사진 SAJIN [VMin] {One Shot}

사진 (Fotografía)

—De acuerdo, puedes hacerlo

Fueron las palabras del jefe Kong ante la petición de Kim TaeHyung desde hacía un tiempo. El castaño no pudo más que sonreír y agradecer múltiples veces con una reverencia.

Al fin podría realizar lo que tanto estuvo esperando desde que había comenzado en los medios.

Era un chico apuesto, amable y sumamente popular. No tuvo la desgracia de pertenecer a una escuela llena de prejuicios ni estereotipos. Desde que era adolescente los medios de comunicación y la literatura lo traían sumamente asombrado. Fijó su meta desde que tenía los catorce, trabajó arduamente e inclusive consiguió becas y reconocimiento por ello.

En la universidad encontró mejores amigos con las mismas ganas de soñar alto como él, encontró el amor y también el dolor del mismo. Experimentó un sin fin de cosas tanto en los grupos populares como en los más retirados del lugar.

Fue entonces que comenzó como aprendiz en elprincipal periódico de todo Busan. Al principio era tan sólo el que sacaba copias y preparaba cafés para los trabajadores, hasta que el antiguo director en redacción descubrió sus dotes talentosos.

Le mandó a realizar una prueba para reportar una pequeña feria al sur, iba listo con su mente concentrada en el trabajo. Como amuleto llevó su propia cámara y fotografió todo con un toque artístico demasiado bueno que ocupó un espacio decente en la portada.

Con sacrificios, noches de desvelo y limitando su vida social, nunca logró el codiciado ascenso.

Lo sé, la historia no pintaba para que ocurriera eso, pero lo hizo. Era la vida real que muchas personas vivían, no sólo él.

De fotografiar gente para la sección titulada "diversión y cultura" pasó a tomar fotos y reportar muertes por toda la ciudad, todo sin el salario justo.

Era una total vida de mierda la que llevaba, ahora que lo pensaba el castaño esperando por fin la hora de salida.

Pero eso cambiaría al regresar de nuevo a su primera y antigua sección. Un aumento, un mejor puesto o la idea de cambiar su lugar de trabajo eran sus principales metas.

-—Llegué -—avisó al entrar al apartamento que rentaba junto a sus viejos amigos.

-—Estoy por acá —le respondieron desde la recámara principal.

Caminó toda la espaciosa sala perfectamente limpia, hasta que notó la cocina repleta de utensilios sucios y las paredes de mezclas viscosas.

—¿Un huracán pasó por la cocina y no me enteré? —preguntó al entrar y mirar a la nada.

—¿Qué hora es? —escuchó desde el baño. El castaño entró con confianza y se sentó bajando la tapa del retrete para utilizarla como asiento.

—Las Cinco y veinte

—¡Mierda! YoonGi no debe tardar en llegar —visualizó el cuerpo de su amigo bajo el chorro de agua enjabonando a toda prisa y mordió su labio intencionalmente.

—HoSeok, hoy es su día libre

—¡Doble mierda! —maldijo antes de cerrar la llave. Se abrió un poco la compuerta y de ella salió una mano mojada tanteando el lugar en el que recorría.

TaeHyung corrió con una sonrisita maliciosa hasta el tuvo adherido a la pared y recogió el objeto que su mejor amigo estaba buscando.

—En lugar de estar jugando conmigo, deberías ayudarme a recoger mi desastre desastroso —comentó riendo un poco, mientras su mano bajaba en señal de derrota.