Una de Cortázar

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Cuando era chica tuve que leer "Rayuela", seguro más de uno lo leyó. TENIA QUE, por eso lo leí, y no me llamo la atención hasta que leí lo siguiente: "Lo que mucha gente llama amar consiste en elegir a una mujer, y casarse con ella. La eligen te lo juro, los he visto. Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio. Vos dirás que la eligen porque la aman, yo creo que es al revés. A Beatriz no se la elige, a Julieta no se la elige. Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto".
Me quedé pensando por un buen rato esa frase. Volví a casa y mire a mis padres pensando en eso, salí a la calle y mire a las personas pensando en eso. Ese texto estuvo en mi cabeza por semanas, ¿Que carajo era el amor?. Yo amaba a mis padres, amaba a mi hermana, y amaba a una hermana que todavía no había nacido. Ahí me di cuenta que el amor venía de adentro, amaba lo que sentía, amaba lo que me hacían sentir las personas a quienes amaba... Pero no me cerraba.
Era chica, jamás había amado a alguien de otra manera, pero me asustaba el hecho de que alguien me eligiera sin amarme, y me amara por haberme elegido. Tenía miedo de jamás sentir ese rayo que me partiera los huesos, por más escalofriante que sonara eso, tenía miedo de no saber que era el amor,  y por lo tanto no amar, ni ser amada.
El tiempo pasó, y como pasa con todas las cosas cuando somos chicos, ese pensamiento se fué.

Amor hasta los huesosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora