Only One.

Hay situaciones que matan al gato.

~Only One... (SasuHina)

Género: Drama/romance

Categoría: M

-hablan-

-"recuerdos".

-"Letra de la canción correspondiente y/o pensamientos"-.

Aviso: los personajes no me pertenecen sino a Masashi Kishimoto.

OoOoOoOoO~Only One~OoOoOoOo

"Hay situaciones que matan al gato..."

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Un hombre de figura demandante, caminaba por un largo pasillo. Un hombre de cabello azabache, más o menos largo hasta los hombros, ojos negros con unas pequeñas marcas debajo de sus párpados inferiores. Tenía una mirada sebera que demandaba poder a cualquiera que pasaba por su camino. Transmitía temor y una seguridad en sí mismo que cualquiera de sus subordinados y sirvientes sabía que era casi imposible de quebrarse ante cualquier situación. Los que vivían en ese sucio lugar le temían, a excepción de uno, Uchiha Yashiro, la mano derecha y mejor amigo de Uchiha Fugaku.

El jefe Uchiha se dirigía a su despacho, ya que era alrededor de las 9:45 de la noche y había terminado sus ocupaciones en la Corporación que le pertenecía. Cuando llegó a su "negocio", lo único que le interesaba era llegar a su despacho, ya que tenía un humor de los mil demonios, ya después se encargaría de revisar los asuntos de dicho lugar.

Atravesó un par de puertas grandes hechas de madera de roble en el cual tenía un halcón tallado en estas, junto con el escudo de la familia Uchiha. Y al entrar repasó la mirada por el despacho: era grande. Era sin duda, su único lugar favorito ya que podía pensar en todos los hechos que ha logrado, los errores que cometió y los planes para el futuro.
Avanzó unos pasos hasta llegar a su escritorio hecho de la manera más fina y se dispuso a sentarse en su cómoda silla. Frente a él tenía una gran ventana en el cual tenía un balcón; en donde podía ver el mar azul -aunque fuera de noche- y dejaba entrar la fresca brisa.

Se quedó sentado, apoyando los codos enfrente a él y a su boca. La situación de la desaparición de su hijo menor y las circunstancias que estaba atravesando desde la muerte de su esposa lo estresaban. Dirigió su vista de reojo a una fotografía muy grande que se encontraba colgada en una de las paredes del lugar. Era un retrato familiar en donde mostraban a sus hijos diez u ocho años atrás, a su esposa vestida elegantemente junto a él, quien la abrazaba por la cintura mientras ella tenía puestas las manos en los hombros de sus hijos. Cerró los ojos e inhaló profundamente, la recordó cuando ella aún vivía en su mansión y antigua casa, ya que desde que ella se empezó a involucrar con el burdel y sus "negocios" se tuvieron que mudar a éste lugar. Uchiha Mikoto era, -o fue-, para él, la mujer más hermosa en la que Uchiha Fugaku había puesto sus ojos, ya que ella perteneció a una familia aristocrática en la cual la habían obligado a casarse con él, y aunque Fugaku nunca se lo había mencionado a nadie, ni siquiera a ella, se había enamorado de Mikoto como un completo idiota. Ella había tenido un hermoso cabello negro y largo hasta por debajo la cintura, unos ojos negros como la noche y una sonrisa encantadora.

De alguna forma llegó a quererla y más, cuando se habían enterado de que iban a tener a su primogénito. Todo iba de maravilla, siguieron felices años más tarde; la llegada de Sasuke fue que terminó de aumentar la dicha de los tres Uchihas, todo iba perfecto hasta la llegada de cierta persona...