Capítulo 4

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Vamos, vamos ¡Vamooos! ¡No lo soporto! ¡Que sean las cuatro! ¡Por favor!

Esto nunca había sido tan difícil. Durante el día tuve que dar tres clases de dos horas cada una, todas seguidas, y solo he tenido diez minutos de descanzo, ni siquiera he podido comer.

Hoy, estaba enseñando a otro salón. Estaba tan silencioso porque les di el mismo examen de entrada que al salón de ayer.

Emily me dijo que cuando terminara la clase, la buscara para enseñarme toda la universidad, ya que solo había estado en la zona de los salones. El campus tenía diferentes zonas: laboratorios, auditorios, cafeterías, zonas públicas, zonas para deportes, etc.

Solo faltaban quince minutos y me podría ir. Pero antes de pasar donde Emily, pensaba ir a comer porque en esos diez minutos solo me alcanzaron para ir de una aula a otra.

Ocho minutos. Algunos ya habían terminado sus exámenes y se fueron.

Cinco. Ya la mayoría terminó. Aunque esté muy apurada tengo que esperar a que todos salgan.

Ya terminó, todos me entregaron las pruebas. Unos pocos se quedaron para preguntarme algunas cosas y después se fueron. ¡Ya me puedo ir!

Salí tan disparada que no me di cuenta que alguien está al frente mío. Me choqué con esa persona y caí sobre mi trasero.

-Perdón... Perdóname. Oh Maia, mierda, lo siento...

-Ya ya. Yo no estaba viendo.

-Nunca te había visto por aquí. ¿Qué estudias?

-Yo nada. Matt tu sabes que mi mamá me enseñó. Yo solo enseño.

-Ah. Oye, toma, ven. -Me extendió su mano y me ayudó a levantarme.

-Gracias. -Le sonreí.

-¿Ya comiste?

-No, todavía. Justo estaba yendo a comer.

-¿Quieres almorzar conmigo?

-Bueno iba a ir a la sala pero si quieres voy contigo. -Me sonrió y comenzamos a avanzar.

-Este... Respecto a la salida ¿Qué dices?

Llegamos al comedor y hacemos fila para comprar.

-Ah sí, Daniel me dijo que no podía ir. Pero yo sí. -Le guiñé el ojo. Wow que tal mentira.

-¡Sí! Ah...digo... Bien. -Se rió nervioso, trató de ocultar su entusiasmo y yo me burlé de su intento fallido. -¿El viernes puedes?

-Sí. ¿A las seis?

-Ya. Iré a recojerte.

-Pero...

-No, yo voy.

-Está bien. -Nos sentamos en una mesa pequeña y comemos.

Seguimos hablando de muchas cosas. Me preguntó desde cuándo trabajaba ahí, qué enseñaba y otras cosas.

-¡Matt! -Él giró para ver quién le llamó, pero era fácil saber porque su voz era una pizarra siendo rayada por una garras. -Ay Matt, ¿Por qué andas con la profesora?

-Hola Keysi. -Él le saludó. -Es mi amiga. ¿Qué deseas?

-Nah. Solo quería decirte que voy a salir, ya sabes. Y Jake se fue a la casa y que también quiere estar solo, o sea no quiere a nadie en la casa. -habló como si nadie le entendiera, luego me miró y su cara se arrugó de una forma tan graciosa, que casi escupo mi bebida en su cara.

Matt me miró divertido y su hermana, se retiró molesta.

-¿Por qué te ries?

-Nah, por nada. -seguí riendo.

Studying you [Cancelada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora