-Recuerdo cuando le Segunda Guerra Mundial había acabado...Todas las mujeres esperaban impacientes el regreso de sus esposos al oír las noticias en la radio y los periódicos...Ha pasado tanto tiempo, pero nunca olvidaré ese baile con el joven más hermoso de la ciudad. -tomó una pequeña pausa para poner en orden sus pensamientos- La vieja gramola emitía nuestra canción. "Ha pasado mucho, mucho tiempo". Nos teníamos que esconder para no ser descubiertos, pero nos daba igual, nos teníamos el uno al otro y eso nos bastaba. -se giró lentamente-...Cuando miro por la ventana aún le puedo ver saludándome con su vieja gorra para hacerme bajar y pasear junto a la muchedumbre.
Rió con amargura y como consecuencia una irritable tos le hizo perder el hilo de sus pensamientos. La joven que estaba sentada a su lado le ofreció un vaso de agua y el anciano se lo agradeció con una cálida sonrisa.
- ¿Y que pasó abuelo?
La chica estaba completamente absorta por la historia.
-Teníamos nuestros trucos. Nos hicimos brazos falsos y dentro de nuestras chaquetas colocamos un falso forro para poder cogernos de la mano sin ser vistos. Sus manos eran tan pequeñas y cálidas...Cuando...cuando te haces viejo no puedes recordar tus mejores momentos con la nitidez de antaño. A veces...pierdes fragmentos de tu memoria que deseas que nunca se olviden...Lo peor de todo es que apenas recuerdo su sonrisa. Solo recuerdo el sentimiento de felicidad que me transmitía. ... ¿Sabes? Cuando se reía el pensamiento de que tenía que ir a la guerra y podía morir desaparecía...pensaba "¡Dios viendo esa sonrisa sería inmortal!"
Volvió a reír y de nuevo la tos atacó a sus pulmones. La mujer volvió a ofrecerle agua pero este la negó y volvió a recostarse sobre su almohada
-Recuerdo el salón de baile. Nos fuimos a un viejo almacén. Steve se llevó la gramola con nuestra canción. Era verano y hacía demasiado calor, pero se estaba muy a gusto en aquel viejo cuchitril. -esta vez rió con algo de picardía-¡si aquellas paredes hablasen!
Stacey rió divertida ante las palabras de su abuelo.
-Recuerdo que comenzó a sonar la canción y nos abrazamos...aquello fue mágico...-el anciano se mordió el labio para volver a tragar el nudo que se había formado en su garganta. Miró a su nieta y para aplacar el dolor le sonrió con la mayor calidez del mundo tendiéndole su mano para darse cuenta de que no estaba solo.
- ¡Se me olvidaba!-la chica salió de la habitación para volver, a los pocos minutos, con una vieja caja la cual depositó sobre la mesa que estaba frente a la cama-pensé que tal vez querrías volver a escucharla. He tardado demasiado porque el disco fue muy difícil de encontrar, pero pude hacerlo.
El hombre la miraba con curiosidad, pero un destello de alegría se iluminó en sus ojos al ver la vieja gramola sobre la mesa. Volvió a morderse los labios para contener el llanto de felicidad y animado comenzó a moverse poco a poco para sentarse en aquella cama.
-Voy a ponerla y me dirás los recuerdos que te vengan a la cabeza...así podrás recordar algunas cosas y yo podré escuchar esta bonita historia-colocó el disco y con cuidado puso la aguja sobre este haciendo que la gramola funcionase. Rápidamente volvió a ocupar su sitio y tomó la mano de su abuelo cerrando así los ojos para ver que sentimiento podía transmitirle.
De pronto una agradable melodía comenzó a salir de la vieja gramola.
Miles de imágenes se depositaban en la mente de aquel anciano, las cuales comenzaron a ser nítidas cuando la voz cantante comenzó a sonar.
..." Bésame una vez y bésame dos veces, ahora bésame una vez más" ...
Algo imposible pudo hacerse real en su mente. -Recuerdo... ¡Recuerdo la sonrisa de Steve a la perfección! Aquellos dientes tan perfectos y aquellos labios...sus pequeños hoyuelos cuando reía suavemente para mi...
No pudo evitarlo. Si ahora alguien viera su cara notaría aquella gran sonrisa incluso a una larga distancia.
..." Ha pasado mucho, mucho tiempo, no me había sentido así, querido, no recuerdo cuando ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo" ...
Ahora en su cabeza se reproducía cuando bailaron juntos por primera vez.
