Bloddy Holligan

Maldito Holligan

Recomendación para escuchar mientras lean:

Stop Crying your Heart Out

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- ¿Dormiste con Daniel? - Preguntó Noel con la mirada seria.

- Es natural ¿no? - respondí arqueando una ceja - No eres un dios como para que luego de estar contigo tenga que guardar celibato... - dije ya con algo de sarcasmo. 

No me la podía creer aún, el se había ido a vivir con su nueva novia y aún así me reclama por haber estado con Daniel.

- ¿Es bueno? - preguntó des interesadamente  mientras seguía observando a la calle.

- Eso no te incumbe, de seguro te dolería el orgullo - como se atrevía a preguntar algo así después de lo que él había hecho.

- Al menos pensé que después de andar conmigo elegirías a alguien mejor... - chistó la lengua en señal de enojo - ¿Que hiciste con el anillo que te dí? - 

- Lo perdí... - 

No era verdad, pero puesto a lo mal que el me la había jugado quería verlo enojar, en cuanto a lo de Daniel solo preferí volver a ignorar el tema. 

- ¡¿Como que perdiste ese maldito anillo?! - Su cara estaba casi al rojo vivo cuando escuchó aquello. Me tomó por los hombros mirándome al rostro para buscar algún tipo de actitud en mi que dijera que mentía. Una mueca, una arruga, algo. Pero no era tan idiota como para dejársela así de fácil.

- El día que te fuiste, yo me emborraché y después al llegar a casa y mirar mi mano para devolvérselo a tu madre el ya no estaba... - 

- No puedo creer lo pendeja que eres... ese anillo era muy valioso ¿sabes? - Noel me soltó resignado y busco entre los bolsillos de su campera un cigarrillo nuevo. En verdad se lo veía algo decepcionado y triste, así que no me las pude aguantar y le dije la verdad. 

- Vamos me conoces... sabes que no podría hacer algo así... - Mencioné mientras lo buscaba en mi bolso - Fui a devolvérselo a tu mamá y ella me dijo que lo conservara, después de todo ya era mio...-

-¿Estas de coña? De verdad me tragué que lo habías perdido... - mencionó con asombro. 

Me decía a mi misma: - Vamos Noel, ¿de verdad te creíste eso? Solo llevamos un mes separados y ya te olvidas de mi.- Este se volteó a mirarme nuevamente, ahora con una aterradora expresión neutra. Si, en Noel eso es aterrador, puesto que es tan egoísta que no da ni una rastrera señal de lo que va a hacer luego. 

-De hecho me alegro de que aún lo tengas... -

¿Como que se alegraba? Noel no me hagas esto. Mantuve silencio, realmente no sabía que hacer, me sentía acorralada por esa mirada azul y sus prominentes cejas. El desgraciado aún tenía ese poder sobre mi y parecía amar el dejarme sin palabras. Estaba perdida en mis pensamientos cuando de pronto sentí sus brazos rodear mi cuerpo. Extrañaba abrazarlo, aún lo amaba a pesar de todo. 

En este momento me sentía como una cría que solo se hace la chula para intentar olvidar a su novio anterior, aún así no me arrepentía de lo de Daniel.

- Quiero que lo conserves para siempre... - Susurró en mi oído. 

Seguía congelada, por lo que solo atiné a corresponder el abrazo. Tenía el anillo de nuevo en mi dedo y dudaba sobre que hacer. Noel me ahorró el trabajo de reaccionar, puesto que con cuidado terminó aquel abrazó y se volteó camino a su casa pitando su cigarrillo como si nada hubiera sucedido.

- Ah no Noel Gallagher, tu me dices que rayos quieres decir con que "Quiero que lo conserves para siempre" - Reproche casi a gritos.

- Siempre has sido inteligente Regina, tu sabrás - Gritó mientras abría la puerta de su casa.

 No podía acobardarme ahora, yo necesitaba respuestas, en realidad solo una. Noel ya había cerrado la puerta, pero esto no era impedimento para que yo obtuviera mi respuesta. Corrí hasta la puerta y comencé a tocar el timbre, Peggy estaba en casa, así que aunque el inmaduro de Noel le dijera que no me abriera, ella lo haría de todas formas.

- Regina linda, esta en su cuarto sube - Mencionó la dulce Peggy al abrir la puerta.

- Hay angel de la guarda mio, gracias -

Luego de darle un beso en la mejilla a Peggy subí casi como si estuviera corriendo una maratón al cuarto de Noel, y llegué tan rápido que me enorgullecí de mi misma. No era de asombrarse, su puerta estaba cerrada y se escuchaban algunos acordes perdidos en su guitarra.

- Noel soy yo...- Mencioné dando golpecitos a la puerta. 

- ¿Que quieres Regina? - Se escucho desde el otro lado.

- Vamos abre, quiero saber que quisiste decir... - Aquel cascarrabias no abría la puerta y se mantenía jugueteando con su guitarra.

- Te dije que eras inteligente y lo adivinarías... - Respondió entre risas y como diciendo "¿No es obvio?" Noel se bufaba de mi.

- Ok Noel, no voy a entrar en tu juego...- suspiré mientras soltaba el pestillo. - Llámame cuando sepas que diablos quieres de mí... no prometo estar allí para atender... -

Sin ánimos de seguir aquella infantil discusión, me di la vuelta camino a casa. La lentitud en la que me volví camino a las escaleras era directamente proporcional a lo mal que me sentía: -Maldito Noel, ¿por que no deja de confundirme?-. Estaba a mitad de la escalera cuando sus brazos me sujetaron: -¿Cuando salió de su cuarto?- Me dí vuelta para mirarlo a los ojos cuando el me pregunto tal y como la primera vez.

-¿Saldrías conmigo?-

Su cara esbozaba una sonrisa, a veces ere como un maldito niño, cuando levemente me tomó por el mentón y acomodó mi cabello tras mi oreja.

- Creo que fuimos un par de idiotas al separarnos ¿sabes?- Mencionó acariciando mi rostro. - Quiero que si tu quieres... tu sabes... lo intentemos de nuevo... - 

- Maldito Holligan...- Suspire y le di un abrazo cruzando mis brazos en su cuello. - ¿Te das cuenta lo estúpido que suena?-

- No más estúpido de lo que nos vemos ahora sin estar besándonos...- Que seguro era aquel desgraciado, pero tenia razón, estaba en sus manos. - Quiero intentarlo... así que cállate y ven - ambos nos fundimos en un dulce beso mientras el rodeaba mi cadera con sus brazos. 

Maldición, aquel hombre se volvía a salir con la suya.

Curiosamente a mis espaldas en el primer escalón se escuchaban suspiros de alivio por parte de Peggy y algunas burlas dignas de su edad por parte de Liam.

- Vaya que te extrañé Regina... -

- Y yo a tí Noel...-