Jiyong sacaba toda la ropa de su armario, la lanzaba sin cuidado sobre la alfombra de su habitación.
Él no quería irse. Pero tampoco quería seguir fastidiando a Seunghyun.
Por qué eso es lo que Jiyong pensaba; que era un fastidio.
Le resultaba algo cómica la situación, puesto que creía tener una oportunidad para ser feliz... Creía.
Maldecía el momento en el que besó a aquel chico pelinegro, joder, tenía que admitirlo, eso había sido desesperado.
Dobló la ropa, teniendo en todo momento esa pequeña esperanza, de que Seunghyun tocara la puerta y le pidiera que no se fuera, y le diera una oportunidad para estar junto a él.
Pero eso no iba a pasar.
Dejó las cosas a un lado y se acostó en su cama, mirando a la ventana. El cielo estaba soleado. Jiyong sonrió. Sonrió para no estar aún más triste.
Siguió apreciando la vista, la ventana sabe los secretos de su corazón.
El amor duele.
Es un sentimiento muy hermoso, sin embargo siente que no es para él...
Suspira cansado y cierra sus ojos.
El cielo parece haber sentido su tristeza; el día soleado se convirtió en lluvioso.
Lágrimas de frustración deslizaban por sus mejillas, cayendo a la par de las gotas de lluvia.
—Sigues siendo hermoso cuando te miró -sonrió triste viendo a Seunghyun dormir plácidamente- Odio arruinar todo, en verdad me odio, bebé.. -susurró a la nada, simplemente dejando salir sus pensamientos.
Quería gritar, llorar, maldecir, rogarle a Seunghyun que no lo dejara ir.
Pero hay que tener las cosas tal como son; Jiyong y Seunghyun sólo son "Amigos". Jiyong estaba enamorado solo. No era correspondido.
Jiyong salió al balcón de su habitación, dejando que las gotas de lluvia limpiaran sus lágrimas.
Deja que llueva, borra el dolor..
—Mírame, llorando por ti. Me tienes mal, muy mal..
Siguió acomodando sus maletas, intentando convencerse a si mismo que esto era lo mejor.
Entre sollozos pasó el tiempo, cuando notó que ya tenía todo listo para partir.
Con maleta en mano bajó las escaleras, no sin antes decirle adiós a su vecino a través de la ventana. Esta podría ser la última vez que decimos adiós.
Sonrió irónico al ver que ya había oscurecido..
—Buenas noches, hyung..
No quería despedirse, eso era cierto.
Pero tenía que dejarlo ir... Aunque doliera mucho, aunque él sufriera eso era lo mejor para Seunghyun, y Jiyong haría todo por él.
Sacó una libreta de su mochila, y en una de sus hojas comenzó a escribir una última nota.
“Siendo sincero, tenía una pequeña esperanza que vinieras a mi puerta, a pedirme que no me fuera. Supongo que no todas las ilusiones se cumplen... Duele.
De todas maneras te doy gracias por no cubrir la ventana, fue lindo verte por última vez.”
—K.JY
Y sin más, partió al aeropuerto, caminando bajo la lluvia, despidiéndose del chico de la ventana..
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