CAP 11

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- Se me hace raro ir a una misión sin Lector y Frosch- dijo Rogue pensativo.
- Esto es un asunto que hay que resolver entre tú y yo, además esos asquerosos podrían hacerles daño, y no lo soportaría- le respondió Sting.
Después de andar un rato llegaron a la base donde según el papel estaba el gremio de los encapuchados. Por fin vieron un gremio a lo lejos. Para su sorpresa el nombre que había escrito en la entrada les era familiar:
- Raven Tail?! - exclamó Rogue sorprendido- ellos participaron en los juegos mágicos, pero detuvieron al equipo y al maestro.
- Sí, además dicen que Raven Tail es el gremio anti-Fairy Tail, que es el gremio de Natsu-san - Rogue rodó los ojos al escuchar "Natsu-san" ya que Sting le nombraba muy a menudo.- Por qué pones esa cara? Por Natsu-san? - preguntó Sting extrañado pero a la vez riéndose. Ante esta pregunta, Rogue miró a otro lado con cara de enfado - No me digas que estás celoso- Decía Sting con una sonrisa burlona.
- Bueno, centrémonos en Raven Tail- Interrumpió Rogue, con aire de cabreado pero ligeramente sonrojado.
- Me encanta como evades la conversación porque no quieres admitir que estás celoso- Sting lo miraba fijamente sonriendo.
Rogue se quedó callado unos segundos y después dijo:
- Celoso? Llevo celoso toda mi vida. Cada vez que te acercabas a alguien, cada vez que besabas a alguien, cada vez que salías con alguien. No tuve más remedio que darme por vencido, sabía que no era bueno estar celoso, no me servía de nada, pensaba que jamás saldríamos, y ahora que por fin eres mi novio no me voy a poner celoso por nadie, porque jamás me voy a separar de ti, nunca.- Todo esto lo dijo mirando hacia el suelo, y su voz temblaba al pronunciar algunas palabras.
Sting se quedó sorprendido y mientras sus ojos se acristalaban.
- Te amo, de verdad- dijo Sting abrazando a Rogue. Estuvieron abrazados unos segundos y después se separaron lentamente.- Vamos a por ese estúpido gremio- Dijo Sting sonriente.
- Oye, tratándose de ese gremio no crees que veríamos avisar al consejo y que ellos se encarguen? - Rogue estaba algo nervioso.
- Eso le quita toda la diversión! Además no será muy difícil si el maestro y sus supuestos mejores magos están detenidos.
- Sting, no te acuerdas que tienen esposas anti magia? No sabemos si tienen más.
- Que dices? Rogue, somos los dragones gemelos de Sabertooth, podremos con ellos- dijo guiñado un ojo- Ahora que lo digo en alto, se me hace raro llamar gemelo a mi novio, suena muy incestuoso.
- Mucha gente piensa que somos hermanos de verdad por ese mote- Dijo Rogue con una sonrisa nerviosa.
- En fin... vamos a por ellos- Dicho esto Sting le cogió del brazo y echo a correr medio arrastrando a Rogue.
Se pusieron a la altura del edificio del gremio e intentado ser prudentes, se detuvieron en la puerta y escucharon a ver si se oía algo.
- Está completamente en silencio- susurró Rogue.
- Este gremio ya es historia- dijo una joven con el pelo rojo, corto y unos grandes ojos azules. Al oír a alguien detrás suya Sting y Rogue se estremecieron y se dieron la vuelta con intenciones de atacarla, hasta que escucharon bien lo que acababa de decir la mujer.
Al ver que se quedaron en silencio con cara de asombro, la chica comenzó a decir:
- Me llamo Rui, solía estar en Raven Tail.- mientras hablaba se levantó la camiseta dejando al descubierto el símbolo de Raven Tail, mientras seguía con una expresión seria en la cara. -Pero el maestro esta arrestado, y los demás no mostraron ningún interés por seguir, así que cada uno se fue por su lado.
- Entonces por qué estás aquí? - Preguntó Sting desafiante.
- Lo que haga yo aquí no te incumbe. - Respondió cortante.
Sting se disponía a atacarla cuando Rogue le frenó y dijo calmado:
- Sabes algo de unos compañeros tuyos que se dedican a pegar palizas a la gente?
- No, no se nada de los demás. Sí, he oído rumores, pero no tengo ni la menor idea que donde están ahora mismo. - Rui que también se había puesto a la defensiva, se tranquilizó.
- Bueno gracias de todas maneras- añadió Rogue y medio arrastrando a Sting se alejaron de allí.
- Genial, ahora nunca sabremos quienes son los capullos de las capuchas. - Sting estaba enfadado.
- Y que hacemos ahora? Sé que quieres venganza, pero no podemos hacer nada.- preguntó Rogue.
- No nos queda más remedio que volver al gremio.

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