Problemas de papá

Aquí empieza la locura

Imaginense a Julia en su cama con la puerta entre abierta viendo a su padre gritando por celular.

-Me importa un carajo, no voy a permitir que me robes el puesto por el que tanto e trabajado- Dice el padre molesto, casi apunto de explotar.

Yo en ese momento sabia que algo andaba mal pero no lograba decifrar el problema; mi mente luchaba con millones de ideas, así que en un momento me canse y se me ocurrio algo un poco loco  pero era la única solución de salir de dudas, espiar a mi padre; definitivamente iba estar en problemas si me padres se enteraban pero era tan grande mi curiosidad que decidí hacerlo y ahí empieza la locura.
Salgo de mi casa corriendo hacia la papelería de Doña Karla, compro un cuaderno de 10 pesitos y una caja de plumas de colores para empezar mi investigación, que podia terminar en desgracia pero mi madre siempre dice «intentalo que pierdes».

Al llegar a mi casa verdaderamente emocionada empece a escribir.

-1er PROBLEMA

Pero en ese mismo instante llega mi hermano a decirme que me apurada por que había una comida muy importante con mi abuela y no debía ir así vestida, todas mi esperanza de escribir mi gran investigación terminaron, no podía negarme a una comida con mi abuela solo habían pasado 2 semanas de la muerte de mi querido abuelo debía apoyarla.

Me pongo una camisa de cuello polo rosa y unos pantalones muy comodos de color beige, me veia muy formal, supongo. Salgo de mi recámara, subo al coche y escucho decir a mi padre.

-NO!! Amada mía no robaran mi puesto de trabajo, menos una persona que no tiene idea de la vida.- hay un silencio incómodo; trato de desaparecer ese silencio con mis tipicas preguntas.
-¿Qué es mas rapido un jaguar o un avión?- Pregunto yo un poco avergonzada por la estúpida cosa que dije.
- Hija ahorita no tengo ganas de contestar esa pregunta, en otro momento será- lo dice desepcionado.

Llegamos a casa de mi abuela genial, lista para pasar un momento triste. Como les comente la gente supera diferentes las muertes unas de manera bien y otras de mala manera, en el caso de mi abuela fue mala manera; no paraba de llorar, no lograba encontrar la paz interior.

Entramos a la casa de mi abuela y vemos a mi tía Maria le preguntamos donde estaba mi abuelita ella dijo que no queria bajar. Decidimos dejarla sola, estaba pasando un mal rato; era mejor comer solos con mi tía Maria.

La comida fue un poco incomoda más incomoda que en el coche había un silencio oscuro, pense que era por que mi abuelo no estaba presente pero en un instante empezó haber gestos de odio entre mi padre y mi tia Maria. Gracias a Dios se cortaron las miradas vengativas, por que sono el timbre. Quien era haa estas horas.