A pesar de todo, siempre te amaré.

Prólogo: El inicio de una historia de dos enamorados.

Prologo:  El inicio de una historia de dos enamorador.

La gran fiesta de propuestas de compromiso a llegado, el joven doncel Harry Potter, estaba realmente nervioso por lo que pasaría después de esta noche, sus padres verían que pretendiente es el mejor, y ellos tratarían de hacer avances con el y sus padres.

Sus amigos y otras familias también están invitados, al menos le tranquiliza saber que estarían sus amigos para apoyarlo.

"Harry, sal ya hijo, los invitados ya han llegado" escuchó a su madre detrás de la puerta de su cuarto. Suspiro por enecima ves en el día y terminó de arreglarse amarrándose el cabello en una coleta baja y poniéndose un collar de plata con una gema de color esmeralda en medio.

Bajó al livin de fiestas donde su padre lo esperaba en el inicio de las escaleras, le tomo la mano una vez y llegó abajo, los invitados lo veían con intriga, los pretendientes lo veían con más detenimiento. Bailo con su padre antes de poder ir con sus amigos.

"Hola chicos" dijo Harry con alegría de verlos.

"Hola, te vez hermoso Harry" dijo Hermione dándole un abrazo.

"Como te sientes amigo?" Le Preguntó Ron, su amigo varón.

"Estoy realmente nervioso, no se quién pedirá mi mano"

"Podría ser cualquiera, o incluso varios a la ve...¡¡¡" Ron no termino la frase por el codazo que le dio Hermione.

"No ayudas Ron" le reprendió.

"Lo siento"

"No te preocupes Ron, tienes razón" le dijo Harry. Siguieron ablando por unos minutos antes de que los pretendientes empezaran a acercarse a Harry para bailar o hablar. Harry no podía decir que no, pues era una fiesta precisamente para eso, evaluar.

Después de unas 4 horas, he incontables pretendientes, pasaron a cenar, el Lord Potter estaba en la cabeza de la mesa principal, a su derecha su esposa y a la izquierda su hijo doncel. En los demás asientos estaban personas de alta clase y fortuna, los Malfoy, los Black, los Gaunt y el joven Severus Prince, que estaba como invitado personal de Lili Potter.

Severus se sentó a lado de Harry como si nada, la cena transcurría tranquilamente para todos, Harry se notaba algo nervioso y hasta irritado, no estaba acostumbrado a este tipo de cosas de gala.

Severus se acercó a su oído para susurrarle con una ligera sonrisa.

"Es que su majestad necesita de mi compañía para que se tranquilice un poco?" Harry dio una media sonrisa, relajando los hombros.

"Mira quien habla, el que se llama literalmente príncipe" Severus rió a eso.

"Auchs" dijo sacando una ligera risa en Harry.

"Y dígame joven Harry, cuál sería su pasatiempos favoritos?" Preguntó un Lucius Malfoy que estaba con su esposa y el pretendiente Draco a su lados.

"Bueno señor Malfoy, yo disfrutó mucho de la compañía de los animales, me resulta muy divertido y des-estresante" respondió Harry con una sonrisa amable, noto la mirada que su madre le dio. El sabía que no le gusta que dijera que le gustaba andar siempre en el barro o algo así, y era precisamente por eso que lo decía.
"Animales?" Preguntó Lucius con intriga. "Porqué sería más agradable la compañía de animales que de humanos?"

"Bueno, porque a los animales, no les importa lo que le digas, ellos jamás revelaban tus secretos" dijo divertido, noto que el pretendiente de los Gaunt, el señor Tom Ridley, tenía una medía sonrisa.

"Tiene razón en eso joven Potter, los animales no son capaces de hablar, eso los convierte en los mejores confidentes" dijo Ridley.

"Y que tal van las cuentas señor Ridley?" Preguntó mi padre.

"Van muy bien, a decir verdad, mi familia empezó a hacer negocios con los Lestrange y los Carrow, se trata de un proyecto social que..." se detuvo, luego me miro y miró a las mujeres de la mesa "mis disculpas, supongo que debe ser muy aburrido para ustedes que los varones se pongan a hablar de política así de repente"

"Tiene razón, mis disculpas por sacar el tema" dijo mi padre.

Siguieron hablando normal de otras cosas, yo, sin embargo, me enojó que dijera eso, discriminando a los donceles y mujeres del tema de política, solo por ser lo que somos, me molesto mucho.

"Mis disculpas, debo retirarme un momento" dije al tiempo que me levantara, los varones de la mesa, menos mi padre, se levantaron por cortesía. Salí del lugar de la fiesta para adentrarme a los baños más cercanos. Me moje la cara y respire profundamente para tratar de calmar mi enojó, funciono después de un par de minutos. Unos toques suaves pero firmes, tocaron mi puerta.

"Si?" Pregunté desde adentró.

"Se encuentra bien su majestad?" Sonreí ante el apodo y la voz del otro lado, abrí inmediatamente la puerta y deje pasar a Severus.

"Ya estoy mejor" Severus le puso seguro al baño para luego tomarme de la barbilla con suavidad y darme un beso tierno y prolongado, asía ya una semana que no sentía sus besos, desde que el tuvo que ir a otra misión como general de la Guardia Real de Inglaterra.

Cada vez que se va, me tiene con el corazón siempre estrujado, a la espera de que regresé pronto. Severus pertenece a una de las familias más importantes y antiguas de la época, y a pesar de que no necesita trabajar, lo hace por pura diversión, o deber como el dice.

"Porqué no nos fugamos?" Le Susurre una vez acabado el beso.

"Podríamos intentarlo, pero cuánto tiempo duraremos libres sin ningún plan o fondos?" Preguntó.

"Pero eres un Prince, eres el heredero de la familia y ganas mucho con la Guardia Real"

"No podré ser la cabeza de mi familia hasta que pasen dos cosas, o me casó, o espero a que muera mi abuelo" baje la mirada con desilusión, era verdad.

"Hey, no te pongas así, por favor" susurro Severus mientras envolvía en sus brazos al joven ojiverde de 13 años. "Sabes que pase lo que pase, Siempre te amaré Harry" le dijo con ternura, conteniendo sus propias lágrimas.

Harry solo asintió y le dio otro besó en los labios al hombre que había amado desde los 8 años, al hombre que le vio crecer y que siempre estuvo hay para el.

Regresaron a la fiesta unos minutos después, después de la cena, bailaron los últimos vals, Severus bailó una pieza con Harry. A ojos de todos, era ver al querido "tío" de Harry, bailar con el joven, pero para ellos dos, era bailar con la persona que más aman en el mundo. Despidieron a los invitados y la mansión Potter se quedo solo con la familia y Severus.

Una semana después, ocurrió lo que Harry más temía, se ha pagado el dote que pedían sus padres por el. Se casaría en 5 días, y con el señor Riddle. La semana se pasó demasiado rápido, los preparativos para la boda, eran estresantes. Casi no tenia tiempo para si mismo, pero durante las noches, se escabullía de su cuarto y corría por el pasto descalzo para encontrarse a su amado en el bosque, hablar, bailar, tocar un instrumento, nadar, hacer el amor. Eran las cosas que hacían durante las noches.

"Ven con tus cosas mañana" dijo de repente Severus acostado en el pasto con Harry recostado en su pecho, el lo miró con sus hermosos ojos verdes. "No me importa renunciar a mi herencia, ni a mi trabajo, conseguiré un trabajo decente para poder mantenerte Harry, pero te amo demasiado para dejarte ir"

Harry solo sonrió con lágrimas en los ojos y besó a Severus con pasión, antes de repetir lo de hace unos minutos. Pero ellos no sabían que estaban siendo observados.

(...)

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Hasta aquí el prólogo, es corto, pero el próximo valdrá la pena. Como siempre, gracias por leer, y cualquier falta de ortografía, lo siento. 

Nos leemos. XD