Era 19 de Junio, Josh y yo íbamos por un licuado al primer receso como todos los días, Josh se había vuelto uno de mis mejores amigos, lo conocí en mi clase de literatura, era increíble que el tomara ese curso debido a que era un monstruo escribiendo, pero era buen chico, nos la pasabamos bien juntos, sus ocurrencias hacían reír a todos en el grupo y siempre es agradable su compañía.
Nuestra rutina ha sido la misma desde hace dos semanas cuando abrieron una tienda nueva en el colegio, los licuados eran nuestro único objetivo cuando salíamos al primer receso, pero por alguna razón que para ese entonces desconocía, Josh me detuvo en medio del camino de adoquín cuando estábamos a punto de llegar, la pequeña tienda quedaba justo en la entrada al colegio.-Ana hoy no compraremos licuados
-Josh no he desayunado, claro que compraremos licuados.- noto en su rostro que algo no va bien.-¿Ha pasado algo?
-Hay algo que tienes que saber y dudo que después de enterarte quieras comer.- Veo el rostro serio de Josh y empiezo a alarmarme.-Veo como Josh me hace una mueca para que vea atrás y allí ví a Franco, aproximándose a paso lento, leí en su rostro las malas noticias, y efectivamente, tal como lo dijo Josh, ya no quería el licuado...
Para que entiendan esto, primero debo contarles la gran historia de Franco con su hasta entonces ex novia Adela.
***FLASHBACK***
Franco y Adela se conocieron gracias a un amigo de Franco, quien en ese entonces salía con la hermana de Adela, Franco es un romántico empedernido y no tardo mucho en creer que ella era el amor de su vida, las cosas al inicio eran normales entre ellos, eran la típica relación de amigos que quieren ser algo más pero intentan no apresurar las cosas y dejar que el momento los lleve.
Esta historia llego a su punto cúspide, cuando Franco decidió pedirle ser su novia y ella acepto sin mas, se que las cosas estuvieron bien el primer año, el tiempo siguiente las cosas se complicaron para ambos, Adela comenzó tener celos extremos y a controlar cada cosa que Franco hacía, al poco tiempo de que las cosas comenzaran a ponerse extrañas entre ellos, Franco decidió dejarla, lo cual permitió a Adela conocer a otro chico quien después de tres semanas pareció no cumplir con las expectativas que ella esperaba y lo dejo, regresando a sus viejos caminos, Franco decidió que podían intentarlo una vez más y aunque las cosas no funcionaron como esperaban y decidieron dejarse nueva y definitivamente, fue suficiente para que lo que aquella pequeña decisión causo me rompiera el corazón.
***FIN DEL FLASHBACK***
Franco se acerco a mi y tomo mi mano como lo hacía de costumbre cuando quería pedirme perdón por algo, mi mente se posicionaba en cada posible escenario, para contrarrestar el impacto, pero lo que Franco me dijo aquella mañana, jamás había pasado por mi mente.
-Adela está embarazada, y de verdad lo siento Anne, yo no quería hacerte daño.
SHOCK... mi mente se quedo en blanco, y sentí como una lagrima brotaba mientras intentaba sostener su mirada fija en mi, la pregunta estaba de más, lo sabía pero de igual forma lo hice
-¿Es tuyo?- Franco me vio con aire de sarcasmo, negue con la cabeza instintivamente, Franco estaba parado frente a mi fijando su mirada en cada movimiento que hacía. Nadie nunca me había roto el corazón como lo hizo el. Limpie mis lagrimas, asentí con la cabeza y me marche, eramos unos niños para ese entonces, eramos unos niños y Franco sería papá.
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Quedate en Domingo
RomanceEs veinticinco de julio del año dos mil seis y estoy enamorada de alguien... aunque aún no se de quien. En las novelas románticas siempre escuchamos la versión de la chica que sufre por conseguir al amor de su vida y siempre está la mala del cuento...