Nueve: Adam

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Era una nueva semana en el colegio, un lunes como cualquier otro, gris y aburrido. Estaba pensando en todo lo que había pasado en el fin de semana y me preguntaba qué había cambiado de mí, qué había cambiado de Adam. En unas cuantas horas puede cambiar la vida, siempre me lo dijeron, pero hasta hace poco lo entendí.
Nunca me imaginé que ligaría con el ex de mi crush y mucho menos con el chico más guapo de toda la escuela, me sentía patético y raro, este no era  yo, esta no era mi vida; ya no sabía qué había pasado con ella.
En mi cuello seguían habitando restos de besos desesperados y expertos de Adam, no eran accidentales ni pequeños. Se notaban demasiado, estaban en las partes más visibles como si lo
hubiera hecho a propósito, como si intentara marcar su territorio en mi cuerpo con sus labios y dientes, buscando dejar una cicatriz de amor en mi dermis.

Mientras caminaba por el patio hacia mi casillero Will me miraba con cara de asombro— ¿Qué coños te ha pasado en el cuello? ¡Alguien se portó mal!— dijo Will mientras me tocaba el cuello, tenía una cara de sorpresa y de risa.—¿Me vas a contar quien te los hizo?—Inquirió esbozando una sonrisa pícara.
—Nadie, no pasó nada— evadí su mirada mientras buscaba mis cuadernos en el casillero. Mi amigo comenzó a moverme y a hacerme caras para que le dijera lo ocurrido.
—¿En serio no me dirás? ¡Me parece una falta de respeto Alex! Yo siempre te cuento todo— soltó con un tono de estrés y ansiedad
—Es secreto, no lo puedo decir— dije. De repente pasó Adam por mi lado con sus amigos de Ultimo grado y me dedicó una sonrisa pequeña y morbosa cuando sus amigos no lo miraban, era de esa clase de sonrisas que reza «Tú sabes lo que hicimos» y siguió su rumbo hacia su clase.
—¿Me estás vacilando Alexander? ¿Es en serio? ¿Con Adam? No lo puedo creer, estoy muy disgustado— Will de verdad estaba impactado —No puedo creer que te hayas metido con el ex de tu traga, en serio, la cagaste, y ¿qué hay de Cristina? ¿No son novios? —

La habilidad de Will de inferir las cosas era de un agente especial del FBI, pues dedujo todo en menos de un minuto con una mirada.
—Está bien Will, puede que haya pasado algo con Adam, pero no es para tanto—dije a Will esperando que entendiera sin complicaciones
—Repito, y ¿Christina no es tu novia, Alex? ¡le estás siendo infiel!— decía Will hiperventilando como si estuviera enojado y emocionado al tiempo
—Christina es mi novia, pero por alguna razón no se ha comunicado conmigo y eso que me desmayé, quizás está molesta porque no la quise acompañar a comprar sus libros de Alícia en el país de las maravillas— era algo muy típico de Christina, le fallaba una vez y creía que la odiaba; obviamente no era así, yo la amo, aunque quizás sea tiempo de dejarla ir. —En fin Will, fue una cosa de una noche, no es como si fuéramos a casarnos y vivir en Madrid.
—Sigue siendo infidelidad por más que lo minimices, eres un infiel.
—Dime algo que no sepa querido amigo— respondo con gracia, Will siempre había sido muy moralista y odiaba que tuviera esas actitudes, pero aun así me amaba y éramos mejores amigos, nos complementábamos y entendíamos a pesar de ser tan distintos como el agua y el aceite.

**Nunca hago esto, pero quería hablarles, estoy muy emocionado con la trama de la historia y para serles sincero ni yo sé cómo va a terminar, lo cual es aún más motivante.

Sin más que agregar, espero poder seguir escribiéndoles pronto, disfruten chicos**

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⏰ Última actualización: Feb 19, 2018 ⏰

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