a little gay | EVAK

002. Engaño

No podía más, quería saber lo que Jonas me ocultaba, sé que era serio, yo que no podía dejar pasarlo por alto. El siempre me contaba todo, por lo más insignificante que sea.
La cautivadora sonrisa falsa que escondía su dolor, no lograba engañar me.
Noora me decía que los secretos no hacen humanos, pero yo no lo comprendía. ¿Como una persona que guarda tantos secretos pude fingir estar bien?

Me dirigí al departamento de Noora que se encontraba al lado del mío, para buscar algunas cosas que me olvidé el jueves pasado.

En ocasiones no se qué sentir al estar con Eskild, a veces me habla de moda y de Kylie Jenner, y la verdad es que no entiendo nada de lo que sale de su boca.
—Hola cariño, ¿Cómo te encuentras hoy?-

—Bien. -le respondí.
No me desagrada Eskild pero es intensamente irritable Y tiende a psicoanalisar me. Su forma de ser me hace sentir incómodo, a su lado me parezco una persona tímida y callada, odio que piensen eso de mí.

Me dirigí hacía la habitación de Noora y Abrí la puerta, seguí con la vista un rastro de ropa que lucía revuelta. Con total normalidad me adentré sin mirar el coito que estaba sucediendo, agarré mis cosas y me fuí dirigiendo me hacía la puerta con rapidez.

—¡Isak!

—Perdón, perdón. -y cerré la puerta.

Encontrarse con un chico diferente todos los días en esa habitación era normal, era algo cotidiano pero esta vez me encontré con alguien totalmente diferente.

Llegué a mi departamento y encontré a Jonas desvanecido en el suelo  rodeado de latas de cervezas y con un ojo morado. Era la primera vez que veía a Jonas tan ebrio, noté que se encontraba enfadado.

Su tez pálida y sus ojos color avellana que tanto me cautiva, compromete mi orientación sexual cada vez que lo veo. Sus cabellos rizados y delicados estaban totalmente desprolijos y maltratados. Su estado lo hacía decir palabras sin sentido pero eso me volvía completamente loco.

—¿Jonas?, ¿En dónde estabas?—
Me dirigí a la cocina y le llevé un baso de agua de la canilla.

—¿Me vas a contar, o qué?- Le dije un poco molesto pero a la vez preocupado.

—Yo-yo, quiero dormir.

-Jonas. enserio, quiero saber que te ocurre, Estuviste raro todo el dia.

—E-Eva me engañó con Chris.

—¿Chris?, ¿Penetrator Chris?— Dije un poco sonriente.

—¡Si!, y ¿cómo sabes?—Yo ya no quiero saber nada más, de nada.

Eso explicaba las latas de cervezas pero no el moretón en su ojo izquierdo. Jonas siempre resolvía sus Problemas con un par de cervezas y videojuegos, pero no creo que esto valla a mejorar pronto.

—Y... Ese moretón?

—No es nada, solo tuve una pelea.