Infiel Al Mundo

Dia 13: ¿Tu eres tonto o te haces? pt 2

Después que se levantarán a atacarlos se veían muy confiados lo cual era raro, era millones de veces mejor el que ellos pero Archi sacó la cáscara de un plátano y si que​ se diera cuánta la puso detrás de el, Hera tomo un perfume y sal de su bolsillo, Orfeo reviso un palo con pinta muy afilada que extrañamente tenía un botón, ¿Qué planeaban hacer?:

-Son unos malditos pubertos no podrán contra mi o mi fuerza, mucho menos mi velocidad.
-Eso lo sabemos.
-Pero lo que tú no sabes.
-Estas que conocemos tu debilidad.
-¡Mamadas! no tengo debilidad.-

Hasta que Archi lo empujó hacia la cáscara y resbalo, Hera tomo la oportunidad para lanzarle sal a los ojos y perfume:

-¡¡Ahgg!! ¡¡¡malditos niños!!!.-

Orfeo oprimio el botón de ese palo y se estiró convirtiéndose en una lanza no muy grande con la que atravesó por el pecho a nuestro oponete, mi tío quedó completamente quieto, lo habían vencido se emocionaron y pusieron felices comenzaron a festejar... pero solo yo me dí cuenta de algo:

-¡¡¡Hera, maldito desgraciado!!!.-

El se quitó la lanza y atacó a Hera atravesando su espalda, Archi lo golpeó pero no sé inmuto:

-¿Enserio pensaron que era tan débil?.
-¿Como le pudiste hacer eso a mí hermanita, te juro que acabaré co...
-¿Con quien muchacho?.

Lo dijo de un momento a otro que ya estaba en su cuello su mano con cuchillo sostenido:

-Maldito.
-Dime lo que quieras, después de todo no me haría amada aunque pudieses.-

Aunque de la nada algo negro y bastante fuerte lo sujeto:

-¡¿A-archi?!.
-No me distraigas bastardo.-

Decía mientras tomaba del brazo a mi tío con su flama y lo estiraba hacia el:

-¿Con que tu tienes ese poder eh?.
-Pudrete.-

Susurro Archi:

-Vamos que esperas maldito indio, ¡¡ataca!!.-

Solo dijo eso y Archi ya lo tenía del brazo aunque Archi lo estrellaba en el suelo y demás sitios duros mi tío solo reía diciendo:

-¿Eso es todo? crei que eras más fuerte maldito desgraciado.
-¡No sabes nada!.-

El daba golpes "fuertes" con su llama pero no le afectan los ataques, parecía invencible no le había dolido nada, incluso, dejó muy heridos a todos. Cuando pasó aproximadamente 30 minutos de pelea, Archi estaba exhausto y sus ataques ya eran demasiado lentos:

-Que estupidez.-

Dijo mientras le insertaba un golpe directo al pecho a Archi, el callo muy cansado:

-Vamos, levántate ¿no me ibas a derrotar?.
-...-

Comenzó a darle golpes ligeros ya en el suelo, pero recordé un truco que me dijo que me iba a ayudar algún día pero no crei que si lo fuera a utilizar:

-Or... Orfeo, acércate.
-¿Ha-ades, está bien?.
-Cállate y escucha, distraerlo solo 1 minuto para acercarme a Archi.
-Okey, pero ¿Qué planeas hacer?.
-Ya lo verán.-

Se levantó con dificultad Orfeo y le aventó una piedra:

-¡Eh imbécil, ven por mi si puedes!.
-¿Sigues de pie eh? Entonces vamos.-

Como pude me acerque arrastrándose a Archi:

-Archi, ayuda a levantarme.
-No Hades, aquí termina todo hasta tu ya te diste cuenta.
-Solo tenemos una pequeña oportunidad levántame.-

El me tomo del hombro y con su ayuda quede de pie y le dije en el oido:

-Archi, pon tu mano en mi espalda y concentra tu magia en la palma de tu mano, por favor.
-Necesitas de mi poder.
-Desgraciadamente, me di cuenta que solo no podré contra el.
-Okey lo haré.-

Hizo justo lo que le pedí y su magia y la mía de alguna forma se mezclaron dentro de mi, de un segundo a otro ya había recuperado los energías y fuerza:

-Descansa, yo me encargo del resto.
-Solo acaba con el.-

Yo estaba más que conciente que no podría matarlo pero si podía hacer algo mejor:

-¡Oye pelea contra mi infeliz!.
-¿Con que quieres que acabe con esto?, me agradas sobrino.-

Antes de que el se dirigiera hacia mi comencé a escribir en un papel unas palabras lo más rápido que pude:

-¡Te llevaré al Inframundo yo mismo Hades!.
-¡No si puedo evitarlo!.-

Con  toda mi concentración lo esquivé y le pegue ese papel en su brazo:

-¿Que esto? no sirve tu magia contra mi lo sabes.
-Tal vez mi magia no te haga no cosillas, ¿pero que dices de mis sellos?.
-¡E-espera, no!.-

El de un momento a otro desapareció, todos estaban confundidos, incluyendome después de mucho tiempo me sirvio ese truco, solo quedó ese papel de color negro, lo tome y lo guarde:

-¡Hades, hay que ayudarla!.
-No te preocupes, también puedo citar a la gente.-

Concentre mi fuerza en la herida de Hera dejándola cicatrizada, pero no despertaba:

-No me digas que, mí hermanita.
-Eso no es nada siempre fue muy fuerte, en un rato despertara.-

Archi arrastrándose se me acercó:

-¿Lo... lograste?.
-Bueno...-

Saqué de mi bolsillo el papel, tome una botella y puse un sello mientras ponía el papel dentro y lo tapaba:

-Creo que no molestará en un buen tiempo.
-Estas un alivio, vamos a irnos ya Hades, ya ocasionamos muchos problemas aquí.
-Tienes razón Archi hay que salir en rumbo del siguiente pueblo, tampoco hay que empeorar las cosas en este sitio.-

Y así solo nos curamos tomamos un poco de alimento y salimos de nuevo a la siguiente parada.
En el camino Hera despertó y nos detuvimos:

-¿Que sucedió?.
-¡Hera estás bien!.-

Dijo Orfeo y Archi mientras la abrazaban:

-No me ocurrió nada malo chicos jaja.-

Me acerque y le dije:

-Si no te hubiera curado, pudiste haber muerto, lo siento.- la abrace.
-Los siento de no haber sido por mi, nada de esto hubiera pasado, lo siento.... Lo siento.
-Tranquilo, después de todo ¿estamos aquí para ayudarte no?.
-Muchas gracias, enserio.-

Hace mucho que no quería a alguien como amigos y esos tres les había agarrado cariño, pero no lo deje ver:

-Bueno que miran para de imbéciles hay que seguro con el viaje, ¿Están listos?.
-Pues...
-No me importa sigamos.-

Después de todo fuimos a un sitio tranquilo, El Pueblo de los Árboles, un sitio tranquilo donde robamos a comenzar a descansar y pasar un buen rato, hasta entonces.