Lauren la miró directo a los ojos por unos segundos. ¿Esto iba en serio? ¿Iba a vengarse de Aaron Warwick haciendo el amor con su mujer? Sabía el sentido en que se refería la inglesa y no era aprovecharse de ella, al contrario, era dejar de lado todas las inhibiciones que se había impuesto por tenerle un ínfimo respeto a la sociedad entera, incluyendo a Aaron Warwick, eso era venganza, pero por otra parte, Lauren no lo tomaba de esa manera, para ella no había motivo mas importante que el hacerla sentir amada como correspondía. Esbozó una pequeña sonrisa al pensar en la palabra amor, porque su corazón latía con pasión, con la vida que creyó que no poseía. ¡Esto era amor!
Dejó una mano en la cintura de Camila y la otra en su rostro para acariciar su mejilla derecha, la forma en la que ella inclinaba el rostro, la hacía sentir aún más feliz, era como si confiara en todo lo que pudiera hacerle o brindarle.
Lauren: ¿Habla en serio? ¿La marca en mi rostro no le causa temor o ganas de salir corriendo?
Camila: Completamente. ¿Cómo temerle si es una pequeña quemadura que refleja la valentía de una niña por salvar lo que ama? ¿Una marca que significa la maldad del hombre, pero que sin embargo fue proferida porque usted quiso luchar por los suyos?
Lauren: Por usted señora Camila, por usted sería capaz de sacrificar mi vida para defenderla de las manos de Aaron. –Dejó una mano a cada lado de su rostro, se estaba dejando guiar por los sentimientos que florecían de su corazón.
Camila: -Hipnotizada por sus labios le murmuró- Yo daré mi vida por usted.
Lauren: -Sintió que no pudo contenerse más- Señora Camila, yo... ansío hacer esto desde que se cruzó ante mis ojos por primera vez.
Camila sólo alcanzó a tener una fracción de aire, antes de que Lethood inclinara su rostro hacia abajo y se adueñara de su boca como si fuera la última gota de agua en la tierra. Su cuerpo entero se rindió ante ella, estaba en un estado entre la sorpresa, el amor y el deseo. Era la misma sensación que cuando besó tantas veces a Lauren Jauregui, era ella aquí y ahora. ¿Dónde había ocultado la campesina ese lado tan pasional que podía derretir a cualquier ser? No pudo evitar sonreír mientras los dientes de Lethood mordían lentamente su barbilla. ¡Incluso en esa época Lauren era tan ardiente!
Lauren: -Mientras mordía su mentón, succionó su piel provocando que la inglesa gimiera- ¿Puedo tener todo de usted? ¿Todo, todo?
Camila: Todo. –Jadeó- Por favor tome todo de mí.
Volvió a besarla succionando su labio superior, al momento en el que sus lenguas se rozaron, gruñó porque quería más, dejar su mano en la nuca de la morena no era suficiente, ambas querían más. Se besaban con tanto amor y necesidad, que ahí se podía reflejar cuanto sus almas se pertenecían. ¿Realmente podrían tener todo de la otra ahora?
¿Iba a hacerle el amor en la cama que compartía con el despreciable que había asesinado a su familia? Sonrió ante la idea, nunca era tan mala de pensamiento, pero esta vez iba a amar como correspondía a Camila y justo allí, esto parecía un hermoso regalo.
Con la respiración entrecortada ambas separaron sus bocas para tomar un poco de aliento, Lethood llevó su mano al cabello de la inglesa sobre su cabeza y le soltó unas tiras para que este cayese sobre sus hombros de forma completa.
Lauren: Es usted la definición de belleza -Susurró antes de recorrer desde el lóbulo de su oreja hasta su hombro con pequeños besos que la hacían temblar de forma espontánea. No podía creer que tenía la oportunidad para amarla de tan íntima manera, que nadie abriría la puerta porque Aaron estaba lejos de la ciudad, todo parecía haberse alineado para que resultara. Quería ser tímida, porque estaba nerviosa y no estaba segura de que hacer, quería ser ínfimamente respetuosa, pero la sangre caliente recorría cada terminación de su cuerpo, provocando corrientes eléctricas que no era capaz de controlar, como su deseo, como las ganas de besarla, de acariciarla.
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Between love and time {Adaptación Camren}
FanfictionHace más de 300 años atrás. Devonshire, Inglaterra. William Cavendish, segundo duque de Devonshire, era respetado por el pueblo. En 1683 adoptaron a una niña, a quién llamaron Camila Cavendish. Camila despertaba la e...