Mi familia, mis amigos, mi vida... todo ha desaparecido... lo que pensé que era mi maldición me salvó...
Hace unas horas estaba con todos ellos en la mesa comiendo... hasta que nos atacaron.
Yo provengo de la frontera amarilla, un lugar en contacto pleno con la naturaleza, de hecho, nuestros poderes y habilidades están hechas para vivir tan solo aquí, ya que si no viviéramos al aire libre... no encontraríamos sentido a la vida. Y justamente yo, la única persona sin poderes en toda la frontera... pude escapar como una cobarde con éxito. Pero nadie se esperaba un ataque aéreo proveniente de las demás fronteras. Ellas nos temen, no les gusta nuestra libertad, nos envidian... Yo logré escapar tirándome al vacío desde nuestras tierras flotantes.
Y justo cuando pensé que lo había perdido todo... cuando creí que todo el mal de mi alrededor me acechaba... cuando mis pigmentos perdían fuerzas... apareciste tú. Una gran ave con una cola exagerada que vestía unos pigmentos rojos y amarillos... se alzó sobre mí y me agarró con sus enormes garras. Entonces me desmayé.
Al abrir los ojos, me encontraba sola tirada en el bosque y con cansancio, me levanté del suelo y comencé a caminar sin rumbo. No podía parar de decirme a mí misma que lo había perdido todo. Más temprano que tarde me encontré a depredadores en el bosque.
La superficie de la frontera amarilla era conocida por ser muy peligrosa, por eso nos hospedábamos en las tierras flotantes... desarrollamos alas que nos ayudaron a emprender el camino hacia delante... todos excepto yo. La chica con la peor maldición de todas... no tener ese don.
Los depredadores se me abalanzaron y yo como acto reflejo no pude hacer más que simplemente protegerme la cara con mis brazos. Todo estaba perdido...
Entonces noté una corriente enorme de aire proveniente de detrás mía, me sorprendí y miré hacia atrás, era el ave de antes... me intentaba proteger. Pero los demás monstruos la rodearon y la embistieron. La enorme ave se protegió como pudo pero sufrió muchas heridas y se desvaneció... lo vi con mis propios ojos, yo no pude evitarlo y ante aquella escena eché a correr, tenía miedo de acabar como esa enorme ave.
Creí que me puse a salvo, pero me encontraron... estaba perdida. Ya no podía evitar pensar en que era el final y me tiré al suelo de rodillas esperando mi desgraciado destino. Entonces otra ráfaga de aire sacudió a los depredadores y estos se retiraron. Tenía miedo, pero al mirar atrás vi que volvía a ser aquella ave... no entendía nada.
De alguna manera u otra presentía que me protegía... pero, ¿por qué? Desde aquel momento me acompañó siempre y me ayudó a emprender mi viaje... que desde ese momento empezó a ser nuestro viaje.
Ella me protegía de los depredadores y me traía frutas y agua para alimentarme sin pedir nada a cambio... a medida que avanzábamos contemplaba que tenía un poder especial... podía resurgir de sus cenizas, pero cada vez que lo hacía volvía más debilitada. Yo siempre le insistía en que reposase, que debía recuperar fuerzas... que no volviera de sus cenizas tan pronto... que se recuperase. Pero ella siempre me hacía caso omiso.
Ya llevamos andando casi un mes esperando salir pronto de la frontera amarilla... cada vez la veía más desganada y a la vez, yo estaba más preocupada. No importaba cuantas veces moría, siempre resurgía al acto, sólo buscaba protegerme y yo me sentía impotente por no valerme a mí misma.
Creo que ya diviso el final de la frontera... el estado de la ave cada vez es peor y más deteriorado. su plumaje se cae... sus pigmentos se vuelven más oscuros. Estoy empezando a creer que sus plumas son un contador de las veces que le quedan para volver a revivir.
Esto ha llegado a un punto tan extremo, que no hace falta que muera para que se le caigan las plumas. siempre insisto para parar y tomar un descanso... pero entonces ella me empuja con el pico hacia adelante. No puedo parar ahora, me está dando ánimos, no la quiero desmotivar.
Finalmente estoy en el último tramo de esta maldita frontera... diviso pequeñas aldeas que me pueden ayudar... y espero que a mi salvadora también.
Creo que ya no hay remedio. Su tamaño ha empequeñecido... casi no le quedan plumas. Me quedaré con ella a descansar, se lo merece. Me ha ayudado demasiado... no lo puedo evitar. Sin querer empiezo a llorar de la impotencia. no me lo creo... se está desvaneciendo. Esto no puede ser verdad...
Sus plumas y sus pigmentos... se desvanecen. No puedo verla sufrir más.
Le quedan 3 plumas.
Sé que no he hecho nada para evitar tu estado actual... pero lo lamento tanto... no puedo evitar sentirme impotente...
Una pluma se le cayó y esta se desvaneció. Le quedan 2 plumas.
No sé como consolarte a estas alturas... pero he sido muy egoista por mi parte... de verdad lo lamento. No puedo ponerme así en esta situación... debo de dejar de llorar.
La segunda pluma hizo los mismo que la tercera. Solo le queda 1 pluma.
Pero no lo puedo evitar. Lo siento...
Entonces sentí mis últimas lágrimas deslizándose por mis mejillas y cayendo en el pico de el ave. La última pluma retomó sus colores. El ave expresaba sentimientos de alivio... pero ya estaba en un extremo muy doloroso de ver.
Si te hubiera cuidado mejor, no estaríamos así en este momento... perdóname por esto...
Entonces cogí la última de sus plumas y se la arranqué. No podía verla así. Podía contemplar como ella se desvanecía... pero la pluma arrancada seguía intacta.
Mientras el ave se desvanecía, una voz resonaba en los surcos del viento:
"Yo tuve miles de oportunidades... ahora te toca aprovechar a ti la tuya..."
Yo, al escuchar eso me eché a llorar y con la última pluma me hice un adorno en el pelo, para no olvidarla jamás... sólo me quedaba decir... "mil gracias"
*****
Este relato va dedicado a todas aquellas personas que dan más de lo que deberían por los demás y llegan al puntos de dar tanto que se consumen así mismas. Muchas gracias a esas personas.
Pero por favor, pensad en vosotros mismos... vosotros no tendréis una segunda vida.
ESTÁS LEYENDO
Relatos de Prism ✩
FantasíaRelatos, anécdotas y acontecimientos de las diferentes eras de mi propia saga: "Prism"