Todo por ti PRÓXIMAMENTE

Capítulo 1

—Inhala, exhala —repetí un par de veces las mismas palabras mientras lo realizaba y me regale una sonrisa a través del espejo para para darme ánimos.

Estaba en la habitación de Kiara terminando de ajustarme el traje de baño; el día de hoy habíamos decidido pasar la tarde en la alberca de su casa, claro que todos ya estaban abajo divirtiéndose, mientras que yo me había retrasado intencionalmente.

Tenía una misión.

Matías, el hermano mayor de Kiara y mi gran amor se encontraba en la sala leyendo un libro, por lo cual aprovecharía para acercarme a él.

Baje las escaleras con algo de ansiedad y me dirigí a la sala. Y por supuesto ahí seguía él.

Matías seguía recostado en uno de los sillones leyendo, me acerque con algo de sigilo y cuando llegue detrás de él toque levemente su hombro para que notara mi presencia y le brinde una sonrisa coqueta.

—Hola Matías —use un tono de voz tímido, para después empezar a jugar con un mechón de mi cabello, esperando que me mirara, pero solo lanzo un suspiro y cambio la página del libro.

—La piscina está en la parte de atrás —fue su respuesta. Realmente me dolió el tono con el que se dirigió a mí, pero no iba a darme por vencida.

—Lo sé —lance una risa juguetona y me recargue en el sillón en una pose coqueta—. ¿No te gustaría acompañarnos?

—No, estoy ocupado —cerro el libro con brusquedad y sin darme una mirada se dirigió a las escaleras. Por un segundo sentí mi corazón agrietarse, para arreglarse en otro segundo.

Él dijo que estaba ocupado así que prácticamente no me estaba rechazando. Puse otra sonrisa en mi rostro con los ánimos otra vez arriba y decidí que mis amigos ya habían esperado demasiado por mí.

Solamente había avanzado tres pasos cuando me detuve de pronto al escuchar a Kiara hablando con Matías.

— ¿Has visto a Khaily?

—No lo sé, creo que está en la sala —decidí mantenerme escondida hasta que terminaran de hablar, tal vez me podría enterar de algo.

— ¿A dónde vas hermanito? ¿Saldrás hoy? —en muchas ocasiones le había dicho a Kiara que cuando hablaba con su hermano parecía una niña pequeña.

—No, iré a mi habitación a dormir hasta que lleguen nuestros padres, Kiari —pude notar la diferencia en su tono al responderle a su hermana. Era más dulce.

Fue entonces que tome en cuenta lo que respondió. Iría a dormir, no tenía ni una ocupación importante, se encerraría en su habitación para evitarme como siempre.
Mire el suelo con tristeza.

—Khai —la voz suave de Kiara me sacó del trance en él que me había metido, al mirarla note que ella me observaba con ternura y algo de pena, ahí fue cuando me di cuenta de que algunas lágrimas se deslizaban por mis mejillas. Parpadee con rapidez en un intento de ya no derramar más y deje que una de mis mejores amigas me abrazara.