Capítulo 13

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Después de estar hablando la noche anterior de todo ese tema, al día siguiente estábamos en casa de sus padres los cuatro juntos en el comedor, primero eran ellos antes que nadie más. La verdad es que aunque me dijo mil veces que estuviera tranquila que eran muy buenos, mis nervios eran traicioneros y estaba como un maldito flan, con el estomago al revés y parecía que tuviera ganas de vomitar en cualquier momento. Noté que sus padres nos miraban sin comprender mucho la situación, ¿y si no me aceptaban por ser extranjera? Había leído que muchos coreanos eran tradicionales y que sus hijos solo quieren a chicas de aquí, nada de mezclas.

- Tenemos que deciros algo importante. - empezó hablar Ji Yong a mi lado. Su padre se levantó de golpe.

- ¿Que ha pasado, hijo? - dijo alarmado, pero al momento su mujer le hizo sentarse y le esbozó una sonrisa tranquilizadora, la cual a mi también me tranquilizo un poco interiormente.

- No te alteres antes de tiempo. - entonces entendí las palabras de ayer de Ji Yong, su madre sospechaba algo, y más cuando le sonrió a su hijo con ternura para darle ánimos.

- ¿Que es? - dijo su padre medio serio, aún seguía a la defensiva. ¿Y si era el que dijera un no rotundo? ¿entonces qué pasaría con nosotros?

- Quería que supierais que An y yo estamos saliendo juntos en serio. - y acto seguido me cogió de la mano con fuerza para darme ánimos y no me sintiera nerviosa. Note como mis mejillas empezaban a arder demasiado, me giré para ver a Ji Yong y vi que las tenía igual que yo. Pude deducir que decir estas cosas a los padres era vergonzoso daba igual de que país eras.

Cuando volví a mirar a sus padres, vi a su madre esbozar una sonrisa más amplia y su padre tenía una cara de no creerse lo que estaba escuchando.

- ¿La has dejado embarazada? - soltó su padre de golpe. Mis ojos se agrandaron como naranjas, ¿en serio que había soltado esa barbaridad? Me quedé alucinada, estaba a cuadros.

- ¡Papa! ¿Que dices? - dijo alterado esta vez él por tal pregunta. - ¡Claro que no! ¿Como quieres que haya pasado eso? Lo que te dicho es que somos novios y ya está.

- Ya me lo imaginaba, si es que a una madre no se le puede esconder nada. - dijo levantándose hacia nosotros. - ¡Me alegra muchísimo! Se os ve tan felices. - y nos abrazo a ambos. Era tan adorable, le abracé y suspire a la vez, me sentía algo más aliviada. Cuando se separó de nosotros miró a su marido mal. - Mira que decir estas tonterías.

- Pero...ella se marchara dentro de poco y tu lo tienes todo aquí, ¿no? Tu sueño. - dijo su padre, parecía que no lo veía bien lo nuestro y ahora es cuando empezaba a soltar las cosas que un padre diría para proteger a su hijo, era comprensible.

- Papa, no te preocupes. Si os lo hemos contado es porque vamos en serio y tenemos un plan de futuro juntos. - dijo Ji Yong todo orgulloso y con una gran sonrisa. ¡Adorable!

- Cuéntala. - dijo su padre no muy convencido, mientras que su madre volvió a sentarse en el mismo sitio de antes para poder escuchar tranquilamente con esa sonrisa que hacía que estuviéramos más relajados. Esta mujer era una santa, y tenerla de suegra no era para nada una mala idea.

Así que Ji Yong empezó a contar todo nuestro plan del que estuvimos hablando el día anterior, lo de acabar el curso en mi ciudad y volver aquí para quedarme para siempre, y lo de mi amiga también.

- ¡Me parece genial! ¿Así que te vas a quedar? ¿estas segura? - me pregunto su madre sorprendida por mi decisión.

- Si. - dije tímidamente y volviendo a notar mis mejillas rojas.

- ¡Eso sí que es amor! - dijo dándole un pequeño golpe a su marido riéndose. - Has visto, ¿cariño? ¡Que bonito! - estaba tan ilusionada que hacía que se me pegara a mi también.

Un viaje de 180º (G-Dragon Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora