Dejé la obra. Y si de primeras el sentimiento de culpa y arrepentimiento no tardó en llegar, fue cuestión de horas para que este se disipara. Llamaron a mi madre, y la bronca del siglo que cayó sobre mí fue de dimensiones colosales. Actualmente me encontraba suspensa en Lengua, y si no sacaba al menos un nueve en mis dos últimos exámenes, este trimestre se iría a la mierda.
Mi madre sabía que yo no conseguiría esa nota, y yo, pues también lo sabía. Así que me tocaba ir a recuperación directa.
Me recriminó el porqué de haber dejado una mierda de obra, jugándome la nota media que influiría en mi futuro, y la cosa empeoró porque no sabía que decir, simplemente me mantenía en silencio, recibiendo los gritos indignados de mi progenitora, y mordiéndome la lengua para no mandarla a la mierda de una buena vez.
–Estás castigada hasta que a mí me dé la gana. Sinvergüenza, que no te importa una mierda el esfuerzo que hacemos para que tú puedas estudiar. Eres una desagradecida, SunHee, todo por una obra de teatro. ¿Tanto te costaba hacerla? –cuestionó con dureza, mirándome con los brazos cruzados. –¿Es que no podías hacer ni eso bien?
Bajé la mirada, porque simplemente no podía enfrentar la decepción en sus ojos.
–Te he pedido perdón ya –susurré jugando con mis dedos, temiendo su respuesta.
–Tu perdón me vale una mierda ahora mismo, perdona que te diga –escupió. –Sé que no te vas a sacar la nota que te han pedido ni de coña, así que más te vale ponerte las pilas en la recuperación o sabrás lo que vale un peine. Y ahora vete a tu habitación a tontear con tus pósters, que eso se te da muy bien.
No dije mucho más. Me levanté del sofá donde estaba sentada. Porque así fue, recibí toda la charla sentada, con ella en frente mía, acorralada y sin escapatoria. Subí las escaleras hasta mi cuarto, y una mueca atravesó mi rostro al ver el guión de la obra en mi escritorio.
Sin mucho ánimo lo cogí y lo guardé en uno de mis cajones, deseando no verlo nunca más, pero con la sensación en el pecho de que no debía tirarlo.
Dolía un poco eso de decepcionar a tu madre. Que mencionaran el esfuerzo que hacían cuando tú sólo lo desaprovechabas. Pero quería creer que si yo, en algún punto de esta historia, le hubiera contado el porqué de todo esto, me habría entendido.
Mi teléfono vibró entre mis manos, y sin mucho ánimo observé la pantalla con una mueca.
[Yoongi🌳]
17:12 pm
“¿Estás bien?”
“No has venido al resto de clases, y me he preocupado”
“Además, el señor Lee ha interrumpido la clase hecho un energúmeno diciendo que necesitaba un Romeo con urgencia para el ratas”
“Han cogido a Cho, y el papel de ella se lo han dado a otro”
“¿Qué ha pasado?”
17:14 pm
“Mañana te cuento”
“Pero tranqui tronqui, que estoy bien”
Tiré el teléfono hacía la cama, y yo hice más de lo mismo, tumbándome en el colchón, mirando el techo como si fuera algo tremendamente interesante.
Y mi padre apareció entre mis pensamientos. Y la vergüenza de imaginar que pensaría de mí. Hacía tanto que no lo veía, hacía tanto que no coincidíamos en la misma mesa para cenar. Años, quizá.
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FAT [BTS-Jeon Jungkook]
Fanfic1° Temporada _________________ Soy gorda. Sí, como lo lees. Pero gorda real, de verdad, con mis lorzas reglamentarias, no de esas que le sobran dos kilos y se autollaman así con un pucherito en los labios. Puestos a decir cosas, soy gilipollas tambi...