Conected

El comienzo.

Lunes 12 de Septiembre (Coventry)

Era un día lluvioso en Coventry, sonó el despertador y Edward sabía que le esperaba un día largo. Llevaba unos pantalones chinos sujetados por unos tirantes negros, una camisa blanca, unos all star blancas y un abrigo negro largo.Se disponía a hacerse un café y así poder despejarse para el nuevo día que iba a transcurrir.Nunca había tenido los nervios que tenía ahora, estaba nervioso por no dar la talla en su puesto, por fallar y nunca poder dedicarse a lo que realmente le gustaba: ser editor.

Durante el trayecto iba pensando en como sería trabajar allí, pero nunca se iba a imaginar lo que se encontraría. Llegado a la oficina entró en su despacho y se encontró con una bella y carismática mujer. Edward la miró embobado cuando de repente ella caminaba hacia él pero algo lo despertó de su trance al oír aquella voz con un acento extraño.

-Hola, tú debes de ser Edward-dijo ella acercándose hacia él.

-Sí, ¿y tú eres...? -dijo él embobado ante su reacción.

-Soy Dagny, y voy a ayudarte en lo que necesites-respondió esta estrechándole la mano-te he dejado encima de la mesa el programa para hoy, si tienes alguna duda pregúntame lo que sea.

Edward quería seguir hablando con ella, conocerla, pero en vez de eso se queda mirando atontado como se marchaba a su despacho y él decidió ir hacia su mesa. Mientras se dedicaba a hacer su trabajo, vio unos papeles con unos números, él, confundido, decidió llamar a uno de eses números.

-¿Hola?-dicen por la otra línea.

-¿Dagny?-responde él extrañado.

-Ya me imaginaba que estabas liado, voy ahora hacia tu despacho.

-Yo...esto...no estoy liad...-Era demasiado tarde porque ella ya le había colgado.Se sentía estúpido, quería impresionarla, pero por lo menos consiguió algo bueno a cambio de aquello.

Dagny pasó todo el día ayudando al chico nuevo.Ella no era el tipo de chica que perdía el tiempo ayudando a otros.   Ya terminado su turno cuando se iba a ir, él le dijo:

-Oye, ¿Qué tal si tomamos algo ya que hemos terminado el trabajo? No se...así descansam...

-Mejor céntrate en tu puesto-dijo cortante y marchándose por la puerta.

"-Segunda vez que me interrumpe en el día"-pensó él.

Edward se quedó anonadado y continuó en la oficina hasta tarde.Durante el trayecto pensó en lo bien que se había integrado en el trabajo pero al llegar a casa se dio cuenta de no podía quitarse a Dagny de la cabeza.No sabía por qué le trataba así, se preguntaba que había hecho mal pero sabía que esa chica no era fácil.