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chapter one | fix a heart

chapter one | fix a heart

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Querido diario... hoy empieza una nueva etapa de mi vida. Te has de preguntar... ¿un chico escribiendo un diario? Ni yo me creo que yo, Scott, esté escribiendo un diario pero necesito desahogarme.
No hace tanto perdí a mi novia, Allison. Cuando creí haberla superado me volví a enamorar, y hace unos meses Kira se fue a otro país dejándome solo. La vida no es buena conmigo. Ni el amor. Pero tampoco es algo que me interese. Enamorarme.
Ojalá sea un buen inicio de último año.

El día comienza normal. La típica rutina de cepillarse los dientes, ponerse ropa, lavarse la cara, comer, etc. Nada interesante en mi rutina  (y en mi vida). Me decido a bajar los escalones y me encuentro a mi mamá.

     "¿Seguro que quieres hacer esto?" Me dice ella con un tono de preocupación y me bloquea el paso.

     "Ya hablamos de esto mamá. Estoy bien. Permiso." Le digo y trato de seguir mi camino pero ella me bloquea el paso de nuevo.

     "Scott... la chica que más amaste se murió en un accidente de auto. No me gusta recordar lo horrible que lloraste ese día. Y los siguientes. Después te volviste a enamorar y ella se fue. No creo que estés bien, cariño."

     "Mamá no se puede reparar un corazón. Por más pegamento que le pongas, siempre van a quedar grietas y hay riesgo de que se vuelva a hacer pedazo. Ahora déjame pasar por favor  tengo que ir al colegio." Le digo con dolor, nostalgia a pesar de que no se me notara. Recordar a Allison me hacen dar ganas de llorar y no parar. Recordar a Kira me hacen querer tirar todo al suelo porque no luché por ella.
Resumiendo... tengo mala suerte en el amor. Tomo mis audífonos de la mesilla al lado de la puerta de la casa y salgo. El día no está soleado, pero tampoco esté triste. Es como... mi estado de ánimo. Neutro. Conecto los audífonos al celular y pongo colors de Halsey. Hace un poco de frío en la ciudad, así que pongo mis manos en mis bolsillos para cubrirme un poco de este frío. La niebla empieza a cubrir el día. De la nada ya estoy en el colegio, pues no queda lejos de mi casa. Entro y veo a muchos saludarse, abrazarse, otros se están besando, otros literalmente comiendo.
Yo sigo distraído por la música y mi mente se empieza a llenar de memorias.

      "Recuerda que te amo" me dice Kira antes de subirse a aquel auto, dejándome con el corazón roto.

     "Eres mi primer amor Scott. Siempre te voy a amar." Dice Allison antes de tratar terminar conmigo. Lo curioso es que horas después tuvo el accidente donde murió y dejó un vacío en mi corazón.

Sigo distraído por las memorias de aquellas dos chicas que me enseñaron que es el amor, pero ninguna se quedó en mi vida. De un momento a otro siento el pecho de otra persona y la caída de algo en el suelo.

     "¡Lo siento! ¡Lo siento muchísimo!" Dice una castaña mientras trata de recoger sus libros.

     "No. Perdóname a mí. Estaba muy distraído." Le contesto y la ayudo a recoger sus cosas. Coge un mechón de su largo y ondulado cabello, y se coloca detrás de su oreja dándome una mejor impresión de su rostro. Blanca pálida, pero con unos labios carmesí que resaltan, una sonrisa grande y bonita. Y unos ojos... unos ojos tan profundos como la Vía Láctea.

     "Muchísimas gracias." Se levanta con sus libros en mano. "Soy Camille" me dice, y seguido a este me da su mano en forma de saludo.

      "Soy Scott. Un placer en conocerte." Le entrego también la mano y ambos nos sonreímos. Siento algo que me hace temblar. Una corriente. La típica corriente de la que hablan cuando uno está enamorado. Por esta razón enseguida la saqué. Tengo miedo. Esto fue lo mismo que sucedió la primera vez que Allison o Kira me dieron la mano.

     "Mmm... tengo que ir a clase. Tengo historia" le digo para tratar de evadirla y ponerme en marcha

     "¿¡Serio?! ¡Yo también! ¡Si quieres te acompaño!" Me dice ella entusiasmada

     "Me encantaría pero..." trato de buscar una excusa para que no me acompañe "voy al baño primero" le contesto

     "¡Te acompaño!" Me dice ella a lo que quedo sorprendido y ella se empieza a reír nerviosa "Perdón. No me refiero a que te acompaño exactamente al baño. Si quieres te espero afuera" me dice y me calmo un poco.

     "No... prefiero que llegues a clase primero y así..." Quería seguir hablando pero ella me interrumpe.

     "Mira. Te lo ruego. Déjame acompañarte. No conozco a nadie y no quiero estar sola aquí. Por favor. No me dejes." Me dice

No me dejes eso fue una de las últimas cosas antes de recordarme que me ama y subirse en ese auto. No puedo hacerle esto a ella.

      "Está bien." Digo y le ofrezco mi mano para caminar juntos. Ella la toma y me sonríe.

     "¿Cuál es tu historia Scott?" Me pregunta ella mientras caminamos a clase

     "¿Mi historia?" Le pregunto confundido

     "Todos tenemos una historia que nos define quienes somo y como somos. ¿Cuál es la tuya?" Ella me vuelve a preguntar.

     "Soy un chico de dieciocho años que ha sufrido mucho los últimos dos años. Mi primer amor murió en un accidente automovilístico, y mi otro amor se fue a otro país." Le digo triste y mientras escucho como mi corazón se cae a pedazos de nuevo.

     "Dicen que tenemos tres amores Scott. El primero es aquel mágico, el del cuento de hadas. Supongo que así fue tu amor con aquella chica" me dice ella. Y... tiene razón. Todo parecía mágico con ella. "El segundo es aquel en donde aprendemos como queremos ser amados. Supongo que te diste cuenta que tipo de chica quieres para tu vida con aquella que se fue a otro país." Me dice y de nuevo tiene razón.

     "¿Y el tercero?" Le pregunto mientras seguimos caminando.

     "El tercero es aquel amor apasionado que nunca vimos venir." Me dice ella. Supongo que aún no he encontrado a mi tercer amor.

Human ▸ Scott McCallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora