le faltaba un ojo y era un pirata -vaya Stiles deberías dejar de ver películas de Disney- se decía.

Cuando acabaron las clases Stiles entró en una ligera depresión por así decirlo, tenía mucho miedo de acabar su comunicación con su anónimo, analizaba las cartas y se preguntaba quién diablos podría ser "D.H" a lo que incluso en un momento pensó en robar los archivos de su padre e ir uno por uno de los estudiantes para ver quién tenía aquellas iniciales.

Lamentablemente antes de decidirse a realizarlo su anónimo volvió a enviarle cartas, le perturbó un poco que supiera dónde vivía pero después pensó que podría tener familiares como él tenía con su padre, capaces de obtener informaciones así.

Aún así Stiles se decidió en un momento a realizar la investigación de quién podría ser aquel y para su suerte sólo una persona en su colegio (exceptuando a los de grados menores, porque claro era obvio que no podría ser un menor, ¿cierto?) tenía aquellas iniciales.

Derek Hale- dijo para sí mismo.