¿Querido Diario? Nah...

Rat... Oh, oh (Parte 2)

Desde aquel momento, hasta la noche en que llegaron Jed y mi madre a casa por fin, no pude quitarme la situación de la cabeza. A ese chico, para ser sinceros.

Lo sé, mucho alboroto, pero así eran las cosas y en realidad, sentía ganas de conocerlo mejor. ¿Quién sabe? Tal vez también yo le había gustado y podríamos congeniar.
Pff, sí, como no...

Jed tenía 13 años, pero era un auténtico amargado. De verdad que a veces parecía mucho mayor que yo, y no es que sea inmadura, ¡No, señor!
Es que él simplemente no soporta mis... Comportamientos, sólo a veces, claro.
Y bien, entiendo que a los 19 años quizá, sólo quizá debería ser más centrada, menos payasa, más madura, menos dependiente, bla, bla, bla...

¡Patrañas! Conservo mi niña interior, de verdad. Ya habrá tiempo de madurar. ¡Ni que fuera una fruta, Jed!

Volviendo al tema, sabía que hablar sobre aquel chico bello con mi hermano, iba a hacerlo molestar, así que a eso me dediqué el resto de la noche y buena parte de la mañana.
A hacer bromas de estilo: -A ver cuando cambias otro juego con ese bombón... *Cara pervertida*

También cosas como, -Si quieres pasarme su número de teléfono, yo no me opondría... *otra cara pervertida*

Lo cierto es que cuando decía eso, me imagina cómo sería, si (supongamos) le enviara un mensaje. A veces, lo admito, desearía tener más actitud respecto al tema.
Jamás, y digo jamás he tenido un novio ni nada que se le parezca. Tampoco me he quejado ni deprimido, como hace la mitad de la población femenina al encontrarse sin pareja, sola y con un futuro lleno de gatos qué cuidar.

¡Pero! Cosas como lo sucedido con aquel chico me hacían plantear la idea de cómo sería si estaría en una relación...
Rápidamente sacaba la idea de los mensajes de mi cabeza y me dedicaba a limpiar, o seguir molestando a Jed, según lo que me diera la gana.

Al día siguiente del intercambio y luego de comer una deliciosas hamburguesas caceras hechas claro por Kasi, su servidora, le pedí a Jed su teléfono para compartir datos móviles al mío (porque sí, como era de esperarse, soy de ese 0,00000001% de la población mundial que carece de una red WiFi en su hogar) cuando un cosquilleo extraño recorrió mi estómago y me hizo temblar las manos.
¿Podría ser que...?
Nahh... ¿O sí?
El numero del muchacho estaba a mi alcance... A sólo unos toquecitos en la pantalla de distancia.
Suponiendo que... No sé, me robara su número de teléfono, ¿Qué habría de malo en ello?

No es como si fuera a escribirle, ni mucho menos. Sólo sería para recordarlo de vez en cuando y quién sabe, tal vez algún día tomaría coraje y le escribiría, pero hasta que hashtag doña cobarde hiciera algo así, podrían pasar siglos, y siglos, y siglos...

Rápidamente y sin pensarlo entonces me robé el número de teléfono y me sentí como si asaltase una librería, ¿maravilloso, verdad?

Lo agendé y entré en Whatsapp para asegurarme de que se agendara correctamente. Así que sí, allí estaba el perfil del Whats brillando en la pantalla de mi celular... Pidiendo a gritos que le mandara un mensaje.

¡No! ¡Vade retro, Satanás! ¡Fuera, impulso de idiotez!
No le escribiría, imposible. Es decir, ¿qué le diría?
Y entonces, entré en crisis.
Repentinamente deseaba escribirle como a nada en el mundo. Quería conocerlo, hablar con él, saber si yo le había interesado tanto como él a mí.

De inmediato entré a Messenger para hablar sobre aquello con Cinthia, mi mejor amiga en todo el fucking mundo (literalmente). Ambas éramos de países diferentes pero eso no nos había impedido mantener una amistad llena de honestidad y cariño. Y en ese momento le necesitaba, le necesitaba para persuadirme de lo que mi estúpido cerebro quería obligarme a hacer. ¿O tal vez era mi corazón?

Como era de esperarse basados en mi suerte, ella no estaba conectada. ¡Fantástico!
En cambio, a quien sí vi en línea es a Milo, un amigo de Cinthia que había conocido hacía unos meses y con quien nos llevábamos bien.

YO: Necesito aiuda! :'v

MILO: ¿Qué te sucede, Kasi?

YO: Hay un chico... Que conocí ayer y me robé su número :'v Y ahora me han dado ganas de hablarle!!

MILO: :v
MILO: Pues hazlo

Okey... Tal vez no fue taaan buena idea.

YO: Khaa!?? Y qué le digo? Y si me rechaza? Y si no le gusté? Y si tiene novia? Y si en realidad tiene como 14 años!?!? CON ESTOS CHICOS SUPERDESARROLLADOS YA NO SE SABE, CARAMBA!

MILO: Tranquila :v Háblale, anda. El que no arriesga, no gana
MILO: Hazlo
MILO: Hazlo

YO: Y qué le digo!? x2
YO: Me voy a morir :'v Ya, olvídalo

MILO: Estás exagerando las cosas... Sólo dile "Hola" y a ver qué pasa
MILO: Eres linda tanto en personalidad como físicamente, seguro le gustaste

Repito: Creo que no fue buena idea, porque luego de unos minutos de chat con Milo me envalentoné e hice lo que más temía;
LA ESTUPIDEZ MÁS GRANDE QUE IMAGINARÁS.

Le mandé un mensaje.