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—¿Hola?—

—Heya, ¿Como has estado?—

—¿Horror?—

—El mismo jodido sans de siempre—

—Horror cuanto tiempo sin hablar—

—Podemos hablar él problema es un esqueleto llamado "Dust" —

—Ya habíamos hablado de esto—

—No puedo creer que te quedes con ese bastardo, hijo de puta que te trata como su jodido juguete—

—¡Horror! Yo tome esta decisión—

La conversación se torno a una discusión por celular, pero lo que no noto Killer era que desde él marco de la puerta lo estaban observando, escuchando, vigilándolo

—¿Tan puta eres Killer?— se escuchó la voz de dust en la oscura habitación

Él verdero horror estaba por comenzar, tan solo escuchar su nombre de la boca de Dust lo hizo temblar

—T-tengo que colgar —

—¿Qué? ¡Espera Kil---!—

La llamada se cortó, él corazón le latía muy rápido

—Creo que ya te había quitado ese celular ¿No?—

—D-dejame explicarte—

—Calla tu sucia boca—

Dust se acerco a Killer, demasiado cerca para quitarle aquel celular

—¿Con quien hablabas?—

—Con Horror, Pero no fue na--

—¡Callate!—

La imaginación volaba en muchos sentidos y la de dust no era la excepción, tanto como los celos subían de nivel

Tiro él celular en sus manos pisoteandolo hasta que este dejara de funcionar

—Que te quede claro, soy él único a quien le puedes hablar a nadie más, ¿¡ENTENDISTE!?

—Si... —susurro

—Ve a acostarte a la cama— con su dedo apunto a lo nombrado, quien, no dudo en que su ojo, del enojó, se tornora de color morado

Killer se levanto del asiento que tenia junto a la ventana, paso a un lado de dust, lentamente sin mirarle a la cara.

Dust agarro vuelo con su mano y la estampó en él trasero de Killer

—Ah~ D-dust— gimió de dolor

—¡Camina a la puta cama!— dijo mientras caminaba atrás de él

Killer llegó a la cama, iba a subirse pero un pie lo hizo tropezarse, haciéndolo apoyarse en su cama y que las rodillas llegaran al suelo.

Él sonido corto él silencio que reinaba en toda la habitación. Las nalgadas que le propinaba cada vez mas fuertes a Killer y los gemidos llenos de dolor era lo único que se escuchaba

—¡Ah!~ Y-ya, D-dust—

—No te escucho perra, solo escucho los gimoteos de puta—

—P-por favor, A-ah L-lo Sient-oh~—

—No te escuchó —

La ultima nalgada fue tan fuerte  que le sacó unas cuantas lágrimas a Killer

—¡LO SIENTO!— gritó/gimoteo

En ese mismo instante Dust dejo de darle las nalgadas para acomodarse en la cama, atrayendo a Killer a él

Al siguiente día, Killer tení los huesos lastimados, algunos quebrantados y otros con heridas que podían ser tratadas si Dust lo llevara con Science, cosa que, era imposible



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Firma: Anónimo

My HusbandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora