cuando los cerezos florecen [edición]

Parte 30 una propuesta repentina

Por milésima feliz enma dejo que suspiro escapara de sus labios y la razón era porque había pasado tres días desde la fiesta y desde haru no volvía a la mansión ,si era poco, ella tampoco contestaba sus mensajes o llamada ,para colmo desde que regreso su guardiana mas fuerte lo agobia con montañas de trabajo. por esa misma razón ahora estaban trabajando sin parar

Adelheid que se mantenía al margen de la vida privada de su hermano, dejo su postura para averiguar cual pudo ser la razón por el cual la futura señora shimon no se encontraba en la mansión- y bien enma que hiciste 

El pelirrojo la miro ofendido-por que crees que yo tuve la culpa 

-por que la mayoría de la veces que una mujer deja a un hombre es por que la engaño o por que metió la pata-respondió con indiferencia la azabache mientras terminaba de revisar los documento que le faltaban 

-yo no la engañe-se altero enma, para luego bajar la vos –mas bien parece que ella me engaña a mi-soltó cuando recordó cuando vio a haru y hibari juntos 

Adelheid alzo una ceja interrogativa tratando de descifrar lo que pasaba por la mente de su hermano-hombres nunca aprenden –pensó para luego soltar un leve suspiro-enma no trates de ocultar el problema solo porque estas celoso de lo cercano que son el guardián de la nube con haru

-no estoy celoso-se defendió el décimo shimon fingiendo leer documento- y tampoco estoy tratando de tapar nada

-sigue pensando así, y le darás motivos a haru para comenzar a dudar-lo interrumpió la guardiana del glaciar –no lo olvides enma, tu y ella no son familia ni mucho menos comparte las misma sangre, una vez que la distancia crezca será imposible que puedan estar juntos de nuevo

-no seas tonto y ve a disculparte 

Con aquella palabras adelheid abandono la oficina, dejando enma, pensando, sabía que debía disculparse , también sabia esta pelea que tuvieron solo era una pequeña parte de los problemas que tenían y que había intentando dejar pasar y también sabia que era su maldita culpa por no  ser capaz de trasmitirle a haru sus sentimientos 

El silencio reinaba en la oficina de hibari, tanto el como haru se encontraban sumergido en un centenar de documentos a la ves ninguno intentaba hablar, hasta que el pelinegro hablo-haru vuelve con el herbívoro 

La castaña no aparto sus vista de los documentos que tenía en la mano para responder- así le agradeces a la persona que te está ayudando

-miura-volvió a llamar hibari, molesto por la repuesta que recibió 

De repente haru se puso de pie dejando los documentos sobre la mesa en la que estaba trabajando-termine, iré por las papeles que tsuna-san debía firmar-camino hacia la puerta, siendo detenida por las palabras del mayor

-no vengas llorando después, porque te arrepientes 

Sin decir nada haru ,salio del oficina y camino al despacho del décimo vongola, el cual se encontraba terriblemente lejos, sabia que estaba actuando infantilmente , pero no podía evitar, por más que se lo repetía una infinidad de veces, sus acciones contradecía a lo que su mente decía , el sonido del teléfono puso fin a su teléfono

-hola –contesto

-como esta mi niña favorita

-papa-sonrió al reconocer –tanto tiempo sin verte, como esta tu trabajo 

-bien, cariño... haru hija se que estas ocupada , pero necesito que me hagas un favor

-claro-que es respondió, emocionada hacía tiempo que su papa no le pedía un favor, mientras escuchaba las palabras de su padre, sus sonrisa se borro de su rostro- 

-hija se que es mucho, pedir pero ere a la única a quien se lo puedo pedir

Sin saber como negarse a la propuesta de su padre, haru-no te preocupes papa, lo haré-respondió inmediatamente y sin dudarlo 

-gracias hija ,te amo ...discúlpame ahora tengo que colgar, te llamare mas tarde para confirmarte alguna cosa 

-claro..hablamos después-dejo haru algo deprimida ,cuando la llamada finalizo, miro el aparto en su manos-me pregunto si hice bien-se pregunto así mismo, mientras retornaba sus camino, pero tal ves era lo mejor, enma y ella necesitaba algo de tiempo, para pensar en si mismo y en como iría su relación

Al llagar al oficina, toco suavemente y espero la respuesta del otro lado

-pase-escucho la vos de tsuna

Cuando haru ingreso se encontró al decimo vongola sentado en su silla y apenas noto su presencia, dejo de lado su trabajo y se pudo de pie para recibirla-haru, necesitas algo de mi-pregunto con una sonrisa

-si-le devolvió la sonrisa, pero un tono menos alegre 

Tsuna se percato de eso y se acerco a haru para abrazarla -aun no te has arreglado con enma-kun 

La castaña no respondió solo a sitio con la cabeza, mientras correspondió el abrazo del guardián del cielo, permitiendo que su calidez la envolviera ,ambos estuvieron así unos minutos hasta que tsuna se atrevió a hablar-no se lo que paso, pero enma-kun te quiere mucho y se le nota a kilómetros 

-lo se-respondió haru –pero si así de frágil es nuestra relación que puede desarmarse solo por eso ,significa que no esta destinado a durar-hablo seria  

Ante sus respuesta, tsuna rompió el abrazo para mirarla sorprendido-que quieres decir con eso

Haru lo miro directamente a los ojos, confesándole sobre sus dudas y la conversación que tuvo con su padre, el décimo vongola se quedo en silencio escuchando lo que amiga le decía, cuando finalizo decidió preguntar- estas segura haru no seria mejor si....  

-no es mejor así- reafirmo su decisión la castaña –y también es lo mejor para los dos 

Tsuna lo miro sudoso- de acuerdo si eso quieres, no me opondré 

-aun tiene un poco de tiempo, así que piénsalo una vez 

No pudiendo decirle que no la haru sonrió- de acuerdo, pero no cambiare de opinión 

-por cierto tsuna-san vine por los documentos que hibari-san te trajo , ya los terminaste –pregunto notando como décimo vongola ría nervioso 

-solo dame unos minutos mas haru, ya casi termino 

hola gracias por leer cuando los cerezos florecen , espero que le haya gustado