Luna de miel.

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Habían pasado ya un par de días desde de que se celebró aquella magnifica boda entre Steve y Danno, ahora estos se preparaban para un viaje, algo así como su luna de miel. Luego de pedir unos días libres planearon lo que harían, lo próximo que sabían era que estaban ellos dos montados en el auto viajando por una larga carretera que daba al mar, el rubio sacaba el brazo por la ventana y admiraba el paisaje de aquella isla que en un principio le había disgustado tanto, pero ahora gracias a su esposo aquel lugar se había convertido en su hogar, por un momento despego su mirada de aquel paradisiaco paisaje, miro a Steve, lo observo, observo sus lindos ojos y aquella sonrisa, esa tan brillante, sonrió también al sentirse envuelto en aquella burbuja de tranquilidad y amor. El moreno tenía la vista puesta en el camino, con una mano en el volante, la otra sostenía la mano de su pareja, se sentía completo, sentía el anillo del rubio bajo sus dedos, no había mejor sensación que esa.

Era un viaje simple, solo ellos dos, el mar de fondo y la carretera, tampoco tenían un objetivo, total en el maletero llevaban una tienda de campaña más provisiones para un par de días. La idea obviamente había sido sugerida por el seal, luego de insistir por un largo rato y de haberle prometido al rubio la semana más romántica de su vida consiguió que su pareja cediera. Steve en cierto tramo de la carretera no dudo en pisar el acelerador, Danny por primera vez no le grito por aquello, es más, lo disfruto, sonrió aún más sintiendo la velocidad, escuchado complacido el ronroneo del auto, apretó la mano de su esposo, se sentía a salvo.

En cierto punto se metieron por una carretera echa de tierra adentrándose en una especie de pequeña jungla, llegaron a una pequeña playa desierta, oculta tras los grandes árboles y la maleza.

-Lindo lugar.- comento el más bajo al ver aquella blanca playa.- ¿Cómo sabias de esto, babe?

-Descubrí este lugar hace varios años cuando era joven, he venido aquí un par de veces cuando me siento estresado o simplemente quiero estar solo... eres la primera persona a la que traigo aquí.- termino por responder mientras sacaba la tienda del maletero.

El rubio se sonrojo un poco ante las palabras de este, al parecer había sido el primero en muchas cosas en la vida de Steve, en el fondo se sentía orgulloso de eso. Se acercó a su pareja para darle un beso, siempre sentía como su corazón se aceleraba con estos, el cómo sentía aquellas mariposas en el estómago como si fuera siempre la primera vez que lo besara.

-No entiendo cómo un animal como tu puede llegar a ser tan romántico...-termino susurrando al separarse de sus labios, lo miro fijamente, también se enorgullecía de poder dejar sin palabras al marine.

Después de aquella escena terminando montando la tienda entre alguna que otra discusión, aquellos hábitos nunca cambiarían, la noche no tardo en caer, los dos estaban sentados en la arena al lado de una pequeña fogata, Danno se encontraba sentado entre las piernas de Steve y este lo rodeaba en un abrazo, hablaban de cosas sin importancia mientras observaban las estrellas y el mar en calma. Disfrutaban del calor que compartían sus cuerpos, de aquellos besos fugaces que se daban el uno al otro, de las miradas cómplices... disfrutaban de esa burbuja que ellos construyeron en aquella perdida playa.

-Te amo Danny.- la voz de Steve hizo eco en la mente del rubio, este nunca se cansaría de oírlo decir aquellas palabras.

-Yo también te amo Steve.- respondió dándose la vuelta, enredando sus piernas con las del moreno quedando cara a cara, volvió a besarlo, todo se detenía cuando sus labios se encontraban, cuando sus lenguas comenzaban una pequeña batalla llena de pasión.

Danny acariciaba la espalda de Steve dibujando formas inexistentes, mientras las manos del moreno hacían lo mismo bajando hasta el trasero del rubio sacándole un pequeño jadeo a este.

-S-S-Steve v-vamos a la tienda...aaah...- intento hablar el más bajo entre besos mientras movía sus caderas en busca de más contacto, podía sentir el duro miembro de Steve por encima de la ropa.

El Seal se limitó a asentir, levanto a Danno y entre besos terminaron adentro de la tienda de campaña, ninguno de los dos tenía prisa por terminar aquel momento, así que se entretenían entre besos y caricias, se tomaban su tiempo para poder desvestir a su acompañante y a admirar el cuerpo del otro entre toqueteos. Steve amaba perderse por el cuerpo de su compañero y ahora esposo para luego volver a re encontrarse en los labios de este y Danny amaba ser consentido de aquella manera aunque nunca lo admitiera. No tardaron en quedar desnudos el uno frente al otro, en sentir piel con piel, si alguien en aquel momento pudiera verlos vería con que pasión esta pareja entregaba todo el uno por el otro, podría ver como en aquel acto de amor había dos personas que se amaban con locura y que en si habían luchado con todo lo que tenían para al final terminar junto.

Aquella noche término entre gemidos y orgasmos compartidos entre los dos hombres, terminaron tumbados mirando el cielo oscuro lleno de estrellas, aun compartiendo pequeños y tiernos besos entre varios ''te amo''. Ninguno de los dos decía nada, era aquel momento simplemente perfecto, sus corazones latían al unísono, era una luna de miel que ninguno olvidaría nunca.

Creo que casi no hago segunda parte de nada pero con esto pues me hacía la ilu so acá está. Esta parte va dedicada a tomasmendarosartorio gracias por comentar y votar en todas mis historias mcdanno! :3 so dedicarte esto es lo mínimo que puedo hacer para devolverte el favor (? Supongo 😂😅 bueno eso es todo espero que les haya gustado.💓

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