Confusiones.

33 1 0
                                    

¿Alguna vez han sentido que su camino no los guia por donde deberían ir realmente? ¿Se han sentido perdidos entre tanta multitud? Ahora experimento aquello que tanto temia desde que me comentaron sobre ello, ¿tristeza, impotencia, molestia? Siento una mezcla extraña en mi no existente corazón humano, me es deprimente ver a las personas pasar con su pareja, dándose cariño y demostrando la felicidad que yo no tengo por ser diferente ¿porque soy el indicado para ese azabache de ojos cafés? Apenas podía ver por aquella ventana empañada a las personas que iban y venían de un lugar a otro intentando no dejar que el frío les penetrase la piel, se escondían en sus abrigos afelpados para mantener la calidez de sus cuerpos y otros se abrazaban para desprender ese calor faltante, sí llegará a experimentar eso con el japonés ¿cómo me sentiría, feliz? ¿por fin me sentiría amado por algo más que fuera mi inevitable soledad? Desde que permanecí con Pichit en aquella pequeña casita donde me construyo me pregunté si mi vida sería la misma después de salir a la luz. Era algo que no me dejaba descansar aquellos circuitos que a pesar de todo necesitaba para sobrevivir, era un método de adaptación a lo nuevo que estaba por venir en mi vida en aquel pueblo de apariencia tradicional, a pesar de todo además de las palabras reconfortantes me sentía sólo y me gustaba estarlo aunque me pareciera mejor que la soledad se fuera con los extraños sentimientos que me invaden.

¿Podrían dejarme descansar pensamientos? Admito que me preocupa el hecho de estar aquí sin hacer absolutamente nada aparte de ver las gotas de lluvia caer del cielo, tengo a mi posible alma gemela a unas cuadras y me siento patético para volver a verle a la cara después de el estúpido drama que hice, me doy cuenta que eso no es suficiente para enamorar a alguien, el amor tiene que desarrollarse en un lapso de tiempo largo y continuo, ¿se puede amar una mirada? Si eso fuera posible, yo estoy enamorado de la de un joven con orbes achocolatados que para el mundo entero son comunes pero a mi se me hacen radiantes y especiales. Quiero aclarar mis sentimientos y mis ideas, sin embargo mi situación actual no me deja enforcarme en lo verdaderamente importante, sino en lo innecesario e irrelevante.

–Viktor ¿Te sientes mejor?– Pichit cuestionó algo quizás obvio pero a veces no era tan predecible como en otras ocasiones.

–No tengo opción de mentirte así que francamente te confieso que estoy confundido– Repliqué ante su pregunta.

–¿El peso de la conciencia?– Mencionó de forma casi inaudible hacía mi persona.

–Lo más probable es que sea culpa, decepción, y otros sentimientos por mi accionar de un día atrás– No hice más que suspirar al verme descubierto por el moreno.

–Entiendo, aún te faltan muchas cosas que resolver y vivir por tu cuenta, este es un inicio aunque no hayas comenzado por otras etapas en un principio– Murmuró Pichit para que sólo escuchará yo su voz en esa habitación.

–Me siento solo aún rodeado de personas distintas– Me puse cabizbajo por otra confesión que le había dado a conocer al moreno.

Sólo escuche un suspiro y pisadas dirigirse a la puerta para salir y abondonar la reducida habitación en la que me encontraba, ahora mi mente estaba más revuelta que en un inicio, ahora me siento extraño, necesitado de algo que no puedo asegurar con exactitud, ¿era acaso otra alucinación a causa de mis distintas dudas a la vida? Me saco de mis pensamientos el sonido que emitió la puerta cerrada anteriormente por Pichit, solté un suspiro al saber que iba a contarle todo a su pareja para que le consolase de no saber que hacer conmigo y mis constantes pensamientos depresivos, era comprensible que quizás le estresara lidiar con alguien tan cambiante de emociones como lo soy yo, incluso me harta a mí mismo el saber mi forma de ser y de pensar con respecto a esto, sólo algo lo ocasionó, sólo algo fue lo que provocó mi inquietud y repentino malestar mental, un japonés de orbes chocolate.

