El día en que empezamos lo ví todo de color de rosas. Todo era mágico. Perfecto, me venías a buscar a casa, estábamos con los amigos. Me encantaba ver como los dos estábamos tan cortados cuando había mas gente, y luego tan cercanos cuando estábamos solos. Recuerdo lo sensibles que eras, solo te atrevías a darme besos en las mejilla, me hiciste sentir única. Deje de sentirme rara, y pase a sentirme especial. La sensación de el día en que te conocí, esa de que me podía comer el mundo, de que nada era imposible... Yo la llamo la sensación las "ganas de vivir". Bueno, pues desde que te conocía, tenía esa sensación todos los dias. La gente me decía que me ibas a hacer sufrir, no les creía. "¡MENTIRA!" les decía yo "¡Él me quiere!"
Mi mejores amigas decian, "¡Mira el pelo que lleva!" o "Te va a doler", no las creía. ¡oh, mis amigas! debería haberos escuchado, me habría evitado tantas tarrinas de helado...