❝Bittersweet❞ Lisoo; llm+kjs

01 Agridulce🌼

Punto de vista (PDV): Lisa.

Tarde.

Iba muy tarde a la segunda semana del inicio de clases. Ésto de discutir en las mañanas con mi madre se estaba volviendo una rutina, muy agotadora pues me dejaba muy arisca y borde al inicio del día y no me convenía, ni le convenía a los demás.

Con las llaves de mi moto en la mano, me encaminé a la cochera con paso rápido para posteriormente subir y partir a rápido, pero a una velocidad prudente. No me costaba nada perder minutos de una clase nada interesante, que perder mi valiosa vida.

Felizmente, nah a quien engaño, llegué a mi universidad, corrí por los pasillos y llegué a la clase de química, dónde tendría que estar sentada por una hora, dejandome el culo más plano de lo que está.

La puerta estaba entre abierta, entré sigilosamente no tenía ganas de discutir con el profesor justificando mi tardanza, pero al parecer eso no pensaba mi mejor amiga, ya que ni bien puse un pie en el salón empezó a gastar mi lindo y hermoso nombre.

-¡Lalisaaa! ¿No puedes llegar más tarde a la próxima?.- me habló con sarcasmo Jennie unnie, llamando la atención de todos.

- Y tú no puedes hablar más fuerte, creo que en el baño del otro campus, no te han escuchado.- contraataque.

- Puedo, pero no quiero que se maravillen con mi sexy voz.

-Tan sexy, que hasta tu perro ladra para que te calles ya que le aturdes.

- No mientas, mi bebé solo me está alentando para que siga.- Ni ella se lo creía.

Iba hacer otro comentario acerca de su "sexy" voz, pero se me acordé que estábamos en mitad de la clase.

Voltee y el profesor nos estaba viendo muy cómodo escuchando todo, vaya, se ganó un espectáculo gratis.

Le miré pidiendo permiso con la mirada para poder sentarme, me dolían los pies de tanto estar parada.

-Sigan, está muy entretenido.- No sé si era sarcasmo o lo decía enserio, ¿qué clase de profesores eran los de ahora?

-Nel, pastel. Si quieren espectáculos pueden ver un vídeo en YouTube o yo que sé.- Me referí a todos mis compañeros que miraban atentos.

Seguí mi camino hasta Jennie, deje mi mochila en la carpeta, ni loca en el suelo, se ensuciaría y yo no lavó.

-Te extrañe mucho oxigenada.- me abrazó fuertemente. -Esta semana no fue muy entretenida, sin ti.

-Recién llegué ayer de mi viaje.- dije viendo al profesor explicar la clase.- Fue muuuy agotador.

- ¡Vaya! espero que no sea lo que estoy pensando.- me miró pícaramente, alzando sus cejas.

- No lo sé, no soy tan pequeña como tú para meterme en la cabeza de otros.- Jeje tan buena yo.

Les juro haber escuchado <<Turn don't for what>>.

Jennie fue tan pendeja que se rió, y yo... también.

Llamamos la atención de nuevo por nuestras escandalosas risas. Y lo próximo fue que nos botaron del salón. Me preguntó porque el profesor lo hizo si somos las más calladas de ese salón.

-Ya ves estúpida, nos hecharon por tu culpa.- me reclamó.

-No fue mi culpa que por decir la verdad te rías.- dije revisando la hora en mi reloj.

- ¡Pero es mentira! -gritó en el pasillo.

- Si claro, sigue diciéndolo tal vez te lo creas .- Además la clase estaba aburrida.

- Diablos, tienes razón. Solo está vez .-se río de nuevo.

Justo en ese momento sonó la campana y en segundos el pasillo fue abarrotado de alumnos que nos miraban y estaban atentos a lo que hacíamos, incomodaba y lo sabían. Seguimos el camino a la siguiente clase con Jennie, pero me dieron ganas de expulsar todo el líquido que bebí en la mañana.

Salí corriendo al baño ya que me ganaba la pipí, me cansé mucho; debería haber hecho ejercicio estas vacaciones pero mierda, que flojera.

Me metí al primer cubículo sin fijarme quienes estaban en el baño, por el silencio me supongo que nadie.

Terminé y me acomode mis jeans negros rasgados y salí; me estaba lavando las manos y viéndome en el espejo, tenía leves ojeras pero no me quejaba, no parecía mapache.

Me estaba secando las manos con un pañuelo, ya estaba por salir hasta que escuché leves quejidos, que llamaron mi curiosidad.

Pero que llamara mi curiosidad no significa que me preocupara.

Iba a salir hasta que escuché un golpe fuerte que me hizo mirar de repente la puerta del baño que estaba em frente mío.

- Oh santa papaya, me arde mucho.- escuché una dulce voz, que me dejó maravillada.

Y justo la puerta del cubículo antes mencionado se habrío, dejando ver un ángel pelimorada.

Y ahí supe que tal vez me estaba equivocando y que esa chica iba a ser mi preocupación y obviamente mi adicción, una muy dulce adicción.

🍭

Asdfghjkl se que no soy buena en esto pero trató de hacer mi esfuerzo y en futuro mejorar:).

Tengan un lindo día/ noche/ tarde;).

Eso es todo, besitos en la cola, cositas♡.