Cuando creí estar sólo y me sente sobre el piso sentí como una cálida mano se posó en mi hombro lo cual causo que al momento me sobresaltara, cuando voltee a ver de quien se trataba me lleve una gran sorpresa al ver al dueño de mis inquietudes mostrando una gran sonrisa y agitando su mano como saludo mientras me dirigía una mirada amable, eso realmente me tomo desprevenido pues entro con gran sigilo a esa pequeña y no tan espaciosa habitación vacía, sentí su mirada aguardando por una explicación a lo de ayer.

–Tu amigo me dijo que vivías con él y quize visitarte porque ayer no hablamos adecuadamente– Me extendió su pequeña mano para que la tomará sin embargo no deje que llevará a cabo su acción.

–Perdona, ayer estuve un poco ocupado con mi amigo y me ofreció hospedaje que no rechacé– Mostré mi dentadura a la persona enfrente mío que sólo se limitaba a verme.

–¿Eso significa que te veré frecuentemente por aquí, cierto?– Note una pizca de emoción en su voz que quizo disimular segundos después.

–Se podría decir que sí– Respondí lo más naturalmente que pude y me permitió el nerviosismo.

–¡Vaya eso es genial!– Se sonrojo al instante por dejarme ver su emoción contenida.

Solté una pequeña risa al ver su felicidad a flote, era un humano de lo más interesante el cual me encantaría cuidar de todo aquello que quisiera opacar aquella radiante sonrisa que mostraba al estar contento, era algo que protegería con mi propia vida. ¿Acabo de imaginar una vida con él? Quizás sólo estoy demasiado cansado para pensar con claridad y estoy inventando cosas que no pasarán aunque lo sueñe.

Voltee unos segundos viendo a Yuuri muy cerca de mí, cerre mis ojos al instante y me acerque aún más curioso, fue casi un leve choque entre nuestros labios a no ser que ciertas personas hayan azotado con tanta rudeza la puerta de madera de mi querida "habitación" y se haya hecho hacia atrás pegándose con el otro extremo de la pared.

–¡Viktor! ¿Estás bien? ¿No ha ocurrido nada?– Ambos entraron preocupados a revisar si pasaba algo fuera de lo común pero lo único que encontraron fue un Yuuri sonrojado en la pared contraria.

–¡Hola Yuuri!– Al instante de verle saludaron ambos al unísono, uno más animado que otro pero igualmente lo hicieron.

Les jale a ambos de la ropa para decirles un pequeño detalle que estaban olvidando ambos, él no les conocía y jamás les había visto así fue como de repente salieron de nuevo por donde habían entrado apenados al haber olvidado algo tan importante.

–¿Son tus familiares?– El ambiente se había vuelto tenso pero al instante rompió el hielo con su voz.

–Son sólo unos amigos que duermen aquí, ya sabes– El asintió al entender se que le estaba hablando.

–¿Tu vives sólo en un departamento tan grande Yuuri?– Note su incomodidad al sacar el tema.

–En un principio sería para mí pareja y yo pero el incoveniente es que no tengo pareja– Se rasco la nuca por unos segundos y después poso su vista en mí.

–¿Y tú Viktor tienes pareja?– Me miro expectante esperando por una respuesta.

ஓீۣۣۣ፝ۜ፝͜͜͡͡ঔৣۣۣ፝ۜ͜͡. Continuará ۣۣ፝͜͡ஓ

Hola fantasmitas, después de tanto tiempo me llegó la inspiración y actualice la historia, quiero aclarar que la historia estaba hasta el capítulo 3 sin embargo sentimos que la trama iba muy rápido y quizás era muy irrealista al verdadero amor.

-Víctor.

~♠Detrás de un espejo♠~ [Viktuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora