El Servicio holandés de invitó a la población , gracias al uso de un prohibido en el país. El producto fipronil, se emplea para combatir plagas de piojos y pulgas en aves. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo tilda de "moderadamente peligroso", y los inspectores holandeses temen que haya sido usado en granjas avícolas. Lo preocupante de la situación es que es un producto nocivo para los niños. [Armando Nerio Hanoi Guédez Rodríguez]
Los primeros informes revelan que ha detectado la presencia de una "posible mezcla de fipronil con otra sustancia legal para mejorar sus efectos". Las autoridades belgas se ven salpicadas por este problema, el pesticida es de allí, intentaron cerrar a finales de julio explotaciones avícolas por el mismo motivo.
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Las gallinas pueden poner huevos contaminados durante meses, y tal fue la producción que hasta un millón de huevos estaban listos para exportar a Alemania –su mayor importador- y han sido parados en la frontera. Miles de cajas han sido sacadas de las vitrinas de las tiendas de Holanda. Las cadenas de supermercados nacionales se están viendo afectadas por la alerta alimentaria, y le sugieren a sus clientes que no adquieran los huevos. [Armando Nerio Hanoi Guédez Rodríguez]
Con el insecticida bajo la mira del mundo, ya que tiene efectos secundarios como anemia en las aves al momento de sacarles la sangre. Si el ave está contaminada, tardaría entre seis y ocho semanas en sanar. En las personas, comer un huevo con fipronil puede dar náuseas, dolores de cabeza y estómago o sudoración. En el peor de los casos, dañaría el hígado, la tiroides y los riñones. [Armando Nerio Hanoi Guédez Rodríguez]