-Fue en el viejo granero y ambos estaban nerviosos porque nunca habían bailado con nadie antes. -En su interior se revolvía la felicidad. –Recuerdo el mal pie que tenía...cuando intentamos bailar un vals y este se caía. Al final tuve que subirlo en mis zapatos-a ciegas reprodujo con sus manos los pasos de baile-...nos pasamos horas y horas bailando...en aquel instante las preocupaciones no eran nada para nosotros...
..."Nunca sabrás cuantos sueños soñé de ti o solo cuan vacíos parecían sin ti, así es que bésame una vez, luego dos veces, ha pasado mucho, mucho tiempo"...
-...Ahora...ahora recuerdo cuando enredaba su pelo rubio con sus dedos para hacerse tirabuzones. Yo siempre me sentía molesto porque lo hacía en cualquier parte y siempre tenia un dedo entre su maraña de pelo...
Conforme la canción avanzaba los sentimientos se hacían más intensos. Su vieja película se estaba reproduciendo con tan solo escuchar aquellas palabras que Steve tanto le repetía.
..."Bésame una vez y bésame dos veces ahora bésame una vez mas ha pasado mucho, mucho tiempo"...
-Cuando me decía "Te quiero" de modo furtivo entre el gentío. Aquello me alegraba el día. Solo movía los labios y entendía cada palabra, cada gesto...-se sorbió la nariz notando como los sentimientos de añoranza florecían en su interior-...le amaba tanto Stacey...tanto...
.."No me había sentido así, querida desde no recuerdo cuando ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo"...
-Recuerdo cuando enfermé una vez y Steve recorrió cada rincón en busca de una medicina. Aquella noche me acariciaba el pelo-se coloco la mano sobre su cabeza y comenzó a mecerla-"solo quiero que mi héroe americano se recupere"...aún puedo escucharlo decirme eso...
Volvió a sonreír cuando sintió aquellos finos dedos sobre su cabeza
..."Nunca sabrás cuantos sueños soñé de ti o solo cuan vacíos parecían sin ti así es que bésame una vez, luego dos veces ha pasado mucho, mucho tiempo"...
..."a pasado un poderoso, poderoso largo tiempo"-...Ahora recuerdo cuando le dije, que tras volver de la guerra íbamos a bailar...Stacey gracias por hacer esto por mi...gracias a ti he podido despedirme de la mejor manera que se-apretó su mano con fuerza-Como siempre lo hacía todo tarde...seguro que ni siquiera está enfadado por haberme despedido en este momento...pero era la mejor manera de no perder tan bonitos recuerdos...Le amaba tanto...
La música ceso y miles de lágrimas brotaron sobre la cara de Gerome. Sentía como su pecho se aceleraba y como aquel nudo subía rápidamente.
La gramola ya no reproducía nada. Steve no estaba. Y los recuerdos que habían llegado a su mente se evaporizaban como si fueran tiras de películas quemándose lentamente. Todo desaparecía entro los más profundos recovecos de su memoria.
Cerró los ojos y suspiró, agarrando fuertemente la mano de su nieta, la cual lloraba en silencio al imaginarse los buenos momentos que ahora estaban perdidos.
A partir de aquel día había cumplido el último sueño de su abuelo. Nadie en la familia sabía sobre esta historia. Se la había confiado a ella y su secreto estaría a salvo para siempre.
Steve murió cuando Gerome regresó de su última batalla. Había caído gravemente enfermo de tuberculosis y ni siquiera pudieron despedirse. En su vieja caja del ejército, montones de cartas, de viejas fotografías, chapas de refrescos...toda una vida en aquel cuadrado que Stacey almacenó en el lugar más indicado de todos. Junto con su cuerpo.
Durante el funeral su nieta recordó las últimas palabras de su abuelo. Limpió la vieja gramola y volvió a colocar aquella canción. No sabía si era por el momento de confusión o el sentimiento de tranquilidad pero en su rostro se podía notar una clara sonrisa.
Ahora estarán los dos bailando el baile que se prometieron tras el regreso de Gerome. Si tan solo hubieran vivido un poco más podrían ser libres, podrían besarse en público, podrían bailar ante la atenta mirada de todos...
Ha pasado mucho tiempo, un poderoso, poderoso largo tiempo y ahora por fin vuelven a estar unidos de nuevo.
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Long time
Short StoryGerome es un anciano que después de tantos años, decide contarle a su nieta quién era su verdadero amor.