Como en un manga shojo || OtaSeung

I

Fingir, según Wikipedia lo define es "Representar o hacer creer algo que no es verdad con palabras, gestos o acciones" y según las historias que he leído, empezar esto con una referencia de ese tipo es un cliché. Pero, ¿Por qué te estoy diciendo esto? Pues veras, eso es lo que hago todos los días que paso junto a ti, fingir.

Cada vez que correspondo un beso tuyo, cada vez que te miro con "amor", y cada vez que digo "te quiero", finjo. Suena un poco rudo ahora que lo digo de esta manera tan directa, pero es la verdad. No me malentiendas, realmente me agradas, en serio lo haces. Incluso al principio me gustabas de la manera en la que yo te gustó. Sin embargo, esos sentimientos murieron de alguna manera extraña y confusa, por no mencionar rápida. Lo más curioso del asunto es que mi amor es muy difícil de matar.

¿Por qué no me alejé en cuanto me percaté de esto? Te estarás preguntando. Bueno, es simple de explicar: no fue porque le agradaras a mi familia, o por la presión de nuestro círculo social, ya deberías saber que a mí me tiene sin cuidado lo que los demás piensen acerca de mí, aunque estoy seguro que no lo sabías. Esa es la razón, no nos conocemos lo suficiente, tú tienes capas y yo también. No obstante, lo que tus capas ocultan no es lo que esperaba. Yo oculto un corazón frágil y amoroso, mientras tú ocultas una personalidad que me resulta molesta. Cuando estamos a solas eres muy diferente a como realmente eres, y aunque me gusta esa parte que sólo a mí me muestras, no puedo soportar las demás. Dicen que cuando amas a alguien lo amas con todos y sus defectos, bueno, yo no puedo amar tus defectos. Por más que lo intenté, jamás podré hacerlo.

Fue error de ambos el que esto no funcionara. Tú error fue amar todo de mí, y el mío fue no hacer lo mismo. Y es que yo no soy capaz de amar a alguien que no sea mi familia o mi perro. Nunca fuiste mi prioridad, mientras que yo sí fui la tuya, no sabes lo mal que me siento por eso, te pido una disculpa.

Me disculpo también por no haberme enamorado de ti, lo siento pero tus lindas palabras y tiernas caricias no lograron sacarme de ese agujero oscuro al que estoy adherido. Siendo francos ya me habían dicho que era lindo, mas nunca que mi personalidad era agradable. Nadie había mostrado esa amabilidad antes, quizá fue eso lo que provocó esa falsa sensación de enamoramiento en mí.

Créeme que realmente me llegaste a importar, por poco tiempo, pero lo hiciste. Una palabra tuya me hacía feliz y con tus miradas tan fijas llegué a sonrojarme, incluso llegué a sentir celos cuando hablabas con Yuuri. El día que me abriste tu corazón y me contaste sobre tu historia con Mila y Yuri me sentí especial, fui un poco patético respecto a esas cosas. La verdad es que ahora lo único que quiero es que te puedas enamorar de Yuuri porque sé que le interesas y estoy seguro que él podrá amarte como te mereces. Porque eres alguien muy lindo, Otabek, y yo no te merezco.

Así que por favor, por favor, no digas que me quieres pues ya no quiero mentirte. Por favor no digas sólo tienes ojos para mí ya que yo realmente no tengo ojos para nadie. No tomes mi mano ni me abraces, mucho menos me beses; no hagas nada de lo que las parejas de enamorados hacen, porque tú y yo no somos como ellos, y nunca lo seremos. Lo que menos quiero es lastimarte, pero si para dejarte en claro mis sentimientos debo hacerlo, entonces perdóname.

No llores, por favor no llores, no me quieras, soy alguien despreciable; un ser egoísta que no le importa nada más que no sea el patinaje. Deberías odiarme, haz eso por favor. Ódiame por no sentir una calidez inundar mi pecho cuando escucho "Flaws" y pienso en ti. Ódiame por decir que te quería cuando no era así; por nunca ser el primero en buscarte; por sentir la demandante necesidad de contestar desgraciadamente cada vez que alguien me preguntaba si estábamos saliendo. Por ser un desgraciado y dejar que creyeras que lucharía por ti. Ódiame por amar tanto mi soledad y querer volver a ella cuando tú luchaste tanto por desprenderla de mí.

Pero sobre todo, ódiame por hacerte creer que esto valía la pena, que yo lo valía. La tercera no es la vencida y yo no soy para ti.

Perdón por empezar a verte como un simple amigo cuando ya te besé y dije que te quiero. Porque tristemente yo di el primer paso y no tienes idea de lo arrepentido que estoy de ello. Por infortunio intenté que nuestra amistad se profundizara para que te llegarás a enamorar de mí. Era yo quien alargaba nuestras conversaciones por mensajes y deseaba con alma que quisieras dormir un poco más tarde. También fui yo quien insistió tanto en saber de tu pasado, y fui yo quien te dejó prometer que me protegerías y me amarías hasta que yo quisiera lo contrario.

No tienes idea de lo difícil que me es hacer esto si por cada palabra que escribo me viene a la mente la manera en la que mantienes los ojos cerrados después de besarme, es como si hubieses encontrado el oasis después de haber vagado por años en el desierto. Para tu desgracia, no soy más que otro espejismo. Tampoco puedo borrar de mi mente la manera tan miserable en la que te veías aquellas vez que estuve molesto contigo. Es demasiado difícil para mí corazón. Porque realmente tengo uno, ¿sabes?

Un corazón que se siente culpable de no poder quererte de la manera que mereces. Un corazón que se contrae de tristeza cada vez que me miras con un brillo ingenuo pues crees que no me iré. Este maldito corazón que no late desembocado cada vez que me miras.

Realmente quiero dejar de mentirte como ya he dejado de mentirme, y quisiera hacerlo sin lastimarte, pero ambos sabemos que eso no es posible.

Tenía razón al decir que el amor a primera vista no funciona en mí, porque aún no he logrado enamorarme profundamente de alguien con sólo decir "hola". Pero, ¿quién sabe? tal vez, en el futuro, encuentre a una persona que pueda querer completamente. En cuanto al amor, algún día quedaré como un hablador, pero no será hoy, y no será contigo, lo siento.

Sólo espero que puedas encontrar a alguien con quién puedas hacer todo lo que yo no quiero hacer contigo como salir a comer sin poner mil y un pretextos, o que te abrace de vuelta cada vez que tú le tomes entre tus brazos, ojala y esa persona te besé con dulzura y amor para después decirte lo maravilloso que eres. Y tal vez, sólo tal vez, puedas encontrar perdón para mí en el fondo de tu corazón y me recuerdes como Seung, aquel que no pudo quererte por más que intentó.

Y después de todo, ¿para qué caemos?

Para aprender a levantarnos.

Sí, eso lo saque de Batman.

Realmente siento no poder hacer que lo nuestro fuese como un manga shojo.

8tmhd