Wade O'Connor

Capitulo 8

Los ojos serios de Wade inspeccionan cada rincón del lugar, los tres chicos igual vestidos de negro caminan a la par, pero a diferencia de este ellos están riendo con expresiones juguetonas en su cara. Wade se detiene y los chicos sin dejar de reír y hablar hacen lo mismo, mira de forma despectiva los asientos y decide sentarse en la parte del frente. Mis ojos automáticamente ven a Lissa, ella está distraída conversando con su madre sin percatarse de la presencia del misterioso chico.

Clavo mis uñas en mi palma y vuelvo mi vista a Wade, el chico pelinegro se ve atractivo con su cabello carbón como la noche un poco alborotado, el traje se apega perfectamente a su cuerpo marcando lo que el ejercicio ha hecho en el. Pero su expresión es de aburrimiento como si preferiría estar en otro lugar, no habla con sus acompañantes sólo esta inclinado en el asiento, sus manos en sus bolsillos y su rostro neutro observando hacia otro lado. Veo las miradas curiosas y algunas lujuriosas en el pelinegro.

—Hora del show. ¿Qué haces Har?—exclaman con emoción. Me giro y veo a Kara con un ajustado vestido dorado, luciendo perfecta—. Oh santa...—se calla terminando mentalmente lo que iba a decir—, ¡te ves hermosa!.

Suelto la tela que sostenía para ver a los invitados y me dirijo hacia donde D-Von. Respiró hondo y muerdo el interior de mi mejilla, clavó mi mirada en su rostro cargado de energía y emoción, ella no tiene antifaz ya que no todas lo utilizarán.

—¿Pasa algo?—niego y ella frunce su ceño borrando su sonrisa—. Te conozco y se cuando algo te molesta. Aún con ese antifaz puedo ver ese rostro afligido.

—Wade está aquí—susurro.

Delijah abre sus ojos sorprendida y sin importarle sus tacones o su vestido corre hacia el telón. Eleva su mano y veo sus uñas negras clavarse en la tela.

—Lo que yo daría por tenerlo una no...—la interrumpo aclarando mi garganta y ella sonríe inocente—. Es apuesto, no puedo negarlo.

Ruedo mis ojos y me cruzo de brazos, Delijah vuelve su vista hacia el pelinegro

—Con ese traje se ve...—termina en francés así que no logró comprender, pero se que no es nada bueno.

—¡Delijah!—exclamo suave en tono de regaño.

—Viene acompañado al parecer—balbucea ignorando mis reclamos.—, esos chicos son candentes—giro mis ojos y Delijah sigue concentrada observando hacia donde se encuentra Wade—. Tranquila rojita.

Delijah cierra y toma su vestido con cuidado, coloca una mano en mi espalda y me empuja suavemente. Me dejo llevar, baja su mirada por la diferencia de estatura y sonríe. Llegamos a una mesa que tiene diversas copas, bandejas y algunas doradas y plateadas cajas finas.

—Toma cariño—extiende una copa con un líquido amarillo y burbujeante.

—Sabes que no me gusta el alcohol—sólo servía para nublar pensamientos y  llevarte a un oscuro camino. Ella agarra otra copa sin dejar de sostener la que me ofrece, la lleva a sus labios rojos y toma un sorbo.

—Te ayudara para los nervios—musita suave—. Si no lo haces la tomare yo—me acerca la copa y yo la tomo insegura—. Sólo una Harriet. Iré a buscar a Kara.

Creo que no era mala idea, realmente estaba tensa y necesitaba prepararme para salir. Miro la copa insegura, muerdo el interior de mi mejilla con fuerza y la llevo a mis labios, el líquido pasa por mi garganta quemando ligeramente. Paso mi lengua por mis labios saboreando el residuo dulce que quedo en ellos.

Otra no haría ningún daño

Dejo la copa vacía en la mesa y a mis oídos llega la voz que me alerta de que el evento a empezado, primero será una pequeña introducción y después una señal para colocarnos y salir de forma ordenada. Me apresuro y tomo otra copa pero antes de que la lleve a mis labios alguien me detiene.