Tyressia - El Origen de Valen

Blackshear: El bosque sombrio

Estaba cayendo la noche, y cada vez se hacía más fresco el rastro del krnok y más peligroso por la escasa luz que se filtraba a través de los árboles. Cada vez más cerca de darle caza Valen divisa a la distancia al animal, imponente, feroz y sin haberse percatado todavía de su presencia aprovecha el momento para sacar su arco corto de abeto que su padre le había regalado al cumplir sus 14 ciclos. Busca un claro para tener mejor ángulo de tiro y más posibilidades de matarlo de un solo intento, sabiendo que si falla este tiro podría caer muerto ante la embestida del krnok. Valen saca la flecha de su carcaj de cuero, apunta hacia el animal y realiza el tiro, este penetra entre el lomo y el cuello del krnok haciendo que se tambalee, pero no caiga muerto. La bestia furiosa busca desde donde la habían atacado y divisa a Valen cargando su segundo proyectil para así darle muerte, pero la bestia es más rápida de lo que contaban los campesinos y le dio alcance en un abrir y cerrar de ojos, sin darle tiempo a lanzarle una nueva flecha.

Ya entrada la noche Valen despierta, con un fuerte dolor de cabeza y sin entender que había pasado se encuentra acostado en medio del claro con una sensación de hormigueos por todo su pecho. Cuando logra incorporarse encuentra al krnok muerto a poca distancia donde se encontraba su arco, pero a unos 12 pies de donde se encontraba el mismo.

El animal debería pesar aproximadamente unos 150 kilos, un peso importante para llevarlo desde el bosque hasta su casa, pero bien lo vale el esfuerzo ya que con toda la carne del animal tendrán comida para unas semanas. Cerca de la media noche Valen llega a su casa arrastrando al krnok.

Tyren: ¿dónde has estado Valen? Ya es casi la hora del rocío y tú no aparecías.

Valen: He ido al Blackshear para ver si podía cazar algún animal.

Tyren: sabes que la caza en Blackshear (bosque sombrío) está prohibida, si te encuentran los guardias del Rey terminaras en el calabozo, o algo peor.

Valen: si, lo se padre, pero vale la pena el riesgo. No tenemos casi comida, y últimamente todos los encargos de la herrería para el reino los toman como pago de los impuestos. Algo tenemos que hacer, se acercan las festividades de las cosechas y no tendremos nada para ofrendar y sabes que es lo que hacen cuando eso pasa.

Lizbeth: Si Valen, se llevan al hijo mayor para que sirva en las fuerzas del Rey. Tyren, déjalo en paz, está tratando de ayudar únicamente.

Tyren va a la parte trasera de la casa, donde Valen dejo al krnok y quedo petrificado al ver cuál era la bestia que había traído su hijo. No podía ser, un krnok, es una bestia que solo estaba permitida ser cazada por miembros de la realeza o por orden de ellos. Esto sí que era un problema.

Tyren: ¡VALEN PRENDEFUEGO!!!! ¡Cómo se te ocurre traer esto a tu casa! Si lo descubren aquí no solo te llevarán a ti, sino que también prenderán fuego a nuestra casa con nosotros dentro. Sabes que está prohibido y castigado con la muerte la caza del krnok.

Valen: Si, pero si lo despostamos antes y tiramos los huesos cerca de los corrales de animales puede pasar como cualquier otro animal.

Lizbeth: es mejor que nos demos prisa, antes que amanezca y pueda venir alguien y vea esto aquí.

Estuvieron todo lo que quedaba de la noche, limpiando a la bestia y cortando la carne en trozos pequeños para que no pueda ser reconocida. Terminando la noche Tyren llevo un cubo con todos los huesos del animal y los tiró en el vertedero cercano a los corrales, con la esperanza de que nadie lo vea ni descubrieran de qué animal eran los huesos.

Ya de vuelta en su casa Tyren no logra entender cómo es que Valen ha podido matar al krnok con una sola flecha y en esa ubicación... ningún animal de ese porte caería muerto y menos con la fuerza del arco que tenía Valen.