Lucifer [Supernatural] (Actualizaciones Lentas)

∆ CAPÍTULO 3 ∆

Los débiles rayos del Sol al amanecer se colaban entre las delgadas cortinas en las ventanas de la habitación. La suave y fría brisa de la noche se volvía más cálida conforme el Sol se asomaba por el horizonte,iluminando todo debajo de él.

Mis manos temblaban sin control alguno junto con mi respiración agitada que igualaba a la de una persona que acaba de correr una maratón entera,sin parar,sin tomar aire.

Veo la puerta de la habitación y del otro lado sé que está el arcángel caído,pensando en solo él sabe qué cosas.
Me giré a mi derecha,en donde estaba mi tocador y en este un gran espejo. Mi reflejo era la definición perfecta de "Miedo". Mis ojos exhaustos de tanto llorar del terror,mi piel pálida por el frío,grandes bolsas del cansancio bajo mi ojos,hecha un ovillo sobre la cama.

Tenía que ser fuerte,superar esto, acostumbrarme a tener a Lucifer bajo el mismo techo que el mío. Afrontar la situación. Si hago todo bien,como él me pida, viviré ¿No?.
¿Y sí me pide que mate a alguien?,¿Que esconda un cadáver?,¿Que sea complice en un asesinato?,¿Que sacrifique mi vida para un ritual?

Santo Dios...

Entonces estaría en grandes problemas cuando no quiera hacer alguna de esas cosas. O bueno,todas esas cosas.

Soy cirujana. Salvo vidas,no acabo con ellas. No estaría dispuesta a tal atrocidad.

Salgo de la habitación en pasos sordos y ligeros,tratando de no alarmar al arcángel sobre el sofá,sin embargo,cuando nota mi presencia,me mira unos segundos de pies a cabeza y luego vuelve a apartar la vista.

«Está bien. Todo está bien.» Pensé para tranquilizarme.

Me acerqué a la cocina y tomé un vaso con agua por todas esas lágrimas que me dejaron seca como hoja de papel.

—Quiero aclarar algo. –De repente hablé. Mis labios se habían movido sin mi permiso,las palabras se habían revelado en contra mía.

«¿Qué estás haciendo?». Pensé asustada

—¿Qué?. –Pregunta Lucifer mirándome.

Lo miré directamente a los ojos y empezé a formular palabras coherentes en mi cabeza para que no sonaran tontas cuando salgan,pero a veces no funcionaba.

—Tu... No me harás matar a gente... ¿O sí?. –Tan tonta como siempre. Bien hecho Jenn,por algo Lucifer vive contigo.

Lucifer frunce el ceño y mira a ambos lados,como si alguien más hubiese escuchado tal pregunta.
—¿Por qué habría de pedirte tal cosa?. –Pregunta extrañado. —Si quiero a gente muerta,es mi asunto,no el tuyo. –Suspiré un poco aliviada. Más por el hecho de que no mataré que por la gente que morirá en manos de Lucifer.

—Bien,solo... –Bajé la cabeza, avergonzada.—Quería aclarar eso y ya,me tenía preocupada. –Él asintió y volvió a apartar la vista de mí,hasta que habló.

—Jenn,que vivamos en la misma casa no significa que perjudiquemos la vida del otro. Cada uno con sus problemas,¿Okay? –.

—Okay. –Respondí y fui a bañarme cuando ya era hora.

Durante la ducha, olvidé por completo todo sobre mi vida. Olvidé quien era yo,en donde estoy y qué ha pasado años atrás. Solo era yo,el agua que caía de la regadera y mi espacio. Solo eso.
Después de unos minutos,mi alma volvió a la realidad y recordé todo casi de golpe.