Nieve

Comienzo

"Por que este lugar inmutable
siempre te dara la bienvenida..
Vergil.."

-Abrió los ojos de forma pesada no sabia en que momento se quedó dormido, se incorporó lentamente se encontraba en el sofá de local.. De su hermano menor. Miro hacia aun lado y enfrente de el estaba la niña colocando en un porta retrato Rojo-Sangre una foto- ¿Que haces? - La pregunta era estúpida pero debido que no había entablado una conversación con la niña era lo más apropiado, aparte de que no había señales de Dante-

-Casi suelta lo que tenía en las manos por escuchar la voz de su tío, termino de colocar la fotografía para después voltear a verlo- Hoy es navidad y quizá cambiar los porta retrato.. - Decia muy feliz mientras sus ojos brillaban con ilusión, volvió a ver la fotografía para extenderse la- Es mi papá junto Con mamá..
-Extendió su brazo para tomar el objeto para contemplarlo, no iba a hace grosero con ella-

En la foto se podría apreciar a Dante hace unos cuantos años, con un ligero rubor en las mejillas mientras era abrazado por una mujer por el cuello. Ella tenía el pelo largo y rojo de piel ni morena ni blanca, de ojos verdes. La mirada que ambos se dirigían era de amor y anhelo, como la que sus padres se dirigían de lo poco que recordaba.

Era muy hermosa -Le dijo mientras se lo devolvía- Te pareces a ella físicamente pero en lo demás te pareces a Dante..

-Se sonrojo por el halago mientras terminaba de colocar la otra fotografía en aquel porta retrato plateado- Mamá se llamaba Liliuth.. -Dijo en un susurro apagado-

-Nunca fue bueno consolando a alguien y menos ahora que apenas la iba conociendo- ¿Como sabias que estabas ahí? -Era una de las cosas que más le intrigaba nunca lo había visto -

-Comenzó a jugar con sus dedos en señal se nerviosismo- Bueno.. Tuve un sueño -Empezó a ruborizarse por la mirada expectante del mayor de los Sparda -Era una mujer de voz suave y muy cálida, no la vi muy bien pero recuerdo que me dijo que no importará el lugar o la distancia que fuera. Que siguiera el aroma a duraznos, ahí habría alguien -Lo dijo con una gran sonrisa mientras se paraba del suelo y se llevaba ambos retraso para colocarlos en el escritorio de su padre-

-Alcanzó a ver la foto de ese porta retrato plateado era de su madre, estaba impresionado pues no podía moverse o decir nada la persona que se había comunicado con la niña solo pudo ser ella aun después se tantos años seguía viendo por ellos-

Rose, ven ayudarme - Esa era la voz de Dante que salía de la cocina-

Si papá -Decía feliz mientras corría a la cocina-

-Se acercó hacia su hermano al verlo tan metido en sus pensamientos, coloco una mano en su hombro- Vergil, deberías tomarlo con algo de calma - Camino de nuevo hacia la cocina para ir por la comida- Por algo re están dando otra oportunidad por el tiempo perdido-

-Traia los platos para colocarlos en la mesa cerca de donde estaba el billar al menos estaba vez no serían solo ellos dos-

-Vio como la niña colocaba Las cosas y ver como Dante salia con una cacerola, ver esa imagen le recordaba cuando eran niños cuando aún tenían a sus padres. Sonrió de forma muy leve mientras se paraba de su lugar y se acercaba a ayudarlos, ya habría tiempo para pensar el porque estuviera de nuevo ahí. Por lo mientras disfrutaría unos momentos con su hermano y su sobrina, no volveria a desaprovechar de nuevo esto pues de todas formas el todavía debía buscar a su hijo pues era lo último que recordaba-