capitulo 24

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Dos años después...

De aquella fantástica boda solo quedan los recuerdos retractados en un álbum de fotografias. y aquella lluvia de arroz y aplausos desenfrenados se quedan plasmados en la memoria de Natalia, al recordar aquel día se sentía la mujer más dichosa. Ahora en su nueva casa en el noroeste de Bilbao vivía muy feliz al lado de Gustavo. Rodeada de los lujos que siempre quizo tener. El parecia ser el hombre perfecto para ella hasta el momento. Natalia gozaba de un trabajo como sicologa en una entidad estudiantil. Mientras Gustavo seguía siendo un poderoso ejecutivo de bienes raíces. Como cualquier pareja vivían para sostenerse, tenían todo lo que necesitaban pero el ritmo de vida que llevaban hace que las primeras brechas de aquel matrimonio salgan a la luz.

—que esperas que haga trabajo. Todo el día para mantenerte—dice Gustavo—No tengo tiempo para tus caprichos.

Cada vez más la relación se hacía tormentosa. Gustavo aparentemente vivía trabajando todos los días y ya no tenía tiempo para Natalia. Ella reclamando su falta de atención hacía que las discusiones fuera el pan de cada día.

—ya me estas hartando Natalia!—cierra Gustavo una de las tantas discusiones que habían tenido. Generando un largo silencio entre ambos—discúlpame Natalia no debí gritarte así, Lo siento mucho—Dice Gustavo mientras la abraza. Natalia queda sorprendida con aquella acción. Una parte de ella le decía que Gustavo seguía siendo el mismo aunque intentaba ocultarlo. ella seguia preguntadose si Gustavo de verdad había cambiado. Solo el tiempo le daria las mejores respuestas...

***

El temor, y la incertidumbre, crecian. Después de aquella reacción de gustavo para ella cambia todo y la desconfianza hace que Natalia empieze a ver a Gustavo con otros ojos. El seguia siendo aquel hombre celoso compulsivo con máscara de buen esposó. Sus acciones empiezan a cambiar y las interminables noches a su lado seguian confundiendola más.

Una noche mientras la lluvia invade la ciudad de Bilbao y las tempestades reflejan sus peores temores. natalia desde su alcoba, descansa al lado de Gustavo, mientras una gota de lluvia cae sobre su cuerpo. Luego varias de ellas humedecen la habitación donde dormian

—Gustavo creo que debemos arreglar este problema, no puedo seguir durmiendo—Dice Natalia mientras lo sacude para que despierte—Gustavo despierta—Le dice.

—mañana lo arreglamos. Si, por ahora déjame dormir—Dice gustavo tirando un par de sábanas sobre su cuerpo.

No había sido la primera vez que Natalia le reprocha. Su desatención termina cansandola...

—te agradecería mucho si me ayudas a tapar esa gotera jorge, La lluvia humedece toda la cama—Le comenta Natalia a un vecino cercano.

—por mí está bien, vamos y te ayudo—Contesta Jorge un chico un poco más joven que ella...

Faltarían un cuarto para las siete y a esa hora Gustavo regresa de su trabajo totalmente cansado. Despues de estirar un poco los hombros, baja las maletas al suelo y se desabrocha la corbata.

—Natalia!—Grita—Estás aquí?—Pero ella no le contesta. El incómodo silencio Impacienta más a Gustavo—oh! Margot has visto a mi esposa—le pregunta a la empleada.

—la señorita Natalia está en su habitación—Responde Margot, dicho esto gustavo camino hasta el cuarto y al llegar encuentra la puerta entreabierta. Los susurros que se escuchan, hacen que abra rápidamente. Al entrar encuentra a Jorge y Natalia en el cuarto

—que esta pasando aqui—Dice  gustavo enojado, Al notar a Jorge en la habitación—que esta haciendo el aqui?

—gustavo, no es lo que piensas. Solo me esta ayudando con las goteras que hay en el cuarto—Dice Natalia asustada.

—claro que es lo que pienso—Dice gustavo. Acercándose de manera amenazante a jorge , Natalia lo sostiene e impide que lo golpee. El chico igual de amenazante se le acerca.

—solo la estaba ayudando, No te atrevas a golpearme—le dice,  Sus palabras hacen que Gustavo se altere. Este se le acerca nuevamente e intenta golpearlo, Natalia se interpone.

—Gustavo, que pasa con Tigo. Por que me estás haciendo esto—Le dice natalia sollozando—jorge vete por favor—Dice con lágrimas en los ojos

—estás segura Natalia?—dice Jorge.

—si, por favor vete— le contesta—no estába pasando nada entre el y yo—termina de decir cuando Jorge sale del cuarto.

—no me creas tan ingenuo Natalia que hacias encerrada con ese tipo aqui—Dice Gustavo.

—ya te lo expliqué—Dice Natalia más nerviosa, los inimaginables celos de gustavo lo cegaban por completo; el solo volvió a ser quien siempre había sido.

—te voy a creer—dice Gustavo retomando la calma—Pero si me entero me estas mintiendo.

—no estoy mintiendo gustavo. Te lo juro—dice Natalia interrupiendolo.

—si me entero que me estas mintiendo, me vas a conocer—responde Gustavo infundiendo su posesiva mirada en natalia...

Quiero Robarme A La NoviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora