Happy | L.S

Capítulo 1

Cogí el autobús más rápido hacia el hospital. Antes de entrar por la puerta me paré y suspire. Me dirigí a la cafetería donde supuestamente me esperaba la madre de Louis. Nada mas verla me dirigí hacia su mesa.

-¿E-está bien? ¿Cómo ha pasado? Me dijo que ya estaba en casa, yo...- No podía más, no podía parar de notar cómo pequeñas gotas caían de mis ojos.

-Todo está bien, tiene un par de golpes en la cabeza y un esguince en el tobillo. Lo que de verdad nos preocupa es que...- parece no estar muy segura de decirmelo- Louis a perdido la memoria

-¡¿Qué?! ¿Cómo que ha perdido la memoria?

- No la ha perdido totalmente, de hecho no estamos seguros de lo que ha podido afectar el accidente a su cuerpo.

Me tuve que sentar en el asiento frente a ella para poder asimilar todo. Tapo mi rostro con las palmas de mis manos, las cuales están levemente húmedas debido a mis lágrimas.

Tomo un largo pero relajante suspiro,  intentando tranquilizarme.

Las lágrimas salian de mis cuencas sin mi permiso, no lo podía controlar.

Mi mente viajaba hasta el momento en el que él me contó todo.

Aquel momento en el que él estaba bien, a mi lado, con cada recuerdo en su memoria.

Nos encontrábamos en la playa a altas horas de la madrugada. Sentados uno al lado del otro,  disfrutando de la compañía mientras mirábamos a nuestro frente.

El mar estaba tranquilo y la luna se reflejaba en él.

Todo era como un manjar de sentidos. La vista era maravillosa.
El olor a agua salada se filtraba por mis orificios nasales. El sonido del agua removiendose y las gaviotas parlotear en el aire hacia una melodía relajante. El viento daba contra mis brazos,  pues tenia una camiseta de mangas cortas, y se calaba entre los brazos pero de alguna manera me gustaba,  me hacia sentir vivo.

Me recuesto en la arena,  con mis brazos cruzados detras de mi cabeza, como si fuera una almohada,  y prosigo a cerrar mis ojos.

Siento la arena contra mis brazos,  fría.

-¿Harry?

-¿Mhmm?

-Hace tiempo que no me cuentas nada de tus... Amoríos.

Río desganado, aun sin abrir los ojos.

-Bueno... No hay nadie actualmente.

-¿No? -pregunta extrañado.

-Ajá.

-¿Harry?

-¿Si?

-¿Nos bañamos?

Abro un ojo y lo miro,  dibujando una sonrisa ladina en mis labios.

-¿Lo dices enserio?

-¿Por qué no? -ríe.

-Bueno,  ¿por que no?- digo y me reincorporo.- ¿Tienes toallas en tu coche?

-Creo que tengo dos. -me sonríe.

-Genial. -digo para a continuación levantarme,  dándole la espalda a mi mejor amigo,  y me quito la camiseta,  sintiendo el frio aire golpear contra mi espalda y torso.

Miré a Louis pero el desvío la mirada rapidamente a sus manos,  lo ignoré.

-¿No te desvistes? -digo mientras bajo la cremallera de mis pantalones y me los bajo,  no sin quitarme los zapatos antes.