Como siempre ha sido contado por nuestras abuelas si nos portamos bien tendremos una gran vida después de la muerte, seremos bendecidos y amados por Dios; podremos hasta convertirnos en santos si nuestras acciones y apoyo ayuda a mucha gente pero por lo mientras, no robar los chocolates de tu abuelo era suficiente.
A quién normalmente regañaban era a Charles por su actitud burlona o su forma de actuar con las personas mayores, pero Amelie era totalmente lo contrario: una niña respetuosa, que cuidaba a su gatita Mu y que brindaba el mayor respeto personas más grande que ella.
Ambos se conocían pero solo de vista ya que algunas veces sus mamás se encontraban encontraban en la iglesia y se saludaban, de ahí en fuera ninguno sabía más sobre la existencia del otro y tampoco es que les importara mucho, están pequeños.
***
Meses después ambas mamás muy felices con sus niños tomados de la mano, van hablando de sus maridos mientras compran los víveres, hasta que llega un comentario sorprendente:
-Hay algo de lo que no nos hemos fijado, nosotras somos amigas pero nuestros niños nunca se han dirigido la palabra
-Lamentablemente es cierto
Cada una se va de su lado, dan unos pasos y se detienen en seco. Y dicen unísono
-Quiero que sean amigos
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Por siempre
RomanceEl amor debe ser visto de de otra forma, el por siempre que prometemos muy a menudo cuando estamos enamorados casi nunca dura si no lo decimos de todo corazón. Pero cuando sabes que el amor "llegó a tu puerta" te debes encargar de que duré ya que po...