Capítulo 1: "¡¿Un colegio católico?!

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Capítulo 1: "¡¿Un colegio católico?!

Samantha Smith en multimedia

Mierda.

Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda y mil veces mierda.

Sentada en una larga banca fuera de la dirección, espero intranquila a que mis padres de salgan de una no muy agradable, charla con el director, debido a Ashley Reed, quien armó el escándalo más grande que pudo haber hecho en toda la historia de esta escuela y por ese escándalo, me encuentro yo hoy aquí.

Flashback

El lugar era tranquilo en lo que cabe, todos estábamos sumados en nuestros mundos disfrutando el tiempo de tener un par de minutos libres debido a algunos inconvenientes con el maestro encargado de la materia. Algunos leían/estudiaban, otros hablaban, los novios hacían... cosas de novios, otros escuchábamos música (si yo estoy ahí) y por supuesto, no podía faltar el grupo de chicas con demasiado maquillaje, faldas cortas y con un serio problema de gasto de dinero.

—Miren que tenemos aquí chicas—escuché su chillona voz por encima de la música, rodé los ojos y decidí ignorar a esta chica, no me apetecía meterme en problemas, ya tenía el ojo de mis padres y de los maestros encima todo el tiempo, dijo algo más, pero al ver que seguía sin prestarle mayor atención, en un arrebato de ira, tiro del cable de mis auriculares para así llamar mi atención.

Te he estado hablando, ¿es que acaso eres estúpida o qué?

Cálmate Sam, recuerda, estas en la cuerda floja desde hace un par de meses, golpear animales es algo penado por la ley ... 

— ¿Qué? Acaso a la perra le comieron la lengua – esta chica se había dedicado a hacerme la vida imposible desde hace tiempo, ofendiéndome y denigrando mi persona, sin mencionar sus bromas ocurrentes, al igual que ella, sus acompañantes comenzaron a reír por su "tan buen chiste", mi paciencia había terminado, mire a mi alrededor, las personas tenían su atención en nosotras, sutilmente comenzaban a rodearnos, susurrando cosas entre ellos, me incline un poco para asegurarme que ningún maestro pasara por ahí de causalidad, una vez asegurando el perímetro, cante victoria para mí misma.

Nadie sale ileso de meterse con Sam Smith, ¿quiere pelear con migo? Está bien, le daré lo que desea.

—Para tu información— junte las manos sobre la mesa— no soy solo una perra, soy perrísima— le respondí muy orgullosa, sin dejarme intimidar, ella y sus amigas dejaron de reír al instante y me miraron cruzadas de brazos y con una mirada burlona— y ...no creo que te agrade saber esto, pero debo admitir que la única persona que me ha comido la lengua...—solté una risita cubriendo mi boca con burla— no ha sido más que tu novio, besa muy bien, eres afortunada— me relamí los labios fingiendo recordarlo. Ashley me miro con los ojos muy abiertos, parecía que pronto se le saldrían de sus cuencas, su piel paso de un color pálido, con unos ojos que reflejaban decepción y tristeza, a tener la cara roja como un tomate, con sus ojos chispeando de furia.

¡Wow! Esos cambios tan radicales no deben ser normales en una persona, ¿Verdad?

— Ay por favor, Smith— hablo después de lo que me pareció un largo rato, se notaba que su voz estaba a punto de quebrarse y que trataba de ocultar con su burla y la mirada llena de furia que me dirigía solo a mí, por un momento llegue a sentir verdadera pena por ella — Mi novio nunca me engañaría con... una niñata cualquiera como tú—escupió señalándome, en sus ojos asomaban las lágrimas — estas mintiendo.

Nuestro pequeño gran secreto  [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora