Amortentia ➵ Cedric Diggory [PAUSADA]

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Capitulo once

Luego de ese comentario de parte de Bonnie, los tres niños fueron llamados a comer, claramente, Bonnie continuo riéndose de las caras de los otros dos chicos.

-Ya basta Bonnie -dijo Kelsey, ya con su color natural, mientras se dirigían al jardín.

Cuando llegaron, Bonnie se sentó entre Connor y su madre, Evelyn. Kelsey se sentó del otro lado de su hermano, y Cedric ocupó el último lugar libre que quedaba, al lado de Kelsey y frente a su madre.

La cena fue deliciosa, los adultos estaban discutiendo algo sobre el Ministerio de Magia, a la vez que Kelsey y Cedric conversaban sobre diferentes cosas que les interesasen. Al ver a los amigos riendo a carcajadas, Amos Diggory les dirigio una mirada curiosa. La señora Diggory y Evelyn compartieron una mirada significativa.

-¿Qué se traen ustedes dos? -dijo con picardía Evelyn. Los niños pararon de reír al escuchar esa pregunta, y sentir todas las miradas sobre ellos, para luego sonrojarse

-¡Ese es mi hijo, un campeón! -Exclamó Amos Diggory

-¿Por qué todos piensan lo mismo? Tan solo somos amigos -le respondió Cedric, un poco nervioso al ver las miradas asesinas que Connor y Bryson le estaban dando.

-Más te vale -gruñó Connor, y tuvo un brillo de malicia en los ojos -. No tendría problema de enviarte un dragón a tu casa... por accidente.

-Basta Connor, lo asustas -dijo Bonnie riendo de la palidez extrema de Cedric. Todos los presentes comenzaron a reír, excepto los dos amigos.

-Kelsey, ¿podrías ir a buscar el postre? Por favor -le pidió su madre -. Y tu, Cedric, ¿la ayudas?

-Claro, señora Gray.

Los chicos se levantaron, y se dirigieron a la cocina para cumplir con lo pedido.

-Eso fue un poco extraño, ¿no crees?

-Bastante

Kelsey se encontraba delante de Cedric, guiándolo hacia la cocina, cuando escucha un ruido detrás de ellos. Se dio la vuelta rápidamente tropezando con Cedric, causando que los dos cayesen al piso. Al caer, los labios de Kelsey se estrellaron con los de Cedric, accidentalmente, los labios de Kelsey estaban fríos, a diferencia de los de Cedric, que estaban cálidos.

Hubo unos segundos en los que no reaccionaron, pero cuando volvieron a la realidad, Kelsey se levantó de un golpe y se sonrojó completamente. Le tendió una mano para ayudar a Cedric a levantarse sin mirarlo. Ingresaron a la cocina, sin atreverse a mirarse, y llevaron el postre hacia la mesa nuevamente.

-Em, yo, eh, lo siento, ehm, ¿hacemos de cuenta que no pasó nada? -dijo Kelsey, una vez que se sentaron y pasaron unos momentos sin hablarse.

-Si, eh, eso te estaba por decir -Dijo, y luego le sonrió tan tiernamente que a Kelsey se le hizo imposible no devolverle la sonrisa.

Comenzaron a charlar tan animadamente como antes del accidente, también conocido como beso.

-Nos vemos en unos días, Kels -se despidió Ced al finalizar la cena-. Por cierto, te ves hermosa -le dijo al oído a Kelsey, esta se puso de puntillas para besar la mejilla de su amigo, y luego río por el color que habían tomado estas.

-Nos vemos, Ced.

-Tenemos que hablar, Keels -dijo su hermana detrás de ella, una vez que los Diggory se hubieran ido.

-¿De? -dijo Kelsey un poco nerviosa, lo único que se le ocurría, era el beso, pero era imposible que lo haya visto, ¿o no?

-¿Como de que? Cuando volvieron de traer el postre, volvieron ambos sonrojados hasta las orejas y no se dirigían la palabra, ¡ni siquiera se miraban! Vamos a tu habitación, ya me cuentas todo.

Al llegar a su cuarto, y cerrar la puerta, Bonnie se sentó en la cama de su hermana, esperando ansiosamente que comience a hablar

-¿Que quieres saber? -le pregunto Kelsey mientras se sentaba.

-¿Se besaron? -dijo Bonnie directamente, sin poder contener su emoción. Como respuesta, Kelsey se sonrojó y su hermana pego un gritito. Kelsey comenzó a relatarle a su hermana lo sucedido con Cedric. Al terminar, su hermana le dijo:

-Le gustas, es obvio.

-¿Qué? No, eso no es cierto.

-¿Y eso por que seria?

-Somos demasiado chicos, ¿no lo crees?

-No, no lo creo, pero está bien, ya veras como tengo razón.

La verdad, eran tan solo excusas que Kelsey decía, no podía creerlo, no quería creerlo.

-Piensa en lo que te dije, buenas noches.