STUPID HUMAN! › VMARK

15.

( ❀ )

—¿Tú también lo viste?

La voz de Jaebum era demasiado silenciosa para ser oía por los humanos, Tae agradecía por dentro el mantener su agudo oído para escucharle. Taehyung asiente con la cabeza, su mirada aún siguen clavada en el sitio donde logró ver la leve silueta de Yoongi, que estaba tan lejos y a la vez tan cerca. Por dentro, empieza a preguntarse si Yoongi logró ver el como su sonrisa se había hecho presente cuando la mano de Mark-hyung habia tocado su cabello; se preguntó así mismo si él le había importado, si es que alguna vez le importó algo con respecto a Taehyung.

Está tranquilo ahora. Mark acurrucado entre las mantas, su cabeza apoyada sobre el regazo de Tae y sus manos brevemente entrelazadas. Se ve más joven de esa forma, con la cara relajada y sus ojos cerrados, por lo que Taehyung no evita soltar un suspiro fascinado ante tal bonito y encantador chico que se hallaba encima suya. Jinyoung se encontraba a un lado de Mark, con sus hombros brevemente pegados pero sin despertarse de su pacífica siesta y mientras, Jaebum quitaba cuidadosamente la arena de su cabello sin quitar una especie de expresión simpática de su rostro que Taehyung no lograba comprender. Ellos dos se encontraban despiertos, Jaebum y él, como si esperasen ver a Yoongi sobre las rocas; su cabello color menta, el cual se ve con un contraste frío contra la oscura noche y su piel brillando de un color blanco perlado. Pero el no se presenta.

Finalmente, Jaebum se gira hacia él, ladeando su cabeza con cierta curiosidad y sin más, pregunta: —¿Volverías con él?

—No lo sé.—él me lastimó bastante, pensó. Todos lo hicieron.

—Taehyung. Para que quede claro, ninguno quiere que te vayas.—Jaebum está mirando el mar otra vez, como si estuviera buscando algo que claramente no se encuentra allí. —Más bien, no nos molesta si te quedas aquí. Ninguno de nosotros lo hace. Puedes quedarte el tiempo que quieras, ayudándonos con el trabajo o cosas así... Pero si deseas irte, nadie te detendrá, ¿de acuerdo?

Hay una larga, larga pausa.

—Te odié por mucho tiempo.—suelta finalmente Taehyung. —Cuando te fuiste, eso es... Odiaba el hecho de que no hayas luchado por mí cuando el emperador te exilió. Ni siquiera me dirigiste una palabra cuando nadaste hasta la orilla... Por mucho tiempo, tuve esa idea de que no querías tener nada que ver conmigo. Y lamentablemente, era una cosita amargada cuando conocí a Yoongi-hyung.

—Y confiaste en él—continuó Jaebum, como si él mismo hubiera vivido aquellas emociones y, tal vez, los ha hecho porque ha estado al tanto de Taehyung durante todo este tiempo, a pesar de que no estaba allí para hacérselo saber.

—Vaya que lo hice.—se ríe Taehyung. —Y tal vez es por eso que soy como soy ahora.

—Yo creo que estas bien así. —las estrellas son incluso más brillantes ahora. Jaebum cierra sus ojos como si ya no pudiera soportar el estar despierto. —No te he visto tan feliz como lo eres hoy desde mucho, mucho tiempo y eso, la verdad, me alegra el alma... Mark-hyung y tú, realmente no me importa lo que pase entre ustedes pero he de admitir que hacía rato no te veía sonreír de la forma en la que le sonríes a él.—hace una breve pausa, dejando escapar un suspiro de entre sus labios. —Sé que aún no estas bien. Sé muy bien todavía te rompes por la muerte de tus amigos porque sientes que eres el responsable de ello, aunque de todas formas no habrías podido detener eso; sus muertes estaban aseguradas, sabían demasiado... Pero me alegra ver que poco a poco lo vas superando, Taehyung-ah. Estoy feliz de que estés mejor.

Estoy feliz de que tú estes feliz, hermanito.

—Yo también estoy feliz de que cada dia me sienta un poco mejor, hyung—dice Tae, y no tarda en apretar ligeramente la mano de Mark cuando su hermano le sonríe como siempre. Se siente más ligero, de alguna manera.

Sanando, se da cuenta, me estoy sanando.

Taehyung sonríe.