¡BASTA YA! Tiene que cambiar la visión que se tiene de las madrastras, no son malas, ni envidiosas, ni feas. Son bellísimas personas. Y, ¿saben qué? de joven eran princesas.
Así es, las princesas de ayer son las madrastras de hoy, y las princesas de hoy seremos las madrastras de mañana. Ya sabéis el secreto.
Y ya que estoy os voy a contar toda la verdad:
¿Sabéis por qué siempre se les asignas el papel de malvadas? Porque según nuestros prejuicios una mujer sabia y experta, por la edad, vale menos que una cabecita bonita más joven aunque este hueca por dentro. Así es, y no queda solo ahí. También nos obligan a enfrentarnos en competiciones absurdas de belleza, sí, con nuestros referentes, ¿suena absurdo verdad? Lo es.
A ver, tampoco digo que todas las madrastras sean buenas, hay de todo, pero la maldad no va asociado a ser madrastra. La bondad o la maldad de cada madrastra (también aplicable a princesas y príncipes) es debido a que son PERSONAS y cada persona tiene su propio carácter, ideales y principios.
CONCLUSIÓN: Las madrastras no son enemigas, son ejemplos a seguir. Mujeres listas, valientes y poderosas de las que aprendemos muchísimo. Es ilógico que nos tengan envidia a nosotras las princesas y que nosotras las odiemos. Somos el futuro de las madrastras y ellas el pasado de las princesas. Que no se nos olvide que todas somos mujeres, vamos a apoyarnos como tal.
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Manifiesto de princesas
RandomNos dirigimos a ustedes con la intención de explicar ciertos aspectos que, por lo que vemos, no tenéis muy claro. La finalidad de esto es que dejéis de vernos solo como suaves muñecas de porcelana frágiles y bonitas. Que vale que algunas lo son pero...
