Capitulo 3

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Dulce: -cantando- yo te vi llorar cuando nadie te miraba escondiendo esa lagrima que se te escapa... yo te vi tan triste y tan solito que hubiera dado mi vida por curarte las heridas.... ven a mi te cuidare te besare esos ojitos tan dulces y calmare la pena que tu alma lleva por dios! Ven a mi te buscare y te amare como nadie en la tierra te amo... Volvió a cerrar sus ojos dejando escapar una lágrima... sin pensar si quiera que detrás de aquella puerta... su príncipe azul se encontraba con los ojos cerrados al igual que ella escuchando su melodiosa voz...

Dulce: -Mirando al cielo- mamita sabes?-suspiro- por fin lo encontré... si! Lo encontré... solo que – sentándose en su cama- es un poco amargadito no?, y pues bastante cascarrabias... pero yo se que en el fondo... es un hombre maravilloso... solo que hay que rascar un poquito dentro de su corazón... y vas a ver como es de bueno... Dulce volvió a cerrar sus ojos y callo con un suspiro en su cama... y su mente una vez mas vago por aquellos mágicos pensamientos que la hacían vivir y mantener la esperanza de que algún día todos los sueños se harían realidad...

Alfonso espero a que Dulce no emitiera ningún sonido, para así asegurarse de que ella estaba dormida, quince minutos mas tarde con sumo cuidado ingresaba a la habitación de Dulce... fue un bálsamo el sentir su aroma... aquel aroma que lo trastornaba... que no lo dejaba en paz...

Se acerco con cuidado a la cama... tocando cada parte y toco sus pies... los examino con cuidado... eran pequeños... pequeños y suaves... Dulce se movió soltando una risita, y el asustado se alejo chocando con una silla detrás de el... se quedo estático... dulce se movió otro poco y volvió a quedarse quieta...

El también sonrió... y se acerco nuevamente... toco y se sentó a su lado volviendo a inspirar su aroma...

Alfonso: sabes... aunque no puedo ver... puedo sentir... y no se que haces o como lo haces... pero eres especial... muy especial... eres tan frágil –suspiro- tan tierna... –negando con la cabeza- quizás si... – acariciando el rostro de Dulce- Cuando hablas de magia... haces magia en mi... y te escucho... y hablas con tanta convicción que hasta yo creo que algún día... las cosas en mi vida podrían cambiar... pero luego... –suspiro- me enfrento a esta triste realidad... y me vuelvo a dar cuenta de que el amor... y la magia... en mi vida ya no existen...

Volvió a acariciar el rostro de Dulce con sus manos temblorosas... dudo un momento... pero algo ese no se que que todos tenemos lo impulso a acercarse mas a ella... buscando su cara con sus labios... para darle un tierno beso en su mejilla... y se quedo allí... la acaricio con sus labios de una forma inexplicable... la rozo con sus labios perdido absolutamente en ella... es su aroma... es la suavidad de su piel... cerro los ojos...

Alfonso: Dios...

Cuando los volvió a abrir creyó estar loco... cerro los ojos con fuerza... y no sabe el por que enfoco su mirada hacia Dulce que yacía en la cama con los ojos abiertos... observándolo embelesada... y la vio... su vista estaba bastante nublada pero pudo apreciar su pura e inocente belleza... 

Dulce: -sonriendo- Don Beta... Pero Alfonso no respondía tu rostro se había puesto de un blanco pálido increíble... no podía despegar la vista de ella... no podía ni siquiera respirar...

Dulce: -incorporándose en la cama preocupada- Don Beta... esta bien... El solo negó con la cabeza incrédulo a lo que le estaba sucediendo... si bien no veía con claridad podía distinguir algunos colores... a su alrededor... pero a ella a ella podía verla aun mas nítida... y estaba embelezado con lo que veía...

Un Gran Amor (Mini web adaptada D y P) trendyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora