Capitulo 4

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Me habia quedado dormida en la cama. Derrepente alguien llamó a la puerta. Era él con voz preocupada.

-Está bien señorita? Hace un par de horas que no le veo por la casa, sigue ahí?

-Si, me quedé dormida, y por favor no me llame señorita.-Dije enfadada. No me gustaba que me llamaran así, era ridiculo.

-Muy bien señorita.- No le dije que.... Lo hizo a drede, pude oir una risita tra la puerta. Oi como bajaba las escaleras muy despacio.

Decidí bajar y dar una vuelta por la casa  a ver si veía a Maria para poder charlar un rato, era una tarde muy aburrida. Como no la vi denttro, salí al jardin, estaba tendiendo unas sabanas blancas y vi su sombra detrás de ellas. Pensé en darle un susto, aunque no sabia como le iba a sentar la broma. Me acerqué despacio sin hacer ningun ruido. Cuando salté al otro lado de las sabanas gritando  "uh", la sorpresa me la di yo. Era Erik, tan guapo como siempre, pero esta vez más. Llevaba puesto unos jeans azules, sin camisa y unas bambas deportivas, al parecer se habia puesto comodo al decirle anteriormente que no iba a salir. Me excitaba verlo sin camisa, se le notaba que hace ejercicio, tenia las abdominales muy duras y se le marcaban como si fuera una tableta de chocolate. Al verlo así allí plantado me corrio un calambre por todo el cuerpo y me sonrojé por lo que acababa de hacer. A todo esto, que hacia tendiendo las sabana? y Maria?

-Querias darme un susto?

-No a ti precisamente. Y Maria? Donde está?

-Pues.... Salí hacer ejercicio y la vi aqui fuera un poco mareada. Le dije que se fuera a descasnsar que yo haria su trabajo, como no iba a salir usted SEÑORITA, pues decicí ayudarle.- Dijo lo de señorita para que me pusiera rabiosa, seguro. Pero disimulé y no lo hice.

-Vale. Y que faena te dejó para que hicieras a parte de tender las sabana?

-Tengo una lista, quieres verla?

-Una lista?

-Si. Maria cada dia hace una lista para hacer el trabajo e ir tachando lo que hace, para que no se olvide nada. No lo sabias?- Se estaba haciendo un poco el listillo. Pero no le seguí la corriente.

-Voy a ver como se encuentra.- Cuando me di la vuelta notaba que algo me detenia.Erik me cogió del brazo.- Que haces? Sueltame.- En realidad no queria que lo hiciera, queria que me diera un beso como en la picina para poder devolverselo.

-Oye... lo de antes... a estado mal... lo siento.-Me quedé mirandolo un momento a los ojos.Se arrepentia del beso? Quizas me dijo eso porque la chica que vi en la entrada seria su novia y se arrepentia de besarme, por eso dijo que estubo mal. No estubo mal. Para mi no.

-Si, estubo mal.- Que estaba diciendo? Me dolia la cabeza de tanto que me liaba este chico. sentia algo especial por él, pero el hacia a mi no, porque me dio un beso y se arrepentió. A caso besaba mal yo o que? Queria que lo repiriera otra vez, queria que me besara.- Voy a verla.- Cuando dije esto me di la vuelta rapidamente y me tropecé con la fuente que habia justo detrás mio, me hice polvo la rodilla, me salió una mancha morada al momento. Erik me cogió por la cintura por si me caia al suelo.

-Estas bien?

-Creo que me he destrozado la rodilla.

-Eres un poquito patosilla. Porque no miras por donde vas?

-No es mi culpa, la culpa es de la persona que puso la fuente en medio del jardin, a quien se le ocurre hacer semejante tonteria.-Erik empezó a reirse.- No tene gracia, auch!!!- Me quejé, la verdad que dolia bastante.

-Entremos dentro, te curaré la herida... si usted me lo permite señorita.- Le di un golpe en el brazo.

-No me llames así. Por favor.-Dije más calmada.

El ProtectorWhere stories live. Discover now