Reborn

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---POV YUL---

-No sé cuanto tiempo llevamos así, ya no siento el hombro húmedo, pero no quiero molestarlo, es más me da miedo hacer el más mínimo ruido o movimiento. De pronto él levanta la cabeza y se aleja.-

Adam: Lo siento

-Me entristezco de nuevo al escuchar tan débil disculpa, donde esta el chico que hace unos momentos me reprendía, no pensé decirlo, pero preferiría que me regañase en este momento antes que a ver presenciado lo que vi y antes de ver lo que ahora contemplo. El se aparta de mi lado y siento como si me faltase algo, comienzo a caminar tras de él, pero no parece si quiera notarme, me maldigo por ser una persona tan simple que nadie ve.-

Yul: ¿A dónde vas?

Adam: ¿Qué importa?

-Lo veo alejarse y por alguna razón no quería que eso pasara.-

Yul: ¿Estarás bien?

-Como era de esperarse la pregunta no le cae en gracia, es muy cruel que me alegrara su reacción, pero cualquier otra expresión en su rostro era mejor que aquella de profundo dolor.-

Adam: Deja me en paz

Yul: Es que...yo, me preocupas

Adam: No digas idioteces, ni siquiera me conoces

-Me muerdo los labios en realidad tiene razón.-

Adam: Si te hace sentir mejor, voy a cualquier bar que encuentre, tomare un par de tragos y me largare de este estúpido país al que nunca debí volver, ahora ¿contento?

Yul: Yo voy contigo

Adam: ¿Qué? Oye mira ya cumpliste con "tu pago" no me siento orgulloso de lo que me paso hace un momento, pero no necesito una niñera... no para mi, como sea solo piérdete.

-El comienza a caminar a paso rápido y me cuesta seguir su ritmo, no tengo idea de porque lo sigo, pero me niego a perderle la pista. Sin notarlo hemos llegado a una zona reconocida por bares y clubs de mala muerte, me estremezco al notarlo, este definitivamente no es un ambiente con el que me sienta seguro o siquiera cómodo, no podría desentonar más, ¿por qué elegí una camisa rosa para usar el día de hoy. Le veo entrar en un callejón que conduce a la entrada de un bar bastante ruidoso. Ok puedo entrar, debo entrar. Camino con seguridad a la entrada y observo al fornido hombre de la entrada.-

Guardia: ¿Es un chiste?

Yul: Qui-quiero entrar

Guardia: Jajajajajaja.....

-Escucho risas sonoras de personas cercanas y comienzo a retroceder, sabía que mi apariencia no era la adecuada, pero tiene que ser tan directos.-

Guardia: Ve a tu casa niño apuesto que mañana podrás ir al café que te plazca, esto es un bar para adultos.

Yul: ¡Pero el chico que acaba de entrar no es un adulto!

-Me tapo la boca al momento pero a sido demasiado tarde, el hombre me mira haciendo una mueca de coraje.-

Guardia: ¡Malditos extranjeros! Se creen intocables

-Veo como aquel hombre se dirige al interior y en pocos minutos escucho chicas gritando y un gran tumulto saliendo a borbotones, veo a un hombre vestido con un traje similar al guardia de la entrada salir a tropezones con un golpe en el rostro e incorporándose para regresar furioso al interior. Más personas salen cubriéndose y a mi lado una botella pasa volando y algunos otros chicos que permanecían afuera entran divertidos, como si aquello representara algo interesante en una noche más, dudo y comienzo a caminar a la entrada, quizás paso algo adentro y necesita mi ayuda, quizás...De pronto una pequeña multitud de hombres con traje salen gritando maldiciones y arrojando un cuerpo al suelo, me estremezco al ver que se trata de él.-

KAHOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora