Bella (El Amor)

Damiam se va y nunca volvera

POV Bella:

Me sentía pérdida, ida, todo me daba vueltas, sentía que la cabeza me iba a explotar en cualquier momento.
El simple hecho de recordar lo que había sucedido hace poco, hacia que me doliera más.
Sí es cierto lo que Dirk dijo, eso quería decir que yo soy una... vampiresa y no cualquiera, si no la princesa de todos los vampiros; ya que el tío de Damián, es el rey y por lo tanto, el gobernador de todos los vampiros en el mundo.
Pero tanto pensar en la idea de ser una vampiresa, me estremece. Sé que soy especial, ya que viví 9 meses con vampiros y ni uno de ellos "sospecho" que era humana, para todos era una vampiresa. Pero nunca se me pasó por la cabeza ser una vampiresa.
Eso implica cambios en mi vida y no sé si estoy preparada para ellos, y lo más importantes, si quiero aceptarlos. Porque sé que unos de ellos será, alejarme de Damián, porque es mi... primo.

-Bella, despertaste.-poco a poco podía ver más claro. Y lo primero que vi, fue a Dirk, con una sonrisa perfecta e iluminación. Al costado de el está, el, Damian; como siempre, serio.- Bell, llevas una semana dormida, pensé que nunca ibas a despertar amiga, me asustaba cada día que pasaba

- Ya estoy bien amigo, no te preocupes- poco a poco me levantaba de la cama- Damián...

-Me alegro que estés bien, ahora me voy- y sin mas que decir, se fue, se fue y me dejó más confundida y nerviosa de lo que estaba.
Trate de alcanzarlo, pero al intentarlo casi caigo, pero Dirk me sostuvo.

-Ten cuidado, todavía estás débil Bell- no me importaba nada, solo que lo que estoy pensando, no sea cierto.

- ¿Qué le pasa?- sé que Dirk no me dirá nada, pero debo de intentarlo.

- Bell..., ya sabes, tú y el...

- Sí lo sé y sospechaba que era eso, pero no se puede poner asi antes que hablemos- lo entiendo, pero pensé que todo sería muy diferente, que hablaríamos y tomariamos una decisión los dos juntos como personas adultas

- Dale tiempo Bell, no es fácil para el

- ¿Y para mí si?, lo que está pasando nos incumbe a los, la relación es de los dos, no solo de él. Yo también estoy mal, pero no es así como se resuelven las cosas, sí no hablando. Déjame sola Dirk, tengo que pensar

- Bell, sé que no debo decírtelo yo, si no mi hermano, pero el, ese va esta noche, se va para no volver nunca más

- ¡¿Queeeee?! Eso no puede ser. Llámalo necesito hablar con el- el solo me miraba y sabía bien claro que estaba hablando con el telapaticamente, así que lo agarro de la ropa y lo sacudo- dile que me venga por favor, necesitamos hablar- estaba llorando. Sabía su respuesta, pero quiero equivocarme, no puede ser que sea tan cobarde, y solo huya.

- Bell... no quiere, dice que no lo busques nunca más. Que lo suyo ya se acabó y no hay nada que hablar- cada palabra era dagas directo a mi corazón.- lo siento- y se fue.
Me  sentía tan mal, tan frágil, tan sola, que tenía ganas de desaparecer, pero en vez de eso, solo salieron lágrimas; y me puse a llorar...