Solo Fue Un Amor Imprevisto

Capítulo 1

Viernes por la noche.

Alice Pov.

Había quedado con mi mejor amigo Dylan para ir a un club, según él para quitar el "estrés" causado por mi trabajo de medio tiempo, pero, también para festejar mi cumpleaños número 18. Tenía bastante sueño, quería quedarme acostada viendo Televisión, pero no podía cancelar la salida que con tantas ansias había planeado Dylan.

*Top, top*. Escuche que tocaron la puerta de mi habitación.

-¿Quién es?- pregunté mientras arreglaba mi cabello.

-Alice, soy Dylan ¿puedo seguir?- Respondió este mientras bajaba el tono de su voz.

-No Dylan, no pienso ir, lo siento- Dije intentando sonar lo más serena posible.

-¿¡Que!?- Exclamó mientras giraba la manija de la puerta, yo sonreí, tome el bolso el cual estaba encima se la cama.

-Vamos- le dije mientras me acercaba a él, al estar a su lado di suaves golpes en si espalda con mi mano.

-Siempre bromeando- comento mientras rodaba sus ojos. - ¡pero que mal lo haces!.

–¡Ey!–. Exclame golpeando su abdomen con mi codo.

Mientras bajábamos las escaleras para dirigirnos al primer piso, Dylan me decía a cual club iríamos. No salía mucho a fiestas, así que no sabia a cual club se refería, Dylan decía que era uno de los mejores.

-Adiós mamá- me despedí mientras entraba a la sala de estar.

-Adiós Alice, mucho cuidado- mi madre observo detenidamente a Dylan a los ojos.

-cuida de ella, por favor.

Dylan sonrío. -Claro-

Suspire muy profundamente antes de manifestar mi inconformidad, ¿¡a caso mi madre ya no confiaba en mi!?.

-mamá, no vamos a hacer nada malo tranquila. Voy a despedirme de papá-

Me dirigi al estudio de mi padre. Al estar a unos centímetros de la puerta escucho la melodía de una de las canciones preferidas de papá. Era muy común que escuchara música mientras atendía asuntos de la escuela, ya qué, era maestro de historia. Di tres golpes a la puerta suavemente.

-¿Si?- preguntó mi padre alzando su voz para que fuera escuchado.

-papá, ya me voy, adiós-. Conteste mientras me apoyaba en la puerta.

-Que la pases bien-- manifestó, de fondo escuchaba el sonido de las teclas del computador al escribir.

-Bien, adiós- Di media vuelta y camine de vuelta a la sala de estar.

-¿vamos?- preguntó Dylan mientras se acercaba a la puerta principal.

-si- respondí acercándome a él.

Salimos y Dylan abrió su porshet negro. Uno de tantos de su colección.

-Entra Alice- expresó sosteniendo la puerta del copiloto.

-gracias- agradezco mientras subo al auto. Dylan siempre tan caballeroso, siempre había tratado a las mujeres como se debía, por ello era muy famoso entre las mujeres, no sólo eso, también por su belleza.

Dylan cerro la puerta y dio vuelta para subir, se coloca el cinturón y comienzo a manejar mientras sonreía como nunca.

Después de 50 minutos de viaje llegamos a un gran club, donde habían bastantes personas, la música estaba al tope. Dylan se estacionó en el establecimiento del club. Al salir del auto Dylan estiró su brazo para que yo tomara su mano, sonreí y tome su mano fuerte. Tal vez parecíamos novios pero no era así, él era mi mejor amigo, nos conocíamos desde que estábamos en el jardín, él era mi confidente y yo era el de él, además era gay. Al llegar a la entrada nos sorprendió la fila que teníamos que hacer para entrar al establecimiento